Prisión R.T.

Capítulo III: La carta

El título del sobre me dejo anonadado acompañado de una serie de escalofríos. Lo más lógico era pesar en una broma, pero el contenido de la carta me despejo de esa duda.

..., 18 de mayo

"Muy buenas noches Sr. Leyer, me da mucho gusto que pueda leer este mensaje. Tenía que usar la tarjeta al nombre de su familia porque no me la recibirían. Usted sabe cómo son los de seguridad.

Bueno, irónicamente de lo que le voy a hablar es sobre su familia.

Como se sabe usted asesinó a su familia, ¿verdad? Y si le dijera que es mucho más que esa simple afirmación, ¿cómo se lo tomaría? Ahora estará pensando cómo es eso posible si la testigo vio como los asesinó. ¿No le resulta raro?

Al pobre Roy Tesla le gustaría saber sobre esto y a las otras docenas de personas que asesinaste.

Espero encuentra la respuesta pronto Sr. Leyer. Porque usted sabe que ese día paso algo muy raro con usted."

 ATTE: .

Al leer el pendiente solo pude sentir miedo. Él sabía que asesiné a Roy Tesla, sabía de mi caso y si llegará a saber que mate a muchas personas, e informa sobre ello a la justicia, terminaría siendo ejecutado. Que podría hacer.

A la mañana siguiente me encontré con Roger. Sus compañeros Richard y Roberto no lo acompañaban.

-Mira Roger, me enviaron esta carta anoche después de la cena. El tipo que la haya escrito sabe mucho de mí.

-¿Cómo estás seguro de ello?

-Estoy seguro porque él sabe de...

En ese momento recordé que Roger no sabía nada acerca de mi pasado. Sería un gran riesgo contárselo. Ahora que lo pienso, ¿cómo sabía mi nombre?

-¿Saber de qué, Tomas?

-Roger, ¿cómo conoces mi nombre?

-¿Esa pregunta de vuelta? Bueno te lo diré, aunque tú mismo lo deberías saber -sacó un papel de su bolsillo-. Tú fuiste un empresario muy reconocido, ¿recuerdas?

-Pero eso fue hace muchísimo tiempo. ¿Cómo alguien me recordaría? –Dije confundido- A menos que...

-Salgas en las noticias por haber asesinado a tu familia. Obviamente.

-¿Salí en las noticias? –pregunté pasmado-

-Claro. ¿Acaso te piensas que un asesinato es poca cosa?

Era algo obvio. Todos sabían quién era y que hice. Eso responde una parte. Pero lo de Roy Tesla nadie lo sabe. ¿Quién será el autor de esa carta? ¿Qué quiere de mí? ¿Cómo sabe tanto de mí?

-Muy bien Roger, creo que puedo confiar en ti. Te contaré todo mi caso.

Nos sentamos en una las mesas libres y comenzamos a conversar. Le explique absolutamente todo a Roger, le revelé todo. Sin embargo él nunca se sorprendió y estuvo firme hasta el final.

-Ahora entiendo –Dijo Roger-. Por eso te preocupa tanto el que sepa tanto de ti. Se supone que jamás se supo el asesinato de Roy Tesla ni de los demás.

-Sí. Ahora que podemos hacer.

-Eso no importa Leyer –Dijo algo nervioso. La primera vez que lo veo así en todo este tiempo-. En esta prisión no se pueden recibir cartas. A menos que sean de otro reo.

-¿¡DE QUÉ DEMONIOS HABLAS!? – Pregunte casi gritando. Roger me calmo al instante ya que no quería que nos escucharan.- ¿Estás diciendo que el que me mando la carta es alguien que está aquí, en este prisión?