Ni yo misma lo sé. Creo que has cambiado mucho; aunque conmigo eres como siempre has sido. Nos hemos cambiado los papeles: tú te crees hundido en la mierda, y mientras yo solo veo felicidad a mi alrededor. Siempre tuve suerte y nunca supe verlo; te admiraba por no tenerla y apreciarlo. Reírte de ti mismo, incluso. Me encantaba. Me ayudabas a ver todo lo bueno que había en mí, y a apreciar todo lo horriblemente malo. Pero joder, esa era tu esencia. Y quizás la absorbí, pero jamás seré como eras tú. Y espero que solo sea una época, porque de verdad echo de menos que seas tan feliz como antes también por el móvil; verte en persona ya no es una opción.
Quién sabe.
También espero olvidarte algún día. Quiero decir, ya lo he hecho. Puede que sea la misma confusión de siempre, en la que creo que lo he hecho y luego vuelves y me matas. Pero lo dudo. Esta vez no. A lo mejor solo duras un poco más. Pero he conocido a gente, gente maravillosa que con menos tiempo, muchísimo menos que tú, me ha enseñado tantas cosas. Dos días dan para mucho. Y parece que cuatro años, para ti no son suficiente. ¿Cuánto más quieres? ¿Mi vida entera? Porque la pienso aprovechar. Y no me voy a arrepentir de besar, ni de lo que digo, ni de lo que hago. A diferencia de ti, quiero hacer las cosas bien. Y pensando.
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Corazón empapelado
Teen Fiction¿Yo? Yo solo soy una tonta enamorada de un chico que no me hace caso. Supongo que no merece la pena estar así, pero he intentado olvidarle de todos los modos posibles y, tras tres años, aquí sigo. Ese chico, me tiene tonta. Profundamente enamorada...