¿Quién eres?

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Me levanté temprano para disfrutar del hermoso amanecer. La anciana del pueblo me brindó consejos sobre cómo asearme adecuadamente, y seguí sus indicaciones. Luego, traté de ayudar en lo que pude en el pueblo mientras seguía buscando una forma de regresar a mi hogar. Aunque todavía no sabía cómo lograrlo, estaba decidida a mantenerme con vida mientras estuviera en aquel lugar.

Por la tarde, me dirigí hacia el pozo con la esperanza de encontrar una manera de regresar a casa. Anhelaba volver a ver a mi familia, a mis amigos y continuar con mis estudios para convertirme en doctora. Deseaba la comodidad y la seguridad de estar bajo el techo de mi hogar, disfrutando de una buena comida y durmiendo en una cama reconfortante. Mientras contemplaba el pozo, un impulso repentino me empujó hacia adentro, haciéndome caer en su interior.

Cuando abrí los ojos, escuché voces familiares que me llamaban. Rápidamente salí del pozo y mis seres queridos corrieron hacia mí, preocupados y aliviados de encontrarme sana y salva. Después de compartir una comida, les conté lo sucedido, aunque sabía que les resultaría difícil de creer. Aunque me comprendieron, seguía sin saber cómo había transcurrido solo unas horas en mi mundo mientras parecían haber pasado días en aquel lugar desconocido.

De vuelta en mi habitación, me recosté cómodamente después de un relajante baño caliente y disfrutar de una deliciosa comida. Estar con mi familia era un verdadero bálsamo para el alma, brindándome el amor y el calor que tanto necesitaba.

Sin embargo, el extraño sueño que había tenido seguía atormentándome. Me encontraba en un lago de color rojo, rodeada por tres personas. Había un hombre de cabellos plateados, otro de cabello negro ondulado y una mujer de cabello largo y oscuro. Presencié cómo el hombre de cabello negro ondulado mataba a la mujer de cabello negro, culpando al de cabello plateado. Aquella visión aterradora parecía tan real que me llenó de temor. Desperté sobresaltada esa noche, sin comprender por qué había tenido ese sueño tan inquietante. No había podido ver claramente los rostros de las personas involucradas, pero algo me decía que eso no auguraba nada bueno.

Recordé que ya habían pasado dos años desde que rompí la perla y me encontraba viajando con Shippo, Sango, Miroku, Kirara e Inuyasha. Durante ese tiempo, conocí a Jaken y a Sesshomaru, el medio hermano de Inuyasha. No tenía una buena relación con él y me molestaba su actitud despectiva hacia los humanos. Había regresado a la época antigua con el objetivo de buscar los fragmentos de la perla, los cuales sin querer había dispersado en cien pedazos. Estar en una era diferente y tener que luchar contra monstruos para restaurar la perla, utilizando el poder heredado de la hermana de la anciana, resultaba una tarea cruel. Aunque era la menos hábil en términos de habilidades y poderes, seguía esforzándome y eso causaba molestia en Inuyasha, quien se frustraba por mi lentitud.

Recientemente, me encontré con una sacerdotisa que era la hermana, la misma mujer de la historia, lamentablemente, me enamoré de Inuyasha. Pero ese día, todo cambió. Presencié cómo esa sacerdotisa revivía con la ayuda de una bruja, aunque su resurrección no fue igual a lo que esperaba. Inuyasha parecía distinto, sumido en un silencio profundo después de volver a ver a la mujer que amaba desaparecer sin poder decirle mucho. En mi interior, me resignaba a aceptar que mi amor por este ser de la antigüedad nunca sería correspondido. Después de ese encuentro, regresamos a la aldea para informar a la anciana que su hermana había vuelto, aunque en forma de barro. Tras un día, retomamos nuestro camino en busca de los fragmentos de la perla. Sin embargo, la noche cayó y no encontramos muchos fragmentos.

Decidí salir a buscar leña para el fuego. En el camino, escuché voces que reconocí, movida por la curiosidad, decidí acercarme. Lo que presencié me causó un dolor profundo, ya que no sabía que Inuyasha amaba tanto a esa persona como para tener encuentros clandestinos. Me sentí herida, pero no lloré. Continué con mi tarea de recolectar la leña y recogí mi arco y flechas. Le dije a Sango que me dirigía al lago para bañarme y reflexionar sobre las decisiones que debía tomar.

Naraku To Love (Original)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora