veinticinco

450 42 8
                                    

Un gruñido fue lo único que escuché cuando patee a la persona. - oye, un poco mas a la derecha y me habrías dejado sin hijos - escuché a Erick.

- ¿que hacías? - pregunté sería - no puedes solo venir y asustarme solo así..- reclamé.

- tengo que llevarte a un lugar..- dijo.

- no, yo tengo que ir a mi casa, mi madre me está..

- oye, tranquila será rápido.- seguido de eso me subió a su auto, reclamando que yo estaba pesada y yo reclamando que el era el que me había metido a la fuerza. Íbamos en silencio mientras sonaba a lo lejos one call away de Charlie Puth, aunque siendo sincera apenas si le ponía atención, me dediqué a ver el camino para ubicarme por donde íbamos. - ¿como te ha ido? - preguntó y lo miré, definitivamente su intento por romper el silencio no sirvió, solo le hice una mueca contestando su pregunta. - ¿te robaron la lengua los ladrones? - preguntó y rodé los ojos, me limité a decirle "eres muy molesto" y le vi sonreír sarcásticamente mostrándome sus dientes blancos y perfectos que estaba segura que podrían destellar de lo perfectos que eran. Estacionó frente a un restaurante y frunci el seño debido a que ya le había dicho que mi madre me esperaba para almorzar.

- ¿que hacemos aquí? - pregunté y el tomó mi muñeca, evadiendo mi pregunta, únicamente me llevó adentro, era un restaurante de churrascos. Me sentó en una de las mesas donde se podía ver como el chef cocinaba enfrente tuyo y se puso un delantal. - ¿asi que trabajas aquí? - pregunté.

- ¿te gusta el lugar? - preguntó sin contestar a lo que había preguntado, observé detenidamente el lugar y fue fácil debido a que sólo se encontraban 2 clientes. El lugar estaba pintado con la combinación de rojo, negro y blanco además que tenia varios cuadros de bandas como "The beatles" "ACDC" y "Michael Jackson"

- es muy lindo..¿trabajas aquí?- volví a preguntar.

- soy el dueño- dijo enorgullecido con esa sonrisa de ganador.

(...)

- deberías limpiar, digo. Por lo que veo tu casa es un desastre..- dije a Calum. Ya que nos encontrábamos hablando por videollamada, el me sacó la lengua infantilmente.

- al menos tu apartamento si está limpio ¿cierto? - se burló sabiendo que yo lo tenía igual o peor que el. Le enseñé mi dedo del medio y el puso una mano en su pecho fingiendo estar ofendido. - has pasado demasiado tiempo con..

- Michael. - completé la oración antes de que el la terminara.
El silencio se hizo presente por ambas partes, pero sabia que me pedía disculpas por haber mencionado aquel nombre de la persona que extrañaba mas que a nada en el mundo. - no te preocupes, ya no pasaré tiempo con el, supongo.- intenté bromear pero solo salió como si le echara en cara todo lo que había pasado, como si le estuviera culpando.

- yo no quería mencionar.. Ah ________, lo lamento. - suspiró.

Intenté sonreír pero salió una mueca rara la cual solo ignoré, - no te preocupes.

*voy a subir otro capítulo mas tarde porque esto está muy corto, voten y comenten <3*

Demons [Michael Clifford]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora