6.

505 34 6
                                    

Se preparó una taza de té de menta y se acomodó en su sillón preferido. Aún no procesaba que un "extraño" la trajera hasta su departamento y aparte que el ya supiera quien era ella desde tiempo atrás.

Berit: Amara!!!, ¿estas bien? ¿Ya estas en tu casa? ¡Por favor respóndeme!.

Rodó los ojos, no quería hablar con sus amigos en estos momentos. Ella sabía que a veces podía llegar a ser un poco infantil y orgullosa, es algo que ah tratado cambiar mas nunca ah tenido éxito.

Berit: Por favor chaparra contesta, me siento muy mal de haberte dejado sola con el frío, eres mi mejor amiga y no quiero que estemos enojadas, ich liebe dich.

AmaraK: No te preocupes. Llegué bien a casa, me trajeron,ya todo pasó, solo que por el momento no quiero hablar, también te amo.

La castaña sabía que su amiga no le iba a responder por lo que le dijo, ella sabe que cuando ella dice "no quiero hablar" no se le debe molestar y es mejor esperar hasta que cambie de opinión.




Caminó a su trabajo como ya era costumbre. El clima había empeorado y como se le hizo tarde prefirió caminar que estar esperando el bus que sabía que iba a tardar por el aguanieve que caía.

-¿Berit? ¿Que haces aquí?-. Amara rasco su nuca cuando vio a su mejor amiga en la entrada del museo con un café y galletas.

-Como se que casi no ves el celular cuando vienes a trabajar, viene a avisarte que hoy no habrá clases, la electricidad de la facultad falló debido al aguanieve-.

-Gracias al cielo. Hoy tenía que entregar mi reporte de la Segunda Guerra Mundial y no lo eh terminado. Pero no te quedes aquí, vente-.

La castaña llegó a la caseta de seguridad dando explicación del porque su amiga iba a pasar con ella. Entraron juntas al área de casilleros y Amara se preparó para trabajar.

-Sabes chaparra, no creo que venga gente hoy. El clima esta demasiado horrible como para que la gente quiera salir-.

-Pues haya gente o no, yo tengo que estar en mi puesto. Quédate aquí y no causes problemas Berit- le dijo esto dándole una media sonrisa a lo que su amiga respondió sacándole su dedo corazón.

Bien se lo dijo su amiga, eran mas de las 3 de la tarde y ni un alma se había parado en la taquilla. Estaba tentada a ir con su jefe para decirle que si podía darle la salida por la falta de gente.

AmaraK: Creo que iré a decirle a Kramm que mejor cerremos, no ah venido nadie y me estoy congelando el trasero.

Berit: ¡Te lo dije! Lo bueno es que ahorita me eché una buena siesta, dile rápido para irnos por unos cigarros, me ah entrado la ansiedad.

-Disculpa, ¿todavía esta abierto?-. Amara tragó saliva, sabía que no podía estar en su trabajo con el celular.

-Si, aún esta abierto...- Levantó su mirada para encontrarse unos ojos verde brillante, -¿Tú? ¿Que haces aquí?-.

-¿Apoco no puedo venir al museo de Historia de mi ciudad?- le dijo quitándose su gorra con su famoso logotipo.

-Marco Reus interesado en la historia de su ciudad y de su país, eso suena raro sabiendo que eres un jugador-.

-No porque sea un jugador profesional significa que sea un estupido e ignorante-.

Amara se removió en su silla y le entregó el pase de entrada.

-¿No me darás un tour por el museo?- le dice el rubio sacando su cartera y depositando el dinero en la ventanilla.

-No vienes con un grupo escolar ni mucho menos eres turista...-.

-Pero soy un futbolista y soy ignorante, recuérdalo- le dijo a la castaña dándole una sonrisa coqueta de lado a lo que ella rodó los ojos y se levantó de su asiento para darle el tour al señor Reus.

Iban a mitad de recorrido y Amara veía como Reus se interesaba cada vez mas por lo que veía y lo que escuchaba; tal vez no es tan ignorante y cabeza hueca pensó la castaña fijando su vista en el rubio.

-¡Amara! ¡Amara!-. Reconocería esa voz a kilometros, -Amara que bueno que te encontré, fíjate que...- su rubia amiga se quedo sin habla por unos segundos mientras fijaba su vista en el rubio que admiraba unas vestimentas antiguas.
La castaña soltó un pequeña risita a lo que su amiga la miró mal y la arrastró un poco lejos de Marco.

-Amara Jolien Kast, ¿me podrías decir por que carajos le estas dando un tour a Marco alías el ardiente Reus? ¡¿Por que no me dijiste?!-.

-Espera, espera. Primero, no grites que este es un museo, no un parque. Dos, no me llames por me segundo nombre, sabes que no me gusta. Tres, el vino y pidió el tour, no se lo podía negar y cuatro, no creo que Marco, "el ardiente" Reus quiera que estés aquí acosándolo-.

-¿Así que piensas que soy ardiente? Vaya que lo tenías bien escondido-. Amara sintió su sangre hasta los pies cuando escucho su voz detrás de ella; quería que se la tragará la tierra en esos momentos.

Volteó a verlo y se dio cuenta que tenía su sonrisa característica de el, solo que ahora mas grande. Tragó saliva y estaba dispuesta a seguir con la explicación para pasar desapercibido el momento vergonzoso.

-¿Que te parece si este chico ardiente te lleva por un café y claro, también a tu amiga?-. Amara rodó los ojos y se fue caminando hacía donde estaba Berit con una sonrisa burlona, le paso por un lado y se dirigió hacia la zona de casilleros.

-¿Acaso dije algo malo? ¿Es alérgica al café?- preguntó el rubio un poco confundido.

-No te preocupes, ella ama el café, solo que es un poco rarita y no sabe aprovechar oportunidades cuando las tiene en frente y más si se trata de un dios griego alías jugador alemán-.

Marco soltó una carcajada, sabía que ella le podía ayudar con la castaña y también sabía que se iban a llevar muy bien.

-Por cierto, mi nombre es Berit Frött, mejor amiga de Amara, alías amargada. Si necesitas algo cuenta conmigo, se que es apresurado y que eres un futbolista famoso, pero quiero que al menos salga con alguien y que se divierta-.

Eso fue como música para los oídos de Marco, ahora si podría acercarse mas a Amara y más porque tendrá de aliada a su mejor amiga.

¿Como dejar de querer lo que empezaste a querer sin querer?.

She m.rDonde viven las historias. Descúbrelo ahora