visión 2

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Capítulo 18

¿Qué rayos estaba pasando? Ese chico tan extraño.

Dios... no entiendo nada.

Escucho que la puerta se abre, y yo solo me quedo quieta, veo la sombra de él y se sienta enfrente de mí, la ventana estaba enfrente de él, así que su sombra era negra, y no lo distinguía.

-¿Crees que lo soñamos? -Me dice tranquilo, sin alterarse.

-No lo sé, puede ser, pero supongo que eso es algo imposible, e improbable, es muy difícil.

-Pero si esto de por si no es normal, creo... que es hora de seguir a mis padres.

-¿A qué te refieres?- Le pregunté.

-Pues mis padres me dejaron aquí, porque pensaron que podía valerme por mi mismo, pero... no puedo.

-¿A dónde fueron?- Por un momento largo nos quedamos en silencio, no me responde y lo entiendo, para que tus padres te dejen, debe ser muy duro.

Me siento en la cama y solo lo veo, lo veo sin decir nada, creo que nos quedamos así por un buen rato.

Todo estaba silencioso, él solo tenía la mirada en la ventana, me paré, me senté a su lado y también miré a la ventana.

Él se levantó y abrió la ventana, una ventisca de aire entró a la habitación puso sus manos en el marco de la ventana y miró hacia abajo.

Lo miré y me paré rápido, ¿Estaba mal pensando las cosas?

Él se dio la vuelta y sonrió, se sentó en la orilla de la ventana, subió sus pies y los cruzo en el colchoncito, creo que si estaba mal interpretando las cosas o... no.

-Adiós Elisabeth, un gusto conocerte.

-Dani no, por favor...

Y eso fue lo último que pude decirle, él se dejó caer a la calle, no podía hablar, ni gritar.

Bajé corriendo, pasando por la sala y el comedor, abrí la puerta y lo vi tirado, tenía una sonrisa en el rostro, y su cuerpo estaba en un charco de sangre, corrí a su lado y me agache al costado de él.

El color de la sangre, se tornaba marrón, pose ambas manos en su rostro.

No podía creerlo.

Empezaba a gritar, a pedir ayuda, todos pasaban como si nada, como si no hubiera nada allí, gritaba desesperada, lloraba, nadie hacia caso, la vista se me hacía borrosa, por las lágrimas.

Empezaba a escuchar en eco, hasta que... me desmaye.

–Vamos, despierta – Escuche esa voz, no quería abrir los ojos.

–Vamos despierta, vamos carajo, despierta.

Escuche el ruido de una llave y el del agua correr, cuando sentí el chorro de agua fría en la frente y el cuello abrí los ojos de golpe, y lo veo a él, estábamos en el cuarto de baño.

Lo miré a los ojos, y él solo me miraba de pies a cabeza, me recargue en la pared y él solo negaba con la cabeza.

-¿Ahora me entiendes?-Me dijo enojado.

-¿Entender qué?- dije a la defensiva.

-Lo que estás viviendo aquí no es real, ¡Entiéndelo por favor!, Ahora quiero que me escuches, nuestro mundo donde todo es real y donde tú vives puede que esté en riesgo, si no dejas está maldita actitud, y si no despiertas de una buena vez, me voy encargar de que lo hagas pero a mi manera, ¿Te quedó claro?

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⏰ Última actualización: Feb 07, 2016 ⏰

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