Génesis: La verdad

Acto I: prólogo

-Ayudame...Sácame de aquí...¡POR FAVOR!-
Delante de mí estaba uno de mis compañeros de clase, tenía un pedazo de concreto sobre su torso, Mientras extendía su mano hacia mí suplicándome que lo ayude, estaba paralizado, había mucha sangre y de repente se empezaron a escuchar disparos con gritos desgarradores.
¿Que rayos pasa?
Pude ver una silueta entre las rocas que estaban detrás de mi compañero, se fue acercando hacia mí, su apariencia no era algo de este mundo...
Tenía una especie de casco con hoyuelos, era algo músculoso y todo su cuerpo estaba cubierto por una vestimenta Gris, la cual estaba llena de circuitos.
Su apariencia me intimidaba mucho, se detuvo frente a mí compañero, ese tipo chocó su puño con la palma de la mano y al separarlas salió una pequeña cuchilla de energía de su muñequera.
Aterrado, retrocedí un par de pasos.
Aquella "cosa" le cortó la cabeza a mi compañero, su cabeza cayó y la sangre empezó a derramarse.
Me miró y empezó a caminar hacia mi.
-Aléjate...- dije mientras retrocedía por cada paso que él daba.
Me tropecé con un pedazo de roca y caí de espalda.
Esa cosa se acercó rápidamente hacia mí y colocó su espada contra mi cuello.
-£$*#}*-
Empezó a hablar en un idioma extraño; Empecé a temblar, mi respiración estaba agitada, su aterradora silueta me intimidaba.
<<Disparos>>
Aquel tipo recibió disparos en el
Cuerpo, cayendo a un lado de mí, la sangre de aquello me salpicó el rostro.
Un militar llegó a la zona y se acercó a ese monstruo y lo remató en el suelo a tiros.
Me miró y dijo:
-Estas bien chico?- preguntó.
Era un hombre adulto, tenía vellos en la barbilla y pelo corto, tenía puesto una vestimenta verde de militar.
-Si...- respondí.
Me ayudó a levantarme y me dijo:
-Salgamos de aquí!- dijo desesperado.
Aquel militar estaba temblando, salimos de la zona en la que estábamos y salimos directamente a la calle.
Lo que estaba viendo con mis ojos era algo pertubador.
Personas...seres humanos, desmembrados, decapitados y mucho más...había un Río de sangre que inundaba la calle, los carros estaban abandonados y a lo lejos se podían escuchar gritos y balas.
De respeten una enorme sombra nos cubrió, miré lentamente hacia el cielo.
-¿Qué es...eso?- pregunté aterrado.
Una enorme nave con forma de hexágono volando sobre la ciudad.
Agarré la manga del militar.
-Vámonos...- dije asustado.
No tenía una expresión fija en mi rostro...Quiero salir de aquí!!
Aquel militar estaba en shock, se estremeció y me miró.
-Si...¡Sígueme! Y no te separes- exclamó.
Corrimos hacia la autopista principal, la cual estaba llena de autos vacíos.
Todo estaba muy abandonado...era muy raro, habían armas en el suelo, balas pero no había nadie.
También había sangre, mucha sangre.
Esa perturbadora nave seguía en el cielo.
Mientras caminábamos, apareció una especie de monstruo, tenía la estructura de un ser humano, pero su rostro había sido reemplazado completamente por unas protuberancias, no tenían nariz, también tenía la piel pálida, venas brotadas y múltiples heridas de balas superficiales.
-¿Qué es esa cosa?!- retrocedí un par de pasos del miedo,mi espalda se topó con algo que se sentía como el pecho de un hombre, me volteé lentamente y era la misma cosa...el mismo monstruo...
Aquel monstruo me agarró del cuello y me empujó al suelo.
-Niño!- exclamó el militar.
-A...ayuda!- decía mientras perdía la consciencia.
Aquel militar le disparó a ambos, matándolos.
El cuerpo de aquel monstruo cayó sobre mí, lo hice a un lado y me levanté.
Que rayos...
Me pegué el susto de mi vida al ver sobre mis piernas el rostro totalmente destrozado de aquel monstruo, me arrastre hacia atrás desesperadamente.
-Que diablos?!- exclamé.
Porque demonios pasa esto? Hace un rato solo estaba recibiendo clases!!!
El militar se agachó y colocó su mano en mi hombro.
-Niño, estás bien?- preguntó.
-Que clase de pregunta es esa...? ¡¿Cómo vas a creer que estoy bien si hay monstruos y sangre por todos lados?!- exclamé.
Aquel militar frunció el ceño y me dijo:
-Si vas a seguir con esa estúpida actitud vas a morir.-dijo con una mirada amenazante.
Quedé perplejo con su respuesta y dije:
-Como sea! Solo Vámonos de aquí-
Me levanté y le pregunté
-Antes que nada, ¿Sabes que son esas cosas?-
-Son Personas, pero están bajo el control de "ellos".- dijo mirando hacia la nave.
-¿Ellos..? Que quieres decir? Explícate!- dije con una expresión de enojo dibujada en mi rostro.
-Estas personas...son seres humanos.- dijo aquel militar.
-Espera...¿escuché bien...? ¿acaso eran humanos?- pregunté mientras mis manos temblaban.
El militar agachó la mirada y dijo:
-Si...-
-¡Se supone que ustedes deben protegernos a toda costa!!- exclamé.
-¡No se puede con todos!- gritó a todo pulmón.
Hubo un silencio de 10 segundos
-A que te refieres...?- pregunté atónito.
El militar me miró fijamente y con una mirada muy seria me dijo:
-Te voy a aclarar una cosa niño, no te estoy salvando porque sí, la orden del general fue rescatar a los que se pudieran para que se unieran al ejército y así formar parte de esta lucha por la tierra, no me interesa tu familia, tus amigos, nadie, estamos ante una verdadera amenaza contra la raza humana, vas a usar tu vida para proteger este planeta, quieras o no- dijo.