She Has No Idea [Denis Stoff Y Tu]

Capítulo 58

Uno, dos, tres golpes a su puerta.

Le había tomado mucho tiempo para armarse de valor y pararse frente a aquella puerta pero ahora que se encontraba ahí no estaba tan seguro de su decisión. Tal vez debería estar ahí, pero el sentimiento de culpa y remordimiento era más grande.

La puerta se abrió apareciendo detrás de ésta ______. Su semblante se ensombreció y una sonrisa forzada surcó sus labios.

—Denis... —murmuró débilmente.

Se cruzó de brazos y miró el suelo, posiblemente tratando de no echarse a llorar.

—Yo... yo venía, bueno, vengo a disculparme.

______ asintió levemente y lo miró a los ojos. Suspiró con pesadez.

—No tenías que venir...

—Tenía que... —se pasó una mano por el cabello—. Yo, no sé qué diablos estaba haciendo y...

—Mira, —lo interrumpió—. En realidad aprecio que hayas venido, pero...

—¿Pero...?

—Pero no creo estar lista para seguir como si nada hubiese pasado. No te mentiré, quiero golpearte —se encogió de hombros.

—¿Algún día podremos volver a lo de antes?

—¿A ser amigos? Supongo que sí, pero no por ahora, Denis.

Ella sabía a lo que él se refería. Denis preguntaba si algún día ellos podrían volver a ser algo, a estar en una relación.

Siendo honesta, no se imaginaba a ella y a Denis juntos de nuevo.

—Eso es un no —dijo él con media sonrisa.

Un atisbo de dolor apareció en sus ojos. Estaba profundamente herido y no se molestaba en ocultarlo como lo hacía ella.

—¿Estás con Nicholas?

Ella asintió con pesadez.

—¿Por qué?

Un nudo en la garganta le impedía respirar. Su corazón se aceleró. Y se encontró con que no sabía por qué insistía en regresar con él.

—Sólo te hará daño.

—Tal y como tú lo hiciste.

Aquella respuesta lo dejó sin aire. Estar ahí llevando esa conversación con ella era ser masoquista. Le dolía haber puesto a ambos en esa situación, pero no tenía intenciones de irse, aún no.

—No fue mi intención.

—¿Tú intención era acostarte con ella y que yo no me enterara?

—Vales más que todo esto. No te merezco, y mucho menos Nicholas te merece.

Ella miró al interior de su casa y después devolvió sus ojos hacia el castaño arrepentido que tenía frente a ella.

—Él te engañó, ______. Te ha hecho llorar cientos de veces. Te ha usado —le recordó con intenciones de hacerla entrar en razón.

______ se recargó en el marco de la puerta y trató de tragarse todas las lágrimas.

—No pretendo que regreses conmigo, pero no quiero que estés con él.

—Eso suena egoísta, Denis. Tú y yo no somos nada.

—No quiero que él te rompa el corazón. No es justo para ti.

—Me voy a casar con él.