El diario de una anoréxica #Wattys2016

Viernes 29 de Agosto.

Desahogándome:

Hoy he salido de vacaciones de verano. Se te soy sincera, nunca me agradó la idea de estar en el instituto. Ya que hay unas cuantas chicas que viven haciéndome la vida imposible. Pero prefiero estar mil veces hay, que en casa con una señora que dice ser mi madre.

Además en el instituto tenía a Cloe todo el día, en cambio ahora que salemos de vacaciones, tal vez la pueda ver unas cuantas veces a la semana, si es que tengo suerte.

Lo único provechoso de esto, es que probablemente vengan mis primos a visitarme, como es la costumbre de todos los años. Y si viniesen, saldríamos a pasear a lo largo de la ciudad, iríamos a ver a mi abuela, y podríamos ir a los lagos a disfrutar de un chapuzón. Aunque ahora que lo pienso... yo no podría hacer eso como antes. Esto de ocultar mis cortes ya se está volviendo un problema, y eso que aún no ha empezado la oleada de calor. Tendré que pensar en una idea de poder ocultarlos sin preocupación.

***

Me gustaría que mis padres se sintiesen orgullosos de mí, al menos por un momento. He hecho mi mayor esfuerzo, por cerrar el semestre con éxito, y a pesar de todos mis problemas, lo he conseguido. He sacado uno de las más altas calificaciones se mi grado. Pero aún así, mi madre me trata como si fuera la peor. Para ella nunca será suficiente, por más que lo intenté. Por más que sea perfecto, ella siempre destacara mis errores. Para ella todo lo que provenga de mí, es un asco y un fraude. Nunca será diferente...

En fin, no quiero seguir escribiendo de eso, hoy no quiero estropear el día deprimiéndome. He estado pensando en la posibilidad de crear un horario vacacional; en qué consistiría esto: tendría una actividad para cada hora del día. Así evitaría la sensación de soledad y aquel vacío que he estado sintiendo constantemente.

He estado un poco tranquila últimamente, he estado comiendo un poco más. Ya no he vomitado las comidas, aunque no me faltan las ganas.

He empezado a practicar más deporte, no lo sabía, pero soy bastante buena en eso de la gimnasia. Hablando de eso, las ventajas de que sea verano, y de ir a visitar a mi abuela, es que ella vive cerca de los parques y bosques, y en esos lugares puedo encontrar paz y subirme a los árboles. Amo subirme a los árboles. Ver todo a mí alrededor desde lo alto.

Aún me cuesta un poco asumir la muerte de mi amiga. Hay ocasiones en que tengo la intención de llamarla para platicar con ella. Luego recuerdo que ya no puedo hacer eso. La extraño.

Cloe me ha confesado que ella también perdió a su mejor amigo. Pero el murió en un accidente automovilístico. Por lo que Cloe me hablo, a él le encantaba andar en motocicleta; un día salió como de costumbre a practicar un poco, quién iba a pensar que esa sería su última vez que se subiría en una moto. Supongo murió haciendo el deporte más amaba.

Su motocicleta se estrelló contra un camión de gasolina...

Al recordar la forma en que Cloe me contó todo esto, me parte el alma. Ella me rebelo que a ella le gustaba su mejor amigo. Pero que nunca se atrevió a decírselo por miedo a ser rechazada y perder aquella amistad que tenían. Ahora se arrepiente.

Las cosas pasarán por algo. Todo esto debería tener algún sentido en algún momento, pero ¿cuándo?

Debe ser bonito tener a alguien que te esté apoyando siempre. Que te demuestre lo hermoso que es la vida. Debe ser acogedor tener a ese alguien tan especial hay cada vez que le necesites... Pero es una pena que eso nunca pasará. Jamás conoceré a nadie.

Yo no creo y nunca creeré en eso que llaman amor. Nunca volveré a permitir que me lastimen...

Tristemente Elise.