Capítulo 25

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Ocho meses atrás

Había pasado ya un tiempo desde que Donghae regresó a Mokpo. Al terminar la universidad busco un buen trabajo, suerte que a la primera lo hayan aceptado. Los días transcurrían iguales, uno tras otro en los cuales conocía nueva gente, tenía nuevas experiencias, pero había algo que con el paso del tiempo, aún permanecía dentro de él; HyukJae. El recuerdo de su rostro, de la sonrisa más hermosa que él había visto, el ser más lindo que él conocía. Cuando los recuerdos llegaban a él, sentía un gran vacío, lo extrañaba demasiado. Pero de inmediato esos bellos recuerdos eran remplazados por otros no tan gratos, recuerdo de los que Donghae se arrepentía mucho. Jamás se iba a perdonar todo el daño que le había causado al chico más gentil y hermoso del mundo. Día a día se arrepentía de lo que había hecho, de las palabras que había dicho, de haberlo dejado y lo peor, de haberlo herido con una mentira tan tonta. En esa ocasión había dejado de ver a Jessica y cuando se enteró de que debía regresar a Mokpo, la contactó para pedirle ayuda con la mudanza, jamás pensó que justamente ese día HyukJae iría a buscarlo. Aún se sorprendía por la habilidad que tuvo aquel día para ingeniarse algo como aquello... casare con Jessica. Se llevó una mano a la mejilla, el recuerdo de la bofetada que su amiga le dio después de ver a HyukJae salir huyendo de ahí, le hizo cosquillas en la mejilla. Aquel día Jessica lo sorprendió, jamás la había visto tan molesta. Fue ese mismo día que obligado por ella, fue una vez más al lugar donde descubrió la verdad de su ex novio, de su Hyukkie. Cuando se enteró de la verdad, quiso golpearse hasta casi llegar a la muerte. Ese día encontró al dueño del lugar y grande fue su sorpresa al saber que era cercano a Hyuk. Este le conto la verdad de aquel trabajo, HyukJae solo bailaba para ganar algo de dinero extra para la escuela. También le conto que un día, sin más... dejo de ir, cuando hizo cálculos, se dio cuenta que concordaba con el día en que ellos habían empezado a salir y que Sungmin hacía solo dos días que estaba en aquel lugar con HyukJae. Además antes de irse, se topó de frente con chico al que le pidió poder tener un privado con Hyuk aquel día, le conto que realmente había tenido suerte ya que el vaquero enmascarado nunca lo había hecho, y que este acepto solo cuando lo vio. Donghae se sorprendió al enterarse de lo último... HyukJae acepto hacer eso porque supo quién lo pedía... si era así ¿Cuál fue la reacción de HyukJae al verlo ahí? Una conclusión algo lógica lo golpeo de inmediato. HyukJae había pensado que lo engañaba y quería darle una lección, ¿Que tan cercano estaría a la verdad? Salió de aquel lugar totalmente abrumado de muchos sentimientos. Era un estúpido, no tuvo la suficiente confianza en HyukJae, no lo dejo explicarse... Ese día fue corriendo a buscarlo, debía pedirle perdón y si tenía suerte, todo regresaría a la normalidad. Sin embargo, cuando llego a la casa de Hyuk, su corazón se desgarro al oír aquel llanto que provenía de uno de los cuartos que se encontraban en la planta de arriba. Donghae se pegó a un árbol y poco a poco se dejó caer, abrazo sus rodillas y lloro junto a HyukJae toda la noche. Jamás se lo perdonaría, Donghae se alejó de la vida de HyukJae, él no debía ser perdonado, él debía sufrir por haber dañado a la persona que amaba, él no supo proteger a HyukJae y si intentaba algo en estos momentos, acabaría lastimándolo más.

Donghae salía de su trabajo como cada noche, el aire soplaba realmente fuerte aquel día y al rozar su piel, esta se erizaba por completo al sentir el frio. Al igual que siempre, Donghae iba pensando en las escenas de él y HyukJae si todo hubiera sido diferente, pero esta vez algo lo saco de sus sueños; un llanto. Donghae comenzó a caminar más rápido dirigiéndose al lugar de donde provenía y al llegar lo que estaba frente a él lo dejo enmudecido y con las lágrimas a punto de salir de sus ojos. Frente a él había una pequeña canasta y dentro de ella un pequeño bebé. Donghae lo tomo entre sus brazos y sin pensarlo dos veces se dirigió de inmediato a un hospital. Cuando llego atendieron de inmediato al pequeño, pasaron varias horas hasta que el médico salió.

-¿Cómo está el bebé?

-Afortunadamente lo has traído a tiempo. El pequeño solo presenta una pequeña infección que hemos tratado con poco antibiótico, no se preocupe, no corre ningún riesgo

-Ah... que bueno es oír eso

-Pero dígame, ¿cómo fue que paso todo?

-Vera, yo iba caminando por la calle cuando lo vi

-No puedo creerlo, este mundo cada vez se despedaza más y más con gente así de cruel

Donghae permaneció todo el tiempo en el hospital hasta que el pequeño estuvo bien. Hablo a su mamá para que fuera al hospital, una cosa llevó a otra y cuando se enteró de que el pequeño iría a un orfanato, hizo lo posible por quedarse con el pequeño. Se había encariñado con él, supo que es pasar la angustia de tener enfermo a un hijo y de alguna manera, ese vacío que sentía en su vida, el pequeño lo lleno con su ternura.

Actualmente

HyukJae salió de prisa de su trabajo. Tenía una cita con Sungmin y ya iba muy tarde. Esta vez sí le daría una respuesta, a partir de hoy, Sungmin y él serian pareja. Tenía que reconocer que la idea no lo emociono como esperaba, pero era cuestión de tiempo. Se fijó en su reloj y... demonios. Ya habían pasado 10 minutos de su cita, HyukJae comenzó a correr sin mirar atrás hasta que... ¡PUM! Choco de frente contra alguien

-¿Estas bien? –HyukJae había ido a parar directo al suelo por el impacto, pero al parecer la otra persona había sido lo suficientemente fuerte para no caerse. Cuando vio la mano que le ofrecía ayudarle a levantarse, la tomo y de un solo movimiento estaba de pie

-Gracias, yo llevaba prisa y no lo vi, discúlpeme –Decía mientras se sacudía por completo el traje lleno de tierra con la mano que tenía libre

-No hay problema, Hyuk... -Al oír de nuevo esa voz, algo dentro de su cerebro hizo clic. Regreso su vista al rostro de la persona con la que había chocado y ahí estaba él

-Don-Donghae...

-¿Cuánto tiempo sin vernos, Hyukkie? –Algo dentro de HyukJae despertó de nuevo provocándole la más cálida sensación en su interior

-¿Qué... qué haces aquí? –HyukJae seguía tomado de la mano de Donghae, estaba seguro que si lo soltaba, caería de inmediato ya que sus piernas le temblaban demasiado como para sostenerlo. Pero al ver que Donghae miraba sus manos aun siendo sostenidas una de la otra, quiso soltarse de inmediato –yo lo siento, no... no me di cuenta –sin embargo, Donghae hizo aún más fuerte el agarre

–No te preocupes Hyuk... esta vez no pienso soltarte


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Y así fue como el pequeño HyukJin apareció en la vida de Donghae :3  Gracias por el apoyo, cariño y oportunidad que le dan a este fic. Que tengan excelente inicio de semana. Byeee...

Tu secreto, mi secretoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora