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Día 4

El clima al día siguiente estaba controlado, a pesar de que llovía de vez en cuando, no era tan agobiante como lo fue ayer. Por ende, las labores eran resumidas, al igual que las clases. Aun así, varias comunidades fueron afectadas y no todos los estudiantes fueron a la escuela ese día, pero para desgracia de Ahreum, su padre volvió a llevarla a la escuela al día siguiente. Siendo ella la única de su clase presente ese día.

Por la poca asistencia estudiantil, y que varios maestros tuvieron complicaciones para llegar a clases, en las primeras horas fueron llevados hacía el gimnasio. Los que querían podían hacer actividades físicas, talleres de cómo actuar en situaciones de emergencias, aún así, habían otros que estaban haciendo sus deberes o durmiendo en el piso.

Ahreum, algo agobiada, buscaba por todas partes a Sehun. Aunque le agradaba la compañía de Gook. No quería encariñarse con un objeto y mucho menos uno que no sería suyo para siempre. Que fue una de las pocas revelaciones que tuvo mientras cuidaba de este muñeco durante la noche, ya estaba acostumbrándose a él. Y era lo que más le asustaba.

Si se encariñaba muy rápido de las cosas, de alguna forma u otra, terminaba perdiéndolas. No importaba si estos fueran objetos, amistades, parejas, incluso mascotas. Ahreum sentía que todo lo que ella creía que podía ser permanente en su vida, terminaba dejándola tarde o temprano. Debido a esto, era muy cuidadosa cuando estos llegaban a su vida demasiado rápido.

— Está lloviendo. — Un pequeño cartón de leche de fresa apareció frente de ella, y justo con eso miró a Chanyeol.

— Me di cuenta. Gracias. — La chica sonrió mientras aceptaba el regalo y de paso el chico se sentó a su lado en el piso. — ¿Haz visto a Sehun? — Preguntó mientras que con el pajilla abría la bebida y empezaba a tomarla.

— Fue con Baekhyun a comprar algo a la papelería. — Le respondió el chico mientras que le ofrecía una sonrisa—. Tienen que entregar un proyecto que no han empezado.

— ¿Te gusta sonreír? — Ah Reum le preguntó juntando sus cejas. Dándose cuenta después que su pregunta podía haber sonado demasiado pedante—, No lo quise preguntar así.

Chanyeol asintió. — Siempre estoy sonriendo, cómo un tonto.

—¿Usabas retenedores? —Le preguntó, un poco curiosa. Chanyeol se rió ante su pregunta, y poco a poco terminó asintiendo.

—Hasta el año pasado, si.

— Tiene sentido. — Ahreum le contestó, asintiendo. Ella también sonriera todo el día si también había pasado por ortodoncia.

Los gritos de varias chicas llamaron su atención, estas se formaban en un círculo junto a una pelota de volleyball con ellas. Notó que entre ellas se encontraba Yahye, quién miró a Ahreum con poco interés antes de volver a su juego. Esta no les tomó importancia y continuó bebiendo de su cartón.

Chanyeol que por otro lado se encontraba mirando todo el gimnasio, mientras pensaba en algo que podría decir, pero se encontraba callado mirando a las chicas que juegan hasta que su cerebro pensara en algo, lastima que lo que pensó era una total estupidez.

— ¿Te gusta el deporte?

Ahreum se rió, mientras escribía algo en su teléfono.

— No, a veces corro o monto skate, solamente eso. —Ahreum negó con la cabeza mientras miraba su teléfono. — ¿Tú juegas alguno?

dumb ー oh sehunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora