Gravity Falls Tybay

Alianzas

En la serie Mabel es un poco infantil, lo que la lleva a no tomar las cosas muy en serio. En este libro, Mabel sigue siendo un poco infantil, pero tiene la capacidad de tomarse las cosas en serio.

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Un nuevo día comenzó, el sol salía, los pájaros cantaban, y Mabel comenzaba a despertarse. Al principio no quería salir de la cama, estaba tan cómoda allí, pero recordó la gran investigación que emprendería ese día, y se levantó de un salto, no debía desperdiciar ni un segundo.

Salió de su habitación, se dirigió al baño, y tomó su ducha matutina, en cuanto terminó, caminó hacia su habitación, y se puso lo que habitualmente vestía. Luego bajó rápido las escaleras, y se encontró con sus tíos en la cocina.

-Hola Mabel- saludaron Stan y Ford al unísono.

-¡Hola tíos!- saludó Mabel, y al instante comenzó a prepararse un café con leche.

-Es muy temprano Mabel, ve a dormir un poco más- le dijo Ford a su sobrina-nieta.

-¡Para nada, tío! Ya estoy despierta, no puedo volver a dormirme- contestó Mabel.

-Bueno, como digas- le contestó su tío. Luego tomó su taza de café, tomó un sorbo, y continuó -pero seguro que hoy tendrás sueño a las nueve de la noche-

Su sobrina solo levantó los hombros, tomó la taza en donde estaba su café con leche, y se dirigió  a su habitación, para continuar con su investigación. Subió las escaleras de la vieja escalera, caminó hasta el final del estrecho pasillo, entró a su cuarto y cerró la puerta con llave. No quería ocultare cosas a sus tíos, pero temía que si la encontraban, estaría en serios problemas. 

Apoyó la taza sobre su mesita de luz. Se dirigió a su armario, lo abrió, se agacho, abrió el ultimo cajón de su armario, y sacó del fondo de él, el Diario número 3. Se dispuso a cerrar el cajón, pero unos ruidos en la ventana de su habitación la distrajeron. 

Caminó temerosa hasta la gran ventana de la habitación, se asomó, y encontró a Wendy, saludándola desde el patio de la casa, pero no estaba sola, estaba acompañada por un chico un poco mayor de que ella, que también la saludaba amistosamente. Estaban tirando pequeñas piedras para llamar la atención de la chica, en cuanto la vieron, pararon de tirar piedras y le hicieron señas para que abriera la ventana. Mabel obedeció la orden, y abrió la ventana.

-¡¡Hey Mabel!!- gritó Wendy desde el patio- ¡¡Ven!!¡¡Tengo alguien para presentarte!!- en cuanto terminó de decir eso, el chico que estaba a su lado la saludó otra vez. 

-¡¿Cómo bajo?!- grito Mabel igual que su amiga.

-¡¡Yo que sé!!- volvió a gritar Wendy -¡¡Piensa en algo!!.

-¡¡Está bien!!-

Mabel se dio vuelta, y comenzó a mirar todo su cuarto, en busca de algo que la ayudara a bajar. Cuando su vista llegó al armario, se quedó pensando un segundo, atar sus sabanas para poder bajar no era mala idea. Corrió hasta el armario, tomó las cinco sábanas que tenía, ató cada una con tres nudos, para que fuera resistente, ató un extremo a la pata de la cama, y el resto lo dejó caer fuera de la ventana. Volvió a pensarlo, no era muy seguro, pero se arriesgó de todos modos. Tomó con las dos manos la larga tira de sábanas,cerró los ojos, y se deslizó al vacío.

En menos de un segundo, sus pies tocaban el césped del jardín. Lentamente abrió los ojos, y se encontró de frente con su amiga Wendy.

-¿Estás bien?- le preguntó su amiga.

-¡Si, claro que estoy bien!- la adrenalina corría por la sangre de Mabel. 

-Muy bien- dijo Wendy. 

-¿A quien querías presentarme?-preguntó interesada Mabel.

-A él- Wendy señaló al chico que Mabel había visto desde arriba.

-Hola- dijo el chico -Un gusto conocerte...¿Mabel?- preguntó dudoso el muchacho.

-Si, ese es mi nombre- hizo una breve pausa y continuó -El gusto es mio...-Mabel se detuvo, no conocía, su nombre.

-Soos- completó el muchacho.

-¿Por qué querías presentarme a Soos, Wendy?- preguntó intrigada Mabel.

-Antes de contestar eso necesito que me respondas unas preguntas primero- dijo seria la chica.

-Esta bien...- Mabel estaba un poco confundida.

-¿No notas un poco raro a tu tío Ford estos días?- preguntó aún más seria la chica.

-Si...un poco...- 

-¿Un poco...no sé...paranoico?-

-Emmm...tal vez...si, un poco...- contestó dudosa Mabel. Su tío si estaba un poco paranoico. Siempre estaba encerrado en su estudio, y en múltiples veces, Mabel escuchaba como su tío hablaba a los gritos, que hablara a los gritos no era raro, lo raro era que él estaba solo.

-Él está un poco más...irascible, tal vez?-

-Si, suele pelear seguido con mi otro tío...- las preguntas abrumaban la cabeza de Mabel, ¿por qué Wendy le preguntaba todo eso?.

-Bien...-

-Bueno, ¿ya terminaron las preguntas?-

-Si, no hay más preguntas-

-Entonces...ahora yo te tengo dos preguntas-

-Dime-

-Primero...¿Por qué tantas preguntas relacionadas con mi tío?...y segundo...¿Me dirás por qué me presentaste a Soos?

-Las dos preguntas pueden contestarse con una sola respuesta-.

-Muy bien, dime la respuesta-

-Con Soos, creemos que a tu tío le está pasando algo...estamos comenzando una investigación, para averiguar lo que le está pasando...y creemos que vos, sabrías algo que nosotros no-.

-Yo casi nunca estoy con mi tío. No podría darles ninguna información extra-.

-¿Nada?...-

-No, nada...-

-Y...¿Notas raro a tu hermano?- preguntó Wendy.

Mabel se quedó petrificada. La imagen de su hermano con las manos manchadas de sangre volvió a su cabeza. No sabía como responder esa pregunta, ¿mentía o decía la verdad?. Si decía la verdad, tal vez, podrían ayudarla, pero...¿podía confiar en una chica que había conocido el día anterior?. La dudas abrumaron su cabeza. Debía dar una respuesta rápida, si tardaba mucho, Wendy comenzaría a sospechar.

-Si...lo noto raro- dijo Mabel. No sabía si era una buena idea, pero de todos modos, dijo la verdad.

-¿Raro como qué?- preguntó Wendy intrigada. Esa pregunta solo era una prueba, no buscaba una respuesta asegurada.

-Es más desconfiado, igual que mi tío...y...-Mabel se detuvo. No estaba segura si querer decirle la horrenda imagen, de su hermano con las manos rojas. 

-¿Y?...- preguntó Wendy impaciente.

-Debo contarles algo...pero no aquí...¿conocen algún lugar donde podamos hablar en privado?- preguntó Mabel. Hizo una pequeña pausa y continuó- debemos tener confidencialidad...¿está bien?-

-Claro- contestaron Wendy y Soos al unísono.

-Formemos una alianza- propuso Soos.

-Me parece bien- dijeron Mabel y Wendy.  

-Yo conozco un lugar- dijo Wendy.

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¡¡Aquí un capítulo nuevo!!

Tienen que admitir, que comparado con otras veces, no tardé mucho en escribir este capítulo.

 Bye-Bye Fallers!!