Capítulo 20. La persona que menos quería ver.

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Ayer pase una grandiosa cita con Daniel, no voy a permitir que los fantasma de Amanda me atormenten, estaba frente al espejo observo algunos chupones que me dejo Daniel y me sonrojo.

Mi vestido era sencillo y nada revelador, consistía en un vestido suelto estilo veraniego, debo admitir que mi prima me escogió un lindo vestido de dama de honor, mi maquillaje va a juego con mi vestido, con un color rosa pálido, mis ojos cafés claros son resaltados por un delineado fino y mis labios rosa fresa daban el efecto de que eran carnosos, lástima que su color no durara mucho -Daniel, como tiene ahora mis pensamientos tan pecaminosos - Me puse unas sandalias bajas, sabía que la fiesta duraría mucho y no quiero cansarme, el cabello opte por llevarlo suelto con algunas ondulaciones.

Baje y Daniel ya me esperaba en su deportivo rojo, subí al auto.

—Señorita Bennett, no pretenderá ir así a la boda

—¿Por qué? ¿Hay algo malo con mi ropa? — observo mi vestido preocupada, por si no me quedaba bien o no me consideraba atractiva

—Sí, quieres matar de lujuria a su novio — me jala y yo abro los ojos de la impresión, me besa — estas preciosa, mi gorda Jenny

— ¡Daniel!, solo tomare en cuenta lo último de tu cumplido — niego con la cabeza un poco avergonzada — listo para ir a la boda — digo con cierta amargura

—Si fuera a la nuestra nací listo, la de tu prima solo es una excusa para estar más tiempo a tu lado

—Gracias por acompañarme no quería estar sola

Él me toma de la mano y me con mucha pasión, sus ojos verdes penetrando cada poro de mi cuerpo siento una corriente eléctrica atravesar por mi cuerpo

—Yo iría hasta el fin del mundo por ti, mi Jenny

—Gracias Daniel — sonríe de lado

—No me des las gracias, no aún, pienso cobrármelo después

—Ya sabía que no iba a ser gratis — suspiro — ¿Qué quiere que haga señor Hamilton?

—Para empezar una cena esta noche y luego... — sonríe pícaramente acercando su rostro al mío — te pondrás un modelito de ropa que te compre aunque no creo que te vaya a durar mucho tiempo puesto

— ¡Daniel! Ya sabía que eres un pervertido, pero dijiste para empezar acaso ¿hay más?

—Muy perspicaz abogada Jenny, el resto te lo cobro después — y me guiña un ojo

Después condujo hasta el hotel donde se celebra la boda

Llegamos y había muchas personas que no conocía, menos mal que vive con Daniel tomada de su brazo me sentía segura y protegida aunque había varias mirada celosas de algunas mujeres, claro por tener a semejante galán a mi lado.

Diviso a mis padres y ya me miran con reproche por traer a Daniel a la boda. A ellos no les agrada y les comprendo hasta cierto punto, ¿a que padres les agradara un imbécil que hizo sufrir a su hija en su juventud? Ellos estuvieron a mi lado para que pudiera salir adelante, y ahora resulta que regrese con ese idiota que nuevamente me ha robado el corazón y si lo rompe otra vez será imposible recuperarlo.

—Hija, que bueno que ya llegaste — me abraza efusivamente mi madre

—Veo que no vienes sola — dice con cierto enojo mi papá y yo le hago un gesto para que se comporte

Daniel es la persona que amo, y no me gustaría que este en discordia con mis padres, quiero que en verdad lo acepten porque ya es parte importante en mi vida, como lo son ellos

—Sí, mamá, papá, él es Daniel Hamilton, mi novio

—Un gusto en verlos — le ofrece la mano a mis padres papa la acepta con el ceño fruncido y mi mamá está un poco más tranquila

—Creo que ya había escuchado su nombre, es el jefe de mi hija y una persona innombrable en el pasado

Era Obvio que no quería hablar del pasado porque resulta incómodo para todos, sobre todo para mí, Daniel esta rojo de la pena no me imagino como estaré yo

—Sí, así es soy jefe de su hija en el Bufete de Hamilton y asociados — dice Daniel, hay un silencio bastante incómodo para mi gusto y decido cambiar de tema

— ¿Y mi prima?, ¿Dónde está? Me sorprendió la noticia que se casara

—Sí fue hasta hace poco menos de un mes que tomo la decisión de casarse todo ha sido apresurado que no te lo habíamos informado antes — me explico mi mamá

—No me digas que mi prima....

— ¡Oh, no!, no es esa circunstancia la que la motivo a casarse ella se le nota muy enamorada de su pareja y ya sabes estos tiempos el amor es un gran impulsador para un casamiento

— ¡Qué bueno!, me alegra que ese haya sido el motivo y ella ¿dónde está?

—Todavía se esta alistando.

— ¿Pero quién la está ayudando a alistarse? Como dama de honor debo de estar a su lado

—Claro querida, te llevo al salón donde la están arreglando

Daniel parece suplicarme con la mirada que no le deje solo con mi padre, pero tengo que hacerlo uno de los deberes de dama de honor es estar con la novia

— ¿Dónde está mi prima favorita? 

Siento que alguien me abraza por detrás, cuando volteo era la persona que menos quería ver

—Dereck —digo entre dientes

— ¿Y eso recibimiento primita?, soy tu primo favorito y así me saludas después de tanto tiempo — intenta abrazarme de nuevo pero Daniel me jala hacia atrás

—Creo que no, nos han presentado

— ¿Y tú eres? — dice con cierto desaire mi primo

—Soy Daniel Hamilton, el novio de tu prima — dice apretando los puños, tuve que tomarle de la mano para que se tranquilizara, ya le veía la vena resaltada en su cuello

—   Oh, ya. Primo es un gusto conocerte —sonríe

—No creo decir lo mismo — era un hecho Daniel estaba exaltado y no quería una pelea

—Hija, vamos con tu prima — intervino mi mamá

—Claro, papá te quedas acompañando a Daniel — le hizo un gesto suplicante para que me ayudara con esto, y parece que accedió

—Claro, no tengo otra cosa más interesante que charlar con mi yerno — dijo mi padre con cierto sarcasmo

Mi mamá me jalo hacia el salón donde se estaba jalando mi prima, y yo iba con el corazón acelerado rezando que no ocurra una desgracia y el conflicto no pase a mayores.


Legalmente adorable (LTFL #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora