WHAT HAPPENED

Capítulo 8

Sintió que un gran peso de encima se había desprendido de sus hombros. Se sentía realmente aliviado. Ahora podía seguir adelante sabiendo que lo que le faltaba, lo que necesitaba y quería, era a Taehyung.

Viéndolo frente a sí, observando cada detalle de su rostro, explorando cada ángulo, cada centímetro, como si lo quisiera recordar para siempre.

Tan solo mirándolo, podía sentirse completo. Como si su corazón fuera a estallar. Sabiendo que era lo correcto.

Notó la forma en que su cabello llegaba hasta sus ojos, casi cubriéndolos, recordando cuando había llegado tarde al aula de Química... Aquella vez había visto lo mismo pero esta vez era diferente.

Se recostó en la piernas de Taehyung, observándolo desde abajo. Su mandíbula formaba una "v" bastante pronunciada, la cual se marcaba con cada palabra que decía. Sus manos descansaban en el pecho de Jungkook, haciendo leves círculos con sus dedos.

Taehyung estaba hablando sobre una vez que ellos habían viajado en autobús hasta la casa de sus abuelos, que vivían en Daegu. Los recuerdos inundaron su mente, haciéndolo sonreír.

–Te encantará, mis abuelos tienen una piscina en su patio. Siempre le da la luz, lo que es bueno aunque si no te gusta broncearte...

–Será perfecto –Jungkook lo besó.
Sentados uno al lado del otro en el autobús, tomados de la mano, sonrió.

El paisaje era maravilloso. El día aún más. Taehyung apoyó su cabeza en el hombro del otro, suspirando profundamente.

–Dormiré un rato –exclamó acomodándose, haciendo de su respiración un sonido más pausado.

–Duerme tranquilo –dijo y besó su cabeza delicadamente.

Recordaba haber viajado casi dos horas y media, sentado al lado de Taehyung, quién había dormido todo el viaje. Parte de su brazo se había dormido debido a él. Pero en ningún momento lo despertó, no quería levantarlo. Se veía demasiado angelical. Ojos cerrados, sus pestañas formando una pequeña sombra, sus labios levemente abiertos. Era algo digno de observar.

–Deberíamos salir, ¿qué dices? –preguntó Taehyung acariciando el pelo de Jungkook, sintiendo cómo sus dedos pasaban a través del cabello tan fácilmente. Éste mantenía sus ojos cerrados, respirando entrecortadamente, sintiendo las caricias. Tan reconfortantes, tan sutiles y delicadas, que en cualquier momento caería rendido durmiéndose– ¿Jungkook? –volvió a preguntar, esperando una respuesta.

–Si –respondió saliendo de aquel estado de ensueño en el que estaba entrando, sentándose en el sillón– ¿A dónde?

–Tu solo sígueme –expresó, mirándolo con una sonrisa condescendiente– El lugar te encantará.

–De acuerdo.

––– 

Jungkook no sabía muy bien por dónde lo llevaba Taehyung.

Caminando casi dando tropezones, a través de las calles de Seúl, sintiéndose uno más de la multitud. Mezclándose entre la gente. Eludiendo las miradas sentenciosas que apuntaban directamente hacia las manos de ambos chicos, que estaban entrelazadas. "No me importa", se recordó a si mismo.

Mientras intentaba seguir el paso del otro, que lo llevaba casi a rastras, lo escuchaba hablar en un tono jovial, como un eco lejano.

–No nos queda mucho para llegar –se giró mientras seguía caminando, marcha a atrás, más lento que antes para no chocar a nadie– El lugar es muy especial –sonrió, haciendo que sus ojos formaran dos líneas imperceptibles. Luego volvió a girarse, retomando el anterior paso estable.