Veintisiete

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27. Esto es nuevo para mi, Olivia.

«Triste, devastada. Cuando mi corazón a punto de romper... sin saberlo, poco a poco esta persona que estuvo todo este tiempo a mi lado y me dio calor. Fui rescatada por la existencia de Zack.»   

—¡Estoy todo empapado! —se quito su camisa ignorando la presencia de Olivia, fue a su habitación y saco una polera al azar de su armarioy una toalla, volvió hasta la entrada de su casa donde estaba Olivia empapada— ¿Qué estas haciendo? ¡Date prisa y entra! —le entrego la toalla, ella solo se limito a asentir.

La mente de Olivia estaba dando vueltas. ¿Qué deberia hacer? ¿Deberia irse? Es muy tarde, sus pensamientos fueron a lo que Alicie cada rato contaba cuando un chico y una chica estaban solos en casa.

— Ve a bañarte primero.

— ¿Bañarme? —preguntó, gritó sorprendida.

— ¿Por qué te sorprendes? Si te quedas como estas vas a coger un resfriado. —dijo serio y le entrego una camisa y unos pantalones que no eran ni casi la talla de la muchacha— Ponte esto.

No podia concentrarse, analizo todo lo que Zack pronunció, no habia ningun sentido raro, pero aun asi no sabia que decir. Hace mucho tiempo que no estaba a solas con un chico, si hablamos de Zack, incluso peor.

Zack le señalo donde estaba el baño y su habitación, camino por donde señalo Zack para ir al baño, cuando estaba por doblar el pasillo escucho un «espera» de parte de Zack, dio media vuelta y observo como Zack empezo a rascarse la nuca

¿Qué pretende? Se pregunto.

— No tienes que comportarte asi, sé que aun no puedes olvidar a Nick. Todo lo que necesito es que me mires tan solo un poco a mi —sus ojos azules se posaron en Olivia, su rostro demostraba cuan en serio hablaba—, y yo me sentire como si un milagro hubiese ocurrido. Yo no te voy a abrazar de repente, asi que no te preocupes. Yo esperare hasta que te fijes solo en mi, Olivia.

Él sabia que no iba a decir nada, cada minuto la observaba cuando podia y conocia mas de ella, su caracter, expresiones, sus falsos gestos para hacer feliz a otras personas. Sabía que su corazón solo llama a Nick, pero él no estaba dispuesto a rendirse, camino hasta su habitación en silencio.

Las gotas de agua empezaron a chocar con su cuerpo, las palabras de Zack... en ningun momento pudo ver o comprobar que lo que estaba diciendo era mentira, su rostro... no lo habia visto asi.

—Olvidarme de Nick en estos momentos es completamente imposible —susurro para ella misma.

Pero ella queria tratar de ser el tesoro de Zack, queria que él le guste más y más. Si ella esta con Zack tal vez... una vez más sea capaz de mirar a alguien.

Salio del baño en vuelta en una toalla blanca, se sintio fresca al salir de la ducha. Miro donde habia dejado su ropa interior y la ropa que Zack le dio, se sorprendio al ver que no estaba en el lugar y solo le vino un nombre en su cabeza.

¡Zack!


Escucho el grito de Olivia y se sobresalto. Corrio hasta el baño y sin pensarlo abrio la puerta. Abrio los ojos como platos al ver que su perrita estaba mordiendo la ropa de Olivia y corriendo por todos lados, detrás se encontraba Olivia con solo brasier y camisa —que no estaba abotonada— gritando a la perrita que se detenga.

— ¡Zack! Atrapa a ese perrito —no se percato de como se encontraba.

Se quedo inmovil ¿Dos Olivia?

— ¡Oli, deja de hacer esos trucos sucios! —gritó a su perrita.

— ¿Oli? ¿Yo?

— ¡No! ¡Tu no! —agito sus manos, sonrojado.

¿Príncipe adorable o pervertido?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora