MALA JANE

Capitulo 58

"MARATON" 14/20

Capítulo 58:

Intento abrir la puerta pero esta trae llave, mis demonios arden y tengo ganas de matarlos a los tres de la forma más despiadada y sanguinaria posible. Forzajeo contra la puerta, tengo que arrancarles la piel con un bisturí cuando siento que me tocan el hombro por detrás, instintivamente lanzo un manotazo y Harry aparta su rostro.
-¿Qué te pasa?- dice preocupado.
-¡Abre esta maldita puerta!- doy una patada. La puerta se abre y Danielle se asoma.
Me lanzo sobre ella, la puerta se abre completamente y estoy sobre ella contra el suelo. Tomo su cabello y lo halo con mucha fuerza, ella grita y se tapa la cara.
-¡¡Jane!!- grita Edward y trata de separarnos. Yo lanzo un golpe a él y creo que le quebre el tabique nasal.
-¡Por Dios!- grita Harry y me toma de la cintura, sé que es él, entierro mis dedos más en el cabello de Danielle, no puedo ni quiero lastimar a Harry. Me hala y me traigo a Danielle del cabello.
-¡Suéltala!- dice Ed tomando a Danielle de los hombros.
-¡Eres una maldita, Danielle! ¡¡Eres la peor de las perras!!- me suelto para darle una bofetada pero Harry me aparta muy rápido.
-¿Qué te pasa? ¿Por qué te pones así?- Harry me sacude de hombros.
-¡Lo que pasa es que Danielle es una maldita perra! ¡¡Te regalaste, zorra!!- le grito tratando de abalanzarme sobre ella pero Harry me detiene.
-¡Jane, sólo cálmate!- dice Edward.
-¡Y tú eres un maldito chivo de mierda! ¡¿Cómo pudiste revolcarte con esta zorra despues de lo que hizo?!
-Jane, por favor te juro que yo no sabía, si me dejaras explicarte...-lloraba Danielle.
-¡Cállate, maldita! ¡¡Cállate!!
-¡Suficiente!- Harry me tomo de la cintura y me arrastro fuera de la habitación en lo que yo decía mil y un obscenidades. Entramos a su habitación y me tira sobre su cama.
-¡Suéltame! ¡Maldito Lí-Sellers! ¡Voy a cortarte la mitad del purro y usaré la otra mitad para regar las plantas con tu sangre!
-¡Cállate!
-¡No me grites! ¡Suéltame!- se sube en mí y presiona mis manos contra el colchón.
-¡No te suelto hasta que te calmes!
-¡¡Pues no me calmo!! ¡La maldita perra de Danielle se acostó con Liam! ¡Es una zorra!- agito mi cabeza. Harry frunce el ceño y su mirada oscurece.
-¿Y por qué te molesta que ese tipo tenga algo con ella?- ¿Está celoso? ¿Cómo mierdas se atreve a ponerse celoso?
-¡¡Enserio me haces esa maldita pregunta!! ¡Ella es mi mejor amiga y se acostó con mi ex novio! ¿Te parece poco? ¡Aparte sale con mi hermano y se acuesta con otro! ¡¡Voy a matarla!!- forzajeo y él hace más presión sobre mí.
-¡¡Cálmate, maldita sea!!- dice realmente furioso. Dejo de forzajear.
-Vén, acércate- susurro, él acerca su rostro y me mira curioso- Bésame- susurro en sus labios, él me besa y yo muerdo su labio inferior con fuerza, él gime de dolo y se aparta.
-¡¡Eres una sicópata!!- Esa soy yo, dice mi sicópata interna.
-¡¡Voy a matarlaaaa!!- corro hacia la puerta pero Harry me detiene, me tira a la cama y sigo pataleando. Se levanta y enllava la puerta, me levanto y me tira de nuevo. Toma mi camisa con sus manos y la rompe ¿Qué hace? Tambien rompe mi sostén y chupa mis pechos. La sensación de furia se contrasta con el placer que absorve mi cuerpo. Harry muerde mis pezones y yo gimo llena de placer- ¡No hagas esto!- suplico, aunque muero porque no obedezca. Baja mis pantalones rápidamente y baja ligeramente los suyos- ¡¡No lo hagas!! ¡¡Es violación!!- él se deja caer sobre mí y siento su miembro felíz chocando con mi zona íntima, jadeo extasiada y él me mira a los ojos.
-¿Violación? ¿Crees que esto es una violación?- susurra merodeando mis labios. Desliza su zona con la mía y la fricción causa placer en mí. Jade o una vez más- ¿es violación?- vuelve a restregarse en mí, lo necesito dentro de mí, ahora.
-No- susurro sin aliento.
-¡¿Es violacion?!- grita y entra en mí.
-¡No!- grito mientras me llena. Entra y sale en mí con fuerza y rapidez y yo entro en el climax presionando su espalda. Sale de mí y me siento sin fuerzas. No puedo más, quedo dormida en su pecho.
----Al día siguiente---
Me tomo el día libre porque no tengo ganas de ir hoy a la universidad. Ser la única amante del director debe tener sus ventajas, Harry se fue temprano. Yo estoy desayunando con la resaca de Zayn y mi madre en el desayunador. Perrie sigue dormida. Edward y su perra ya han de estar en Mánchester.
-¿Qué pasó ayer?- dice Zayn para luego dejar caer su cara en el plato de cereal.
-No seas imbécil, no llenes el cereal de tus malditos mocos- le da un golpe en la espalda, este se pone erguido inmediatamente.
-Amo verlos tomar- muero la manzana.
-¿No deberías estar estudiando, escuincla?- dice Zayn.
-Debería. Pero igual que tú no hago lo que debo- sonrío, Zayn alza sus pulgares con ojos de borracho amanecido.
-¿Fajaste anoche con Lí-Sellers?- pregunta mi madre descaradamente, la mirada de Zayn se dispara.
-¡¡Fajas con un viejo!! ¡Esa es mi muchacha!- agita mi hombro.
-Mi madre me perdió en un juego de póker. Ahora soy propiedad del hombre más purrudo de Mánchester.
-Aún no entiendo como me ganó ese tipo.
-O tú perdiste a propósito- ríe Zayn ¡No lo había considerado!
-Iré a ver televisión- se levanta mi madre dejándome la duda plantada.
-Osea que tu pozo de los deseos ya recibió unas cuantas monedas- me mira asintiendo.
-¡Zayn!- me sonrrojo.
-Tío Javaad para tí, irrespetuosa de mierda- me lanza una palomita de cereal y me hinca el ojos.
-¡Eres un imbécil!- me levanto empuñando mi ojo y subo las escaleras. Me encuentro a Danielle en el pasillo, esta se congela al verme, yo administro mis pensamientos y me planteó un plan en cinco segundos. Camino hacia ella lentamente y me doy cuenta como se tensa, mi mirada es oscura y tengo una sonrisa morbosa, estoy a un paso de ella y rompo la distancia, me asomo a su oído y ella está temblando, la sensación de su miedo me es placenter. Abro mi boca- Apartir de ahora...considérate mi enemiga- susurro en su oído y planto un beso en su mejilla.
-Jane- susurra temblando. Su miedo se esparce por la habitación, niebla gris de desesperación recorre todo el cerebro de Danielle, lo sé. Ella es tan predecible, tan dominada, tan débil y necesitada de mí; igual que todos.
-Shhh- pongo mis dedos en sus labios y ella palidece, yo sonrío <Maldita, ya deseo verte llorando en mis pies> Empujo con fuerza sus labios y ella retrocede forzadamente -Sabes quien soy yo, Danielle Javaad. Es mejor que vayas mentalizando tus súplicas.
-¿Qué piensas hacerme?- dice fingiendo valentía, la miro fijamente a travéz de las luces ténues del pasillo y acaricio su mejilla, ella se estremece.
-Tonta e ingenua Danielle ¿Te gusta la Universidad de Mánchester? Deberías disfrutar tus últimos días- presiono sus mejillas con fuerza, ella hace un gesto de dolor y toma su mejilla.
-No puedes hacerme esto. Somos mejores amigas- sus ojos se llenan de lágrimas.
-Que se acuestan con tu hermano y tus exs ¡Me encanta!- río sarcástica.
-Harry nunca se prestaría a correrme de Mánchester por una venganza tuya- dice temerosa.
-Ojo por ojo, querida. Pero sabes que yo no soy tradicional, y sí te diré la verdad...Edward y yo...¿Còmo te lo explico? ¿O mejor dejo que él te lo diga? No, yo sí soy buena amiga y te cuento las cosas- Tomo su mano- Ven, amiguita- la halo con fuerza hasta una habitación y la aviento a la cama- ¿Estás cómoda?
-Jane ¡¡¿Qué quieres de mí?!!- dice desesperada.
-No. No. No. No te exaltes- me siento a su par y tomo sus manos. Ella sigue temblando y yo tengo rostro de muñeca diabólica malvada. Adoro la reacción de pánico que causo en ella- Nosotras somos amigas y nos contamos todo ¿Verdad?- Asiento cínica- ¿Ves esa esquina de allá?- señalo entre la puerta y el clóset, me volteo hacia ella y me acerco a su oído- Ahí me desnudé con Edward el otro día y nos besamos los cuerpos. Estuvo...delicioso- muevo provocativamente mi lengua enunciando la última palabra.
-¡¡Eso no es cierto!!- se levanta exaltada y con la respiración agitada. Sabe que es cierto, pero no quiere creérselo- ¡Estás mintiendo!
-¡Ve! ¡Anda! ¡Pregúntaselo al gemelo! Y no sólo fue una vez...-doy una carcajada ruidosa. Danielle no soporta y sale dando un portazo, yo doy una carcajada aún más fuerte y me lanzo de espaldas a la cama, suspiro <Ay, Jane. Eres todo un cuadro de Da Vinci> 
Harry, quiero comerte ¿Por qué pensé eso? Sí, en efecto, quiero tragármelo e inflarme como sapo pero...creo que algo más como saborearlo, no simplemente tragármelo ¡¡¿Por qué estoy pensando en Harry?!! ¡No lo necesito! Hummm...¡Lo llamaré! Tomo mi teléfono y marco su número. Mi marcación rápida ha cambiado. 1 Harry 2 Edward 3 Zayn 4 Mamá.
-¿Hola?- contesta rápidamente con un tono fastidiado, es casi un grito.
-Harry- susurro haciéndome la víctima. Así se ''compadecerá'' y me contestará bonito, y si me contesta feo, pues mejor, así lo haré arrepentirse mortalmente cuando me haga la ofendida y trate de contentarme.
-Jane, estoy algo ocupado. Te llamo luego- cuelga. Me enojo inmediatamente ¿Quién se cree para colgarme? ¿Aparte ocupado? Él nunca puede estar ocupado para mí, debemos trabajar en eso.
Me levanto y me alisto para salir, quiero ver que me ofrece esta ciudad. Tomo el auto de mi madre, ella sigue borracha. Observo a todos lados, hago algunas compras y en una tiendo veo algo que me llama la atención; una playera, demasiado directa para ser verdad. Es una playera simple blanca pero trae un sol dibujado enmedio y una frase que dice ''Like sunbathing?'' Y de hecho sí, me encantar tomar al sol, tomarlo en todos lados. Entro a la tienda y la compro. Frente a la tienda veo un Show de Burlesque y entro, el tipo de la entrada me pide mi identificación, un tipo de tez morena, no muy alto y sin cabello, no tengo que pelear ahora así que se la doy y me deja entrar, aunque esa brisa de nostalgia de deshacerme del guardia me hace estremecer. La recepcionista es toda una prostituta; cabello rojo casi rosa, los labios los trae más resecos que rojos, tiene ojos grises que resaltan hacia mí al instante.
-Buenas tardes ¿Dígame?- sonríe.
-Necesito ver al encargado- pongo mis manos en el mostrador.
-Necesitas una cita. Necesito tu nombre y asunto y veré dónde te pongo- hojea unas páginas.
-No, gracias. Sólo quiero verlo.
-Disculpa, quiero tus datos- su expresión se enfría y por consecuencia la mía también. 
-¿No quieres un brillo de labios también?- le muestro un brillo humectante inmediatamente, ella me mira confundida- Traes los labios más resecos que lo que yo tengo de impaciente. Yo resolví tu problema asqueroso, tú resuelve el mío. Necesito hablar con el encargado.
-Le pido que se retire- toca un botón bajo la mesa. Llamó a seguridad, yo me enclino en el mostrador y la miro fijamente.
-Aquí no estamos para pedir, sino para hacer. Dame la maldita pasada al encargado o tú y el calvo que viene detrás van a confirmar que he practicado kickboxing desde los cinco años.
-Kayla ¿Necesitas ayuda?- pregunta el tipo, yo sonrío.
-No. Kayla está bien- ella respira agitadamente y el teléfono suena.
-¿Kayla?- pregunta de nuevo el de seguridad.
-Jane Styles, dile que lo busca Jane Styles- alzo una ceja. Ella toma el teléfono.
-Señor...sí, está listo...De hecho, hay una chica aquí buscádolo- me mira, yo miro hacia atrás y el tipo me mira de pies a cabeza, yo le sonrío y le digo adiós con la mano, él da media vuelta dudoso y se va. Cuando me volteo Kayla ya no está y la puerta de una cabina se abre, sonrío al ver quién es sin poder creérmelo.
-Hola- dice Simon sonriendo complacido.
-Hola- me acerco a él y lo abrazo, huele delicioso; a perfume de hombre. <Es que es hombre> Él se aparta y me hace una seña con el brazo para darme paso a la puerta, yo entro y es una oficina. Piso negro, paredes naranja fuerte, casi rojo y muchos posters enmarcados con pancartas publicitarias sobre Burlesque. Simon se sienta detrás del escritorio y yo me siento del otro lado frente a él aún viendo las paredes. 
-¿Qué te trae por aquí?- agacha un poco su cabeza intensificando su mirada. Aquí con esta luz tan estilo infierno placentero y su cabello rubio ligeramente despeinado me hacer querer arrancarle el pantalón con un bisturí. 
-Curioso encontrarte aquí, pensé que eras un tipo más...-<Menos puto indecente facilón degenerado sin verguenza>-...serio.
-Y a mi me parece curioso que Lí-Sellers te deje andar en estos lugares tan sola. Cuéntame como está. Hace tiempo que no viene- ¡¡Qué!! Maldito Lí, viene a estos sitios, voy a hacer cuadritos y los echaré en mi vaso con jugo como subos de hielo.
-Ayer cumplí dieciocho. Pero no vine para hablar de Harry ni de mis libertades condicionales.
-Dime ¿En qué puedo servirte?- susurra y encuentro el doble sentido en sus palabras. Claro, como no está Harry cerca y ya tengo dieciocho ya me quiere partir las pierna. Maldito, puedo sacarle mucho provecho a esto.
-¿Qué se necesita para ser parte de uno de los shows?- pregunto y él da una carcajada al techo, esto me toca las bolas.
-Eres una niña- se burla.
-No físicamente- me levanto y me quito la camisa, por suerte traigo un sostén de media copa que levanta mis pechos al punto de casi besármelos, me doy una vuelta lenta y me siento en el escritorio frente a él, agito mi cabello y lo tomo de la corbata.
-No es show stripper.
-Sólo el escenario- susurro a centímetros de su rostro y él sonríe.
-Harry no estará felíz. No estaba muy alegre la vez del Motocross cuando te le escapaste- alza una ceja. Yo ruedo mis ojos, inmediatamente recuerdo ese momento.
-Pensé que eras más inteligente ¿Cuántas personas ves que hay en esta habitación? Harry ya no es mi niñero si es lo que te interesa, soy mayor de edad y puedo hacer lo que se me entre en gana ¿Vas a darme la entrada al show o no?- alzo una ceja.
-¿Y qué obtendré a cambio?- <Quiere faje> ¡Yo no! A Harry no le gustaría que lo hiciera...¡Vaya! ¿Desde cuándo me interesa lo que le gustaría o no a Harry? Bueno, lo haré...No, no lo haré, pero no por Harry sino porque...porque yo no quiero, sí. Pero inmediatamente se me viene a la cabeza la solución.
-¿Te gustan las rubias?- él sonríe.
---De regreso en casa de Lí-Sellers----
-¿Dónde andabas?- pregunta mi madre molesta <Tú misma me has dado las llaves, borracha amnésica>
-Buscando prostitutos, si cuatro británicos y un irlandés se aparecen en unos minutos los mandan directo a la recámara- dejo las llaves en la mesa y subo a la habitación.
-¡¡Compráte tu propio auto!!- grita mi madre a mis espaldas.
-¡¡Con tu dinero!!- respondo entre gritos entre la oscuridad del pasillo y choco con algo...O alguien...Hummm ese aroma a perfume Armani. Armani, sólo una persona es adicto a Armani.
-Puedes hacerlo con el mío si quieres- susurra esa voz que acaricia mi oído y me besa el cuello con delicadeza, siento un places exquisito, lleno de dulzura y paz. Me siento...limpia interiormente. Entierro mis dedos en su cabello y está mojado, se acaba de bañar. Inmediatamente bajo mis manos a su torso y está desnudo y goteando. 
-Con lo tuyo es otra cosa lo que quiero hacer- enrollo mis brazos en su cuello y vuelvo a besarlo intensamente, él me toma de la cintura y llegamos a su habitación. Al entrar al fin veo su rostro en la luz, sus ojos verdes están brillando hacia mí y me miran con deseo, no sé cuántos litros de baba han caído al suelo. He dejado un caminito de baba desde el pasillo para no perderme en el regreso así como Hanzel y Grethel. 
-Te amo- susurra con su frente pegada a la mía, espera mi respuesta y suspira al no obtener ninguna pero luego sonríe y me doy cuenta que tal y como me dijo no cambia sus sentimientos por mí los que yo tenga por él- Te amo- repite en un tono de voz más elevado y amplía su sonrisa, yo sonrío tontamente en respuesta y unimos nuestros labios dejándonos caer en la cama, siento el frío de la superficie de su piel húmeda y el calor debajo de ella. 
-No me esperaste para bañarte- deshago el nudo de su toalla alrededor de su cadera.
-Pensé que vendrías más tarde ¿Dónde estabas?- frunce el ceño y me mira curioso.
-Me encontré a Simon- me recuesto en su pecho y escucho el latido de su corazón- No sabía que visitabas shows Burlesque- alzo mi cabeza y lo miro a los ojos, él los ha cerrado- ¿Pasa algo?- niega con la cabeza.
-¿Qué hacías en un show Burlesque?- abre sus ojos y veo desaprobación en su mirada, esto me causa mucha gracia, yo hago lo que quiera, director.
-Quiero que vayas esta noche.
-No- sacude la cabeza- No quiero que vayas a un show de esos.
-Yo no iré, tú sí- vuelvo a recostarme en su pecho- Prométeme que irás.
-No le entiendo.
-Sólo ve- lo beso y rodamos en la cama para hacernos uno del otro una vez más y cada vez que lo siento sobre mí me siento más de él y él más mío y no me molesta la idea de que él me posea físicamente, mi cuerpo se acomoda al suyo y me siento más cómoda y pura bajo su piel que bajo la mía. Necesito a este hombre, lo necesito como a nada ¿Qué haría si algún día me dejara? Eso es imposible, está pegado a mí...pero yo tambien estoy pegada a él, no debo mostrarle cuanto me dolería perderlo, tengo que hacerle ver a él cuanto le dolería perderme. Pero no puedo negarlo ya, aquí enredado entre mi cuerpo es donde lo quiero siempre no por mi placer, sino por mi necesidad indudable de él. Lo necesito pero no lo amo; si lo amara fuese como él y no me importaría yo sino él y no es así, lo engo porque mi cuerpo y mi ser lo necesita no porque él me necesite a mí, eso me alivia aunque no del todo.
Harry está dentro de mí y ambos nos corremos. Él se recuesta a mi lado y me abraza.
-¿Te sigues tomando las pastillas?- susurra en mi oído.
-Sí- lo miro y me pierdo en sus ojos cristalinos. Me tomo la pastilla de planificar desde que Louis vino a revisarme. Supuestamente ha sido para ayudarme con los dolores del mes y de pasada pues en el momento no eran necesarias para no emabarazarme pero ahora sí.
-¿Por qué no fuiste a clases hoy?
-¿Te hice falta?
-Perdiste cinco clases. Mañana tienes dos pruebas, te traje los libros que necesitas para estudiar para ellas. Una es avisada, la otra es 'sorpresa' es oral- doy una carcajada inmediatamente y él se sonrroja.
-¿La oral no es contigo?
-De hecho sí, pero no en el sentido que la estás tomando.
-¿No me pondrás un diez?- hago una sonrisa de inocencia.
-Si estudias y contestas bien las preguntas- me besa en la frente.
-¿No puedo sobornar al director?- alzo una ceja y él sonríe. Me levanto y bajo las escaleras enrrollada en su toalla, ya es de noche y encuentro a mi madre en la cocina.
-¿Fajando?- pregunta revolviendo su café.
-Hablando luego de fajar- tomo la bolsa y subo rápidamente de regreso antes que me diga algo. Que incómodo es que mi mamá se dé cuenta cuando estoy fajando. Entro a la habitación y Harry está completamente desnudo y sin la cobija encima mostrando un panorama espectacular-¿Qué haces?
-Mostrándote lo que hay.
-Sé muy bien lo que hay- abro la bolsa y saco la camiseta- Vístete- le lanzo la camiseta, él se sienta en la cama y se la pone, luego mira hacia el logo y sonríe hacia mí. http://www.youtube.com/watch?v=CVtAg6TDGW0
-Gracias...Ahora que lo recuerdo, ayer debí darte algo pero lo olvidé, olvido todo mientras estás debajo de mí- se levanta y saca de una cajita una cadena y se posa detrás de mí, me rodea el cuello con la cadena y el frío metal me roza la piel, lo engancha y miro el dije; es una luna menguante delante de un sol. La luna es de plata y el sol brilla en oro. Me volteo y lo miro- No sé si yo sea el sol porque eres tú quien me ilumina. Antes de tí mi vida era vacía y oscura, era como un océano lleno de mareas turbias y rápidas. Tú eres mi cámara lenta; en la que puedes apreciar cada centímetro de la cinta y con la que te das cuenta de cuantas cosas ignoraste por ir tan rápido y sin mirar alrededor. Jane Styles, me has hecho un niño jugando a ser hombre.
-Harry...nunca me dejes ir- lo beso apasionadamente y él corresponde a mi beso con fuerza, con dolor cómo si mis palabras le hicieran pensar en algún día dejarme y me doy cuenta que le causa el mismo dolor que a mí y me duele. Me duele que le duela más que mi dolor me duele el suyo.
-''La luna, rosada, alta, era una extraña perla suspendida misteriosamente sobre el mundo... ''- susurra el verso y yo estoy apoyada sobre él porque no me puedo sostener. Este es un momento donde no quiero que acabe, y estoy entre el sigue y el detente. Es como un camino plancentero que finaliza en el dolor, porque sé que así será- Esto sólo es el comienzo de nuestro propio libro...
-Uno que no acaba- digo tratando de reforzar mis pensamientos.
-Uno que siempre tendrá una página en blanco al final para seguir escribiendo- me pongo como una tonta antes sus susurros que acarician mi oído y me he decidido a escuchar más pero justo la puerta suena.
-¡Jane! ¡¡Los prostitutos llegaron!! ¡Son cuatro británicos y un irlandés! Ya están en tu cuarto- grita mi madre atravéz de la puerta, Harry aparta su caray me mria con el ceño fruncido, yo sonrío antes su expresión.
-Diles que vayan halando las mangueras, ya llego- río, Harry entrecierra los ojos- Vamos a vestirnos, a mi madre le molesta que fajemos en la misma casa de ella- Suelto sus rizos y nos ponemos la ropa. Mi madre es experta en arruinar momentos precisos.
-Jane, necesito que empaques todo antes que acabe el día. Mañana luego de la universidad ya nos mudaremos al apartamento- dice antes de abrir la puerta y salir. Recorro toda la habitación y vuelvo a abrir la gaveta donde antes Harry guardaba las fotos de los recuerdos. No hay una sola de Paulette, sólo de sus padres y de él pequeño, algunas de Liz y de sus hijos. Veo una foto en blanco y negro, es de papel, es un ultrasonido, me molesto al suponer que es el hijo de Paulette pero está demasiado formado para ser un feto de dos meses, además son dos. Leo la información que dice '' ____TN Styles. Gemelos de 23 semanas de gestación, identificados como masculino y femenino. Fecundación masculina primeramente que la femenina. El feto masculino presenta ligeramente un trastorno de personalidad por dependecia; trastorno de personalidad tipo C. El feto femenino presenta un moderado trastorno con episodio hipomaníaco; generalmente por los genes de la madre al poseer Trastorno histriónico de la personalidad por inicio de niñez y adolescencia falta de presencia de los padres...''
¿Osea que tengo un trastorno mental y Edward tambien? Y todo porque mis abuelos no le ponían atención a mi madre de pequeña y se hizo loca ¿Yo tambien lo soy? ¿Por qué Harry tiene esto? ¡¡¿Por qué mi madre nunca me dijo sobre esto?!! ¿Se lo habrá dado ella? Miro el reloj y son las nueve de la noche, debo ir al Burlesque inmediatamente, dejo sobre la cama de Harry el folleto sobre el Burlesque y huyo de casa en el auto de mi madre, las llaves seguían justo donde las había dejado. Entro al centro y Simon me ayuda con todo, me visto de una manera excesivamente provocativa y llamativa y estoy tras el telón.
-Recuerda lo que me prometiste- dice Simon antes de salir del vestidor. Tomo mi teléfono y llamo a mi tía Perrie.
-¿Jane?
-Tía Perrie, necesito que vengas a recogerme al club Burlesque de Mánchester.
-¿Qué hacces ahí?- jadea.
-Estoy con un amigo que es dueño de aquí pero no sé como regresar a casa.
-¿Y cómo llegaste?
-Mi mamá me trajo, ven porfavor. Ven sola porque quiero mostrarte algo.
-¿En el Palace Theater, no?
-Sí. 97 Oxford St, Manchester, Lancashire M1 6FT.
-Bien- cuelga y es mi turno de salir. Me subo sobre las escaleras y entro en la copa gigante llena de Champagne. Traigo un corsé y debaojo únicamente dos colgadores de diamantes cubriendo mis pezones y otro en la zona justa allá abajo, una peluca negra. Al estilo Dita Von Teese. El telón se abre y las otras bailarinas desaparecen, a travez del vidrio de la copa logro ver a Harry sentado en la primera fila con los brazos cruzados y una cara de aburrimiento. Comienza la músicahttp://www.youtube.com/watch?v=fN0Jy6Zg1SY y comienzo a salir de la copa de espaldas bailando y meneando mi cintura al ritmo, luego de unos segundos me deshago del corsé y bajo de la copa con un reflector, un bastón me espera abajo y hago algunos movimientos, bajo las escaleras y camino bailando atravéz de los cerdos que vienen a ver esto. Harry no queda viéndome en lo más mínimo, camino hacia él y me poso tras su espalda y él mira hacia atrás al ver el refrector sobre nosotros. Me siento en sus piernas y bailo en sus piernas, los demás aplauden y Harry echa sus manos hacia atrás, yo río y ruedo mis ojos, luego de separar mis piernas y sacudir la peluca miro hacia Harry y sus ojos se encuentran con los míos y se amplían al reconocerme, sus ojos brillan por el reflector, su boca cae sobre sus piernas, yo le guiño un ojo y estiro mis labios para lanzarle un beso en el aire, me levanto inmediatamente y corro hacia las escaleras de vuelta al escenario, él se levanta y me sigue pero los de seguridad lo detienen en las escaleras, veo su rostro; está asombrado y molesto. Subo de nuevo a la copa y luego de agitar mis pechos y mis caderas, lanzo mi cabeza hacia atrás y un chorro de Champagne cae del techo por mis pechos y se resbala por mi estómago hasta caer entre mis piernas, todos aplauden y los reflectores se apagan. Me meten detrás del telón y me dan una bata, entro al camerino y me lanzo al sofá en carcajadas, era justo lo que quería, ése rostro de Harry al verme, oigo un pleito afuera.
-¡Debiste notificarme!- grita Harry molesto.
-Ella me dijo que ya no la cuidabas.
-Que tenga dieciocho años no quiere decir que se mande sola.
-Pero dice que tú ya no estás a cargo de ella- se excusa.
-Simon, ella no es mi recomendada ahora, ella es mi...mi novia.
-¡¡Qué!!- lanza una carcajada- Con razón. Yo la mataría si fuera tú, toma- escucho el sonido de unas llaves, el cerrojo da vueltas y yo doy tres pasos hacia atrás, la puerta se abre y Simon desaparece. Harry me mira furioso y entra, azota la puerta y me agarra de los hombros.
-¡¡¿En qué estabas pensando?!!- sus ojos reflejan furia, está que se lo llevan los mil y un demonios.
-¡En tí! Te dí un show, malagradecido- lo empujo y me siento frente al espejo. Él se agacha a mi lado y le da vuelta a la silla giratoria para dejarme frente a él.
-¡¿En mí?! ¡Esto es demasiado! Te mostraste desnuda ¡¡Antes tantos hombres!!
-Pero bailé solo para tí y no estaba desnuda. Esto es Burlesque; un arte, no un striptease.
-¡Me vale mierda lo que sea! ¡Tú no puedes mostrarte a nadie más que a mí! ¡Soy tu maldito dueño ahora!- grita furioso mientras aprieta mis muñecas, me está tratando con corage y me duelen las muñecas, trato de soltarme, su última frase me tocó los cojones y me enojo ¡El no es mi maldito dueño! Lo empujo y me levanto.
-¡No eres mi maldito dueño! ¡Tú no eres nadie!- me echo hacia atrás al darme cuenta que la última expresión no es cierta, pero me molesta que considere que tiene mando absoluto sobre mí- ¡A mi nadie me dice qué hacer o no hacer! ¡¡Maldita sea, Lí!! ¡Si pretendes controlarme vete a la mierda! No eres mi jefe, ni mi padre. Si ni a ninguno de esos les hacía caso menos a tí...
-¡Ah, claro! ¡Pero yo sí debo obedecerte!- reclama.
-¿Me estás reprochando?- camino hacia él furiosa- ¡Si no querías obedecerme no hubieses venido! ¡Yo no tomo el control, tú me lo entregas! Tú decidiste venir, no te puse pistola. Tú decides obedecerme, yo decido no hacerlo.
-¡A la mierda! ¡No puedo con esto!- sale dando un portazo que bota los cuadros de las paredes. Nunca se había ido molesto, siempre trataba de resolverlo hasta el final. Me he pasado, pero es común en mí pero él ¿Se habrá hartado? <No, Jane. Él jamás se hartará de tí. No lo sigas>
Me visto y voy a la oficina de Simon. La pelirrosa me mira con disgusto.
-Está ocupado con una mujer- dice de mala gana.
-¿Una mujer?
-Una rubia ojos grises, creo que se llama Perrie. Llevan horas ahí dentro ¿Quieres su tipo de sangfre tambien?- se burla.
-Es A negativo, ya me la sé- le devuelvo la burla ¿Qué estarán haciendo estos cerdos? Pobre Zayn. No te preocupes tía Perrie, yo cuidaré de él, o mi madre, entre las dos podremos mantener su purrito con banderitas arriba- Cuando salga dile que ya me fui, y que no se olvide de usar protección- Me salgo del edificio y está Harry apoyado en su auto mirándome serio. No estoy de ánimos para discutir con él, pero siempre hay tiempo para ponerle el dedo en la llaga, me acerco a él y su mirada se intensifica, cree que vengo a rogarle, pobre iluso.
-¿Por qué tienes un ultrasonido de mi madre?- digo secamente. Su expresión cambia a asombro.
-¿Andas revisando mis cajones?- murmura y me ha tocado mi otra docena de cojones ¡Me esta humillando! ¿Trata de hacerme sentir una entrometida o qué? Él es el único metiche aquí <Hazte la ofendida>
-No te preocupes, no volveré a registrar ninguno de tus cajones. Me aseguraré de no volver a poner un sólo pie en tus domicilios para no cauasarte estragos- doy media vuelta y doy dos pasos lentas esperando que me tome del brazo y detenga ¡Maldita sea, no lo hace! ¡¿Qué está pasando?! ¿Me está dejando ir? <A la mierda, vete con tu frente en alto> A la mierda tú, sicópata interna. Me quito los zapatos y los lanzo lejos, siento las medias mojadas bajo mis pies, ha estado lloviendo afuera, doy media vuelta y Harry me mira extrañado ¡Mierda, no! Me quito la chaqueta y quedo en mi camisa de tirantes blanca y mis jeans, me quito el cinturón y Harry frunce mñás el ceño, muero de frío. Corro hacia Harry y me arrodillo frente sus pies y miro hacia arriba, él tiene sus ojos amplios y está asustado.
-Perdón.