¿Quién no ha tenido fantasías? Quién no ha soñado alguna vez con esa persona que hace que se le pongan los pelos de punta.
Todo es cuestión de placer. No importa si eres virgen, no importa si te asustan estos temas, pero lo cierto es que sabes de sobra que te gustaría probarlo, ya seas mujer o hombre.
Imagínate ésta historia, piensa que te lo hacen a ti, o que simplemente tú lo haces, tu sólo siente.
~Esa noche de pasión en la cual tú sentiste cosas que jamás pensarías, y sin duda tienes ganas de nuevo, quieres y deseas volver a repetirlo.
Sin dudarlo un segundo más te atreves, te lanzas hacia sus labios, haciendo que se despierte con una sonrisa, un tanto sorpresa. No se lo esperaba, pero no le importa.
Decides besar sus labios acompañados de suaves mordiscos, de vez en cuando te inclinas un poco más, quieres notar su lengua, quieres un beso en condiciones.
Te sigue, hace lo mismo que tú, sin duda le estaba gustando, tú confianza aumenta, pero ella se te adelanta, notas sus afiladas uñas pasando por tú desnuda espalda, te provoca un leve cosquilleo.
Ella te besa con más ganas, hace darte a entender sus ganas, sus ganas de sentirte al completo. Se acerca a tú oído, te mordisquea la oreja, sabes que es tu punto débil, no aguantas más. Sin controlar tus fuerzas la coges con deseo, la colocas arriba, tu postura favorita.
La tienes encima, desnuda, ella se inclina para besarte, mientras notas todo, absolutamente todo, está muy mojada, tú no te quedas atrás, estás igual.
Te gusta tener el control, decides jugar un poco con ella, haces movimientos un tanto provocativos para ti, un infierno para ella, ella te dice '' -Vamos joder.. no me hagas ésto'' Te gusta sentir esas ganas de deseo, de deseo hacia ti.
Sigues jugando con ella esta vez vas un poco más lejos, tus manos están rozando su espalda, piensas; '' -Es muy suave..''
Con tus uñas la arañas sin hacerle daño, quieres transmitirle todas tus ganas, la aprietas más contra ti, notas sus pechos rozado tu cuerpo, sin duda te pone.
Ella no aguanta más, su respiración aumenta, cambio de mandos. Ahora le toca a ella, ella con su dulce tez, cara de ángel, te das cuenta de que es diferente en todos los sentidos, a ella le gusta lo directo.
Sin dudarlo dos veces te empieza a besar tu pecho, te provoca un ligero escalofrío, poco a poco va bajando, aveces se para y te mira con cara provocativa, un tanto placentera.
Se muerde el labio, sigue bajando, la agarras del pelo, haces que se la meta en la boca, fue algo casi obligado con lo cual le pone más.
Después de unos minutos, tus ganas aumentan, vuelven a cambiar los roles, está vez mandas tú de nuevo, te pones encima de ella, la miras con muchas ganas, aprovechas, y lo haces, por fin está dentro, ella suelta un gemido, un tanto controlado. Le agarras por las muñecas, le levantas los brazos, se los colocas contra la cama mientras te acercas a ella, le muerdes el cuello, ella nota tu cálida respiración.
Ella te pide que sigas, le sueltas los brazos doloridos, abres sus piernas, con cuidado, cumples su deseo, sigues, ella gime de unas maneras descontroladas, pero no te importa nada.
Cuanto más gime ella, más aumenta tú respiración, más aumenta tu ritmo, más placer, más ganas de llegar los dos juntos.
Pero como dije antes, tú eres el dominante. Decides parar a pocos segundos de su orgasmo, te mira furiosa, no entiende nada.
Te levantas de la cama lentamente, mientras te acercas a su oído, pasando por su cuello logras oler su perfume, te encanta.
Le susurras ''-levántate'' ella te hace caso, la besas, mientras la empujas contra la pared, tus manos casi inconscientemente se encuentran en sus pechos, vuestros besos se intensifican, sigues bajando, ella te acelera la mano poniéndola directamente ahí, esa desesperación por su parte te pone.
Casi sin darse cuenta la apartas de la pared te colocas detrás suyo, un suave empujón la coloca en su posición favorita, ella está a cuatro, la agarras de su ondulado pelo, un tanto rizado, tiras de ella para que así entre mejor, ella sin dudarlo sigue tus movimientos.
Los dos envueltos de placer, entre mil gemidos y sudor, notas unos labios besándote, todo fue un sueño, ella te está dando los buenos días.
La miras con cara de deseo.
Y piensas..
-La historia continúa, ya que ahora viene lo mejor.~

ESTÁS LEYENDO
Promitto Perdere
Teen FictionUna de las maneras mas fáciles de destruirte a ti mismo es enamorándose ya que sabes que al final todo acaba, nada es para siempre incluso en momentos maravillosos tienes ese remordimiento, ¿Qué haré cuando todo acabe?