Cinco años habían pasado en los que cada niño había crecido, pero de diferente manera.
Por un lado estaba KyuHyun, quien seguía siendo el mismo hermano cariñoso de siempre, pero por fuera era una persona fría, sin sentimientos y con el corazón escondido en lo más profundo, en el cual aún guardaba ese recuerdo de su pequeño novio.
En la escuela era el chico más popular que había, con amigos tan cínicos como él lo era, pero la diferencia estaba en que esos amigos querían colgarse de su "fama" sólo para sentirse mejor con ellos mismos.
Tenía buenas calificaciones para demostrar que podría ofrecerle algo a su novio cuando lo volviera a ver, su sueño era ser alguien bueno y reconocido para darle una buena vida a SungMin y tenerlo a su lado. Pero para eso le faltaban años, por lo que se preocuparía sólo de éste día en el que lo volvería a ver.
Había organizado un paseo a la playa con su hermana para que estuvieran los cuatro juntos como hace cinco años, pero cuando estaban apunto de partir llegaron sus amigos que comenzaron a hacer preguntas y no tuvo más opción que llevarlos.
Por otro lado está SungMin, quien tenía solamente dos amigos, pero que lo querían de verdad, DongHae y RyeoWook. Era muy feliz en la escuela, aunque sabía que no podía tenerlo todo se complacía con sus buenas calificaciones y el amor que su madre le daba.
Él era un chico de 17 años muy dulce y tierno, todos caían rendidos al ver la belleza y ternura de los tres amigos, y aunque muchos le pedían de una forma u otra salir, él los rechazaba dulcemente, alegando que estaba enamorado y que su amor lo esperaba en la playa.
Nunca olvido a ese lindo niño de 10 años que le propuso ser su novio, y en las noches, cuando cierra los ojos y se concentra lo más que puede, aún siente esos pequeños labios sobre los suyos.
Y es por la misma razón por la que aún no olvidaba ese beso, por la cual se encontraba en ese momento sobre un bus junto a su madre, con dirección a la misma playa de siempre, en la que esperaba encontrar a su primer y único amor.
- mamá ¿tú crees que nos recuerde?- dice el más joven preocupado-.
- lo hizo una vez ¿por qué no dos?-.
- lo sé, pero de los 5 a los 10 no hay un gran cambio en la personalidad, pero a los 15 todo cambia, debe hasta pensar diferente- se abraza a su madre, escondiendo su rostro-.
- debes confiar en que él te recordará y podrán seguir con ésta extraña relación que tienen-.
El menor se separa de su mamá y la mira directo a los ojos- ¿qué pasaría si ya encontró a alguien mejor que yo? ¿si tiene novio o novia?- siente como su madre lo abraza y comienza a sollozar- estoy muy nervioso-.
- lo sé mi niño, pero debes confiar en que esto es lo correcto, y que con éste viaje seguirán queriéndose, probablemente ahora más- ambos sonríen más tranquilos y continúan con su viaje-.
Ya en la playa madre e hijo ven el mar, ella sentada en su toalla de playa y él sentado en el agua, como todos los años, esperándolo de la misma manera.
KyuHyun ya había llegado a la playa para ese momento, pero no la podía recorrer tranquilo y buscar a su hyung porque tenía a sus "amigos" a cada segundo sobre él.
Luego de unos minutos pensando en una forma de escabullirse de sus acompañantes logra hacerlo, y mientras lo busca ve a su hermana sentada con la madre de SungMin. Sonríe al verlas y al mirar hacia el mar lo ve sentado en la arena donde le llega el agua, como cada año. Se acerca por detrás y le tapa los ojos con ambas manos.
- debes adivinar quien soy- ríe leve como un niño en una travesura, sintiendo la sonrisa que coloca el mayor al escucharlo-.
- ¿se supone que debo hacerlo?- le toma las manos al menor entre las suyas sonriendo sin sacarlas de sus ojos- ¿qué me pasará si no lo hago?-.
