CAPÍTULO 3 (3 de febrero de 1974)

21 0 0
                                    

Dan

"No pude escribir desde aquella noche porque nos quedamos sin papel. Me tomó un buen tiempo conseguir la suficiente cantidad para escribir al menos por los próximos cinco meses.

¿Que ha pasado? Bueno, Lucie parecía haber desaparecido desde año nuevo. Nos conocimos en un puesto de frutas donde ella compra todos los domingos y yo, bueno, veo que puedo robar sin que nadie me vea. Pero desde ese increíble 31 de diciembre, ella no había vuelto a comprar allí, o al menos si lo hace, se asegura de no cruzarse conmigo.
Era obvio, después de ser la peor pareja de año nuevo. Quizás hubiera sido una buena pareja si hubiera estado al menos más de dos minutos a su lado.

La cuestión de que escriba esto no es que realmente me importe Lucie y su obvia desaparición, sino que, el día de hoy, nos encontramos una vez más.
Me miró y su sonrisa fue tan grande que supuse que no era a mi a quien había visto. El problema fue cuando se lanzó a mis brazos, y chilló mi nombre como si se tratara del reencuentro más romántico de la historia.
-¡Estaba tan enojada, tonto, tonto Dan!-dijo con angustia - Pero he decidido perdonarte, y tenía miedo que no estuvieras aquí, pero, ¡Aqui estas!
Supuse que debía fingir estar emocionado, y eso hice. No lo hice por ella, tampoco por su mansión y todos los lujos que significa tenerla a mi lado. Tan sólo... Tan sólo quiero demostrarle a su hermano que tan equivocado estaba.

Lucie y yo hablamos las próximas tres horas del día, y antes de despedirme la tome de la mano y la bese en la mejilla. Lucie se ruborizó, y yo fingí una sonrisa tímida. Entonces, aprovechando la oportunidad, dije las palabras justas:
-Quisiera verte mañana, tenemos mucho de que hablar, estas horas no fueron suficientes.
-¿Quieres... que vaya a tu casa?- susurró con sorpresa.
-oh, no, mi casa, mi casa es un verdadero desastre, bella Lucie-bajo la vista con una sonrisa, y supe que lo único que había escuchado había sido "bella Lucie". Me dio un fuerte abrazo y antes de darse la vuelta para irse, me dijo que entonces sería su casa.
-mañana, a las doce del mediodía. ¿Llegaras a tiempo?
-por ti, claro-conteste, y cada cual siguió su camino.

"Por ti, claro" que estupido y cruel estoy siendo. No quería llegar hasta este punto, y ahora me arrepiento. Es obvio que tarde o temprano tendré que acabar las cosas con Lucie. ¿No había sido esa una buena ocasión? Entonces ¿Por que? ¿Por que me importa tanto volver a su casa, demostrarle a Hamlet que si puedo pertenecer allí? Sus palabras me habían dolido, pero no podía luchar contra algo que es cierto. Ese mundo es tan lejano al mío y tan odiado por todos los que estan a mi alrededor que a cada paso que doy acercándome a el siento que me pongo en peligro. Un peligro mortal, de quedarme sólo, en medio de dos mundos, sin pertenecer a ninguno de ellos. Entonces, si es tanto el miedo ¿Por qué hago esto? Hamlet no quería verme otra vez. Sólo una noche, una noche maravillosa, de un cielo de colores que nunca había visto y un chico dispuesto a enseñarme su magia. Pero así como empezó, término. Me estoy mintiendo, otra vez, confundiendo las cosas y perdiéndome en ellas. Cada tanto sucede, mis emociones se desordenan y no estoy seguro de quien soy ni porque hago las cosas que hago. Entonces prefiero descansar en la oscuridad hasta que todo se aclare. Pero esta vez es diferente, no quiero hundirme sin dar un poco de lucha, al menos un poco.

No se que es todo eso que escribí. Simplemente estoy nervioso, muy nervioso de volver a verlo, y ni siquiera estoy seguro porqué."

Tiempos ProhibidosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora