Dejame amarte. [Sasuke Uchiha y tú]

Capítulo 2.

××

—Fue un golpe fuerte, me contaron que empezó a sangrante la nariz apenas la pelota llegó a tu cara.

—Ya dejame en paz, mamá.

—¡Solo estoy ayudando a mi querida hija! —la madre se cruzó de brazos adoptando un aire infantil—. Por cierto, te puse un parche de Hello Kitty en la rodilla.

____ se avergonzó, pensando lo inmadura que era su mamá a veces.

—Estoy bien, ya no me duele nada, en serio, vete de mi cuarto.

—Bueno, bueno —se levantó y se dirigió a la puerta un poco ofendida por las palabras de su hija—. Por cierto, un chico llamado Naruto estaba muy preocupado por ti... ya, me voy.

____ miró la puerta cerrarse lentamente, y cuando ya estaba completamente cerrada, se acomodó más en su cama y prendió su celular.

Narutonto: ¡____-chan! ¿estás bien? pensé en acompañarte a tu casa pero no me dejaron ಥ_ಥ -14:42 p.m-.

Narutonto: ¿Estás ahí? te he llamando pero no contestas o(╥﹏╥)o -15:03 p.m-.

Narutonto: Tu mamá contestó y dijo que estabas bien, me alegro mucho ∪︿∪ -15:36 p.m-.

Narutonto: Ah, y espero que vayas el lunes a clases, te estaré esperando. -15:49 p.m-.

—Naruto... Naruto es un tonto.

Dejó su celular de lado y apretó una almohada contra su pecho, tratando de alejar todos los sentimientos que en ese momento sentía.

Por ejemplo, el arrepentimiento que sentía por haberle dado su número al rubio.

—Todos los hombres son unos tontos...

××

—____ cariño, ¿estás completamente bien? si quieres mañana no vas a clases.

—No te preocupes mamá, me siento bien, solo tengo un poco de hambre.

Quizás en otra vida hubiese fingido incluso estar más enferma para faltar todo un mes, y aunque el dolor de cabeza no había disminuido mucho, ____ no se perdería ni un día de clases. Seguiría siendo la primera de su curso aunque le cueste la vida.

—¡Tengo lo que necesitas!

Rápidamente, empezó a freír algo, mientras sacaba salsa de frambuesa del refrigerador junto a unas frutillas y un par de naranjas.

Un poco de azúcar por aquí, un plato, un vaso, servilletas y...

—¡Listo!

—Waffles con salsa de frambuesa y frutillas, más un jugo de naranja... —dijo sospechoso ____, moviendo un poco su comida para verificar que nada raro estuviera metido entre medio—. Un simple sándwich hubiera estado bien, mamá.

—Eres mi tesorito, siempre te consentiré en todo... oh, por cierto, el otro día cree un vestido precioso y necesito a "alguien" que lo modele para sacar algunas fotos.

____ levantó una ceja y frunció la boca.

—Cofcof alguien cofcof hija.

La señora Hayashi trató de hacer un ojitos de gato, así como niña pequeña pidiendo un dulce.

"Ahora entiendo porque el desayuno elaborado" pensó la hija, y con una mueca, se dignó a aceptar la propuesta de su madre.

××

Luego de un par de horas -que fueron eternos para ____-, la sesión acabó, dándole el descanso que merecía la modelo, luego de haberse probado unos diez vestidos y otros conjuntos que su mamá había creado.