She Has No Idea [Denis Stoff Y Tu]

Capítulo 28

Hoy lo conocerían, iban a hablar por primera vez con el famoso Nicholas Markov. Había llegado al país la tarde anterior y ______ acompañada de Ben habían ido al aeropuerto a recibirlo.

—¿Cómo es él? —preguntó Denis por décima vez desde que habían llegado al bar.

—Ya te lo dije —contestó irritado—. ¿Por qué insistes tanto? Vas a verlo en unos minutos.

—¿Crees que tenga una oportunidad? ¿Al menos soy competencia para él?

—Denis, deja de joder.

—Estoy nervioso ¿de acuerdo?

—Entiendo que estés nervioso pero no es para tanto.

—Cuando te enamores lo entenderás.

—Eso nunca sucederá.

—Lo mismo pensaba yo... —murmuró.

Su corazón dio un vuelco cuando la vio entrando tomada de la mano de un castaño de más de un metro noventa. Ella lucía tan radiante a su lado, tan feliz... Tomaron asiento con ellos y pidieron sus bebidas.

—Chicos él es Nicholas, mi novio —le presentó con una genuina sonrisa en aquellos tentadores labios—. Cariño, ellos son Ben y Denis, aún falta que lleguen Sam y James.

—¡Qué hay! —saludó Ben en cambio Denis permaneció callado.

Aquella noche de fiesta fue la peor de su vida. James, Sam y Ben parecían llevarse bien y divertirse con el novio de la chica por la cual se encontraba perdidamente enamorado. Cada vez que ella lo besaba sentía que algo dentro de él se marchitaba, cada vez que ella lo miraba con aquel brillo en sus ojos era como un puñal directo a su corazón. Una noche amarga y dolorosa.

—Joder Denis —masculló ella mientras lo ayudaba a caminar hacia la entrada.

Nicholas se había ido temprano bajo la explicación de que tenía una cita importante al día siguiente, Ben desapareció junto con una linda rubia mientras que James y Sam habían continuado la fiesta en otro lugar dejando a una sola ______ y a un ebrio Denis.

—Justamente hoy tenías que ponerte ebrio —le reclamó.

En respuesta sólo obtuvo un par de titubeos y risas ahogadas. Salieron y tomaron un taxi hacia casa de Denis. Lo único que lo había salvado de que su destrozado corazón no terminara más herido de lo que ya estaba era enfrascarse en la bebida, sólo eso le daba la leve esperanza de despertar al siguiente día sin recordar ningún detalle de aquella terrible noche.

A tropezones y maldiciones llegaron a la puerta de su casa. Con un gran trabajo pudieron subir las escaleras una a una con Denis rodeando con un brazo los hombros de ______ y recargando todo su peso en ella. No podía dar un sólo paso sin ayuda.

Lo tumbó en la cama con el ceño fruncido.

—Te has pasado esta noche, Denis —le dijo cruzándose de brazos.

Sabía que era inútil todos aquellos reclamos, pero tuvo que pasar toda la noche como su niñera ya que el chico no podía beber sin excederse. Estaba a unos pasos de quedar en un coma etílico.

Él la miró con los ojos cristalizados reflejando un profundo dolor en ellos.

—¿Por qué no me quieres? —lloriqueó él mientras se removía en la cama con desesperación—. ¿Qué tiene él que yo no?

Aquella pregunta le dejó helada...

—Si te quiero —le respondió en un murmuro.

—No... no lo haces —dijo soltando todas aquellas lágrimas—. Te amo, maldita sea.

—¡Oh, Denis! —su corazón se estrujó al verlo tan débil e indefenso.

Se acercó a él y lo abrazo sin importarle aquel penetrante olor a alcohol que despedía. No era ningún secreto que su amigo se encontraba enamorado de ella, pero no podía corresponderle, no podía amarlo. Su desdichado corazón estaba encadenada a alguien más...