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Helena se había levantado más temprano de lo usual hoy, ya que estaba nerviosa por lo que el doctor le diría, caminó hasta la cocina en busca de hacer algo, porque se había despertado a la 7:45, había tomado desayuno y las 8:30 estaba lista y aún ...

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Helena se había levantado más temprano de lo usual hoy, ya que estaba nerviosa por lo que el doctor le diría, caminó hasta la cocina en busca de hacer algo, porque se había despertado a la 7:45, había tomado desayuno y las 8:30 estaba lista y aún faltaba una hora y media para la cita con el doctor, por otra parte estaba nerviosa ya que Jade ayer por la noche la llamó diciendo que pasaría por ella a las 8 y aún no llegaba, se dijo que quizá estaba aún durmiendo.

Y la castaña no estaba tan alejado de aquello Jade se vestía con rapidez debido a que estaba atrasado en la hora que le había dicho a Helena, su retraso fue porque en la noche terminó de leer el libro de Helena y se sentía avergonzado después de que lo había terminado.

Después de 10 minutos ya se encontraba arreglado, tomó las llaves del mesón y salió de su casa, se montó en el auto y prendió el motor, para luego dirigirse a la casa de la castaña.

Por su parte Helena miraba constantemente el reloj que tenía en la pared del living, ya eran las 9 y temía que a Jade le hubiese pasado algo, así que se decidió a llamarlo y para cuando sonó indicando que estaba llamando, el timbre de su casa sonó, cortó la llamada y abrió la puerta.

—hola —saludó el castaño—.
—pasa, me coloco el abrigo y nos vamos —sonríe—.

Se puso su abrigo y juntos se fueron a la clínica, no hablaron nada durante el trayecto y una vez en el estacionamiento se bajaron y caminaron dentro del recinto, corrieron hasta la consulta del doctor ya que solo faltaban minutos para su hora.

—Helena Miller —habló el médico saliendo de la consulta—.
—aquí —gritó Helena mientras corría—.

Ella y Jade entraron jadeando, respiraron profundo y luego se sentaron.

—bien chicos aquí están los resultados —sonríe el doctor— y lamento informarles que tu Helena no puedes tener hijos de forma natural —la sonrisa de la chica se desvanece— pero si puedes tener un hijo de forma in vitro —la castaña miró a su acompañante y lo abrazó con fuerza, mientras lloraba en su hombro—.
—gracias Jade.

Después de que el doctor diera todas las indicaciones y medicamentos pertinentes, ambos salieron de la consulta, para arreglar las cosas de Helena y empezar con el proceso lo antes posible, una vez dentro del auto Jade besó a Helena

—al fin seremos padres —sonríe—.

La chica no daba crédito al beso tan inesperado de su amigo, sin embargo, no prestó mucha atención ya que estaba muy entusiasmada

Una vez en la casa de Helena ambos bajaron, la joven de baja estatura invitó a pasar al castaño y este accedió.

—desde ahora nos pasaremos en la clínica —suspira el chico— pero todo sea por tener a nuestro hijo —sonríe—.
—Jade recuerda lo que dijo el médico, existe la pequeña posibilidad de que a la primera no funcione —le hizo ver—.
—ha nosotros no nos pasará —la abraza y luego besa su frente— te quiero Helé.

La chica se sintió desfallecer y se aferró más a su amigo, él por su parte sabía que eso la había hecho feliz y demonios aquella forma de aferrarse a él sólo hizo que él se encendiera, sin embargo, debía abstenerse por 5 días de tener relaciones según las indicaciones del médico.

—también te quiero Jade.
—Helena yo... —dijo el castaño— ¿quieres ser mi novia?
—Helena lo miró sorprendida—¿me estas tomando el pelo? —el negó—. estúpido —ríe, para luego besarlo-
—¿eso es un sí? —pregunta Jade y ella asiente—.

Luego de aquella conversación, arreglaron las cosas y se fueron de vuelta a la clínica, en el trayecto Helena acariciaba el cuello de su novio mientras lo miraba

—deja de mirarme así mi amor —ríe—.
—me has dicho mi amor —sonríe la chica—.
—¿eres mi novia no? —ella asiente sonriendo— muy bien mi flor, hemos llegado.

Salieron del auto y la chica fue a recepción para que pudiera avisarle al doctor su llegada.

—me dice que lo esperen diez minutos ya que esta con una paciente —le dice amable la joven—.
—está bien —asienten ambos—.

Esperaron lo que correspondía, hasta que el doctor salió y luego dentro de su consulta empezaron a hacer todo el papeleo, con las ordenes, la hora de los exámenes, etc.

—muy bien chicos los veo dentro de poco y sigan las indicaciones al pie de la letra —les sonríe—.

Los dos jóvenes salen de la clínica, para ir a algún restaurante a almorzar juntos.

—bien Helé ¿qué pedirás?
—lasaña ¿y tú?
—lo mismo —sonríe—.

—bien Helé ¿qué pedirás?—lasaña ¿y tú?—lo mismo —sonríe—

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HOPE (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora