Pasaron tres años-
Elena estaba en 1º de bachillerato ya que, debido al accidente, tuvo que repetir los dos cursos que no recordaba. No había progresado nada y, sin embargo, todas las noches cuando se acostaba en su cama veía el espejo. Se dormía mirándolo. No sabía por qué, pero le producía una sensación rara.
Era de noche. Elena se iba a dormir y volvió a mirar el espejo. Esa noche no era como otra cualquiera. No, esa noche el espejo estaba diferente. Sus cristales nos estaban igual de limpios. Estaban oscuros, tenían huellas de dedos que, aún que Elena quisiera, no podía limpiar.
"Qué raro. ¿Por qué no se quitarán estas huellas? El espejo estaba limpio...
-Hola, ¿me recuerdas? -aquella voz salió del espejo. Elena se sentó en la cama pues, sentía que iba a caerse.
-¡No, otra vez no te desmayes! Por favor
-¿P-p-pero?
-Shh. Dime, ¿me recuerdas?
En el espejo apareció el rostro de un niño de unos 7 años que tenía la cara muy delgada. Tenía el pelo marrón y unos ojos verdes en los que se podía apreciar, que el niño no estaba bien.
-N-no
-¿No? ¿Por qué no miras en tu caja de lápices? Quizás te de una pista -dijo el niño con una simpática sonrisa en la cara-.
Lo primero que pensó Elena era correr. Debía escapar de aquella habitación. Bajó las escaleras de la litera y, cuando iba a por la caja de lápices que había encima de su escritorio, cambio bruscamente el rumbo. Corrió por la habitación para llegar a la puerta. Pero para entonces ya era demasiado tarde. Pedro había cerrado la puerta e insonorizado la habitación para que nadie escuchara a Elena pedir auxilio. Después de todo, él no pretendía hacerle daño.
-No corras Elena, he cerrado la puerta.
-¡Socorro! ¡Mamá, papá! ¡Ayuda por favor!
-Elena, he insonorizado la habitación. -Elena casi sin aire, se dio la vuelta y miró al techo. Más concretamente, al espejo- Ve a la caja de lápices... por favor.
Con pasos cortos e inseguros, Elena se dirigió a la caja de lápices y la abocó encima de la mesa. Cayeron los lápices, algunos de ellos, al suelo y, al final, apareció una nota. Elena miró al niño del espejo pidiéndole, con la mirada, aprobación para leerla. Pedro, le devolvió la mirada con un gesto que decía que podía comenzar. Elena leyó la carta en silencio y cuando acabó, sus ojos se abrieron como platos. Ya está. Ya recordaba todo. Recordaba en que curso se había quedado, recordaba por qué se había desmayado,...
-Muy bien. Veo que ya estás lista.
-¿Qué? ¿Lista para qué?
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De Detrás del Espejo [Pausada y editando]
Misteri / ThrillerUna chica soñaba todas las noches con un niño triste que le pedía ayuda hasta que un día, lo vio de verdad. Lo que ella no sabía es que, desde ese día, su vida cambiaría para siempre. Irían a un mundo que estaba detrás del espejo y se tendrían vario...