Hace ya una hora que estamos aquí.
Ha sido...
La verdad, no sabría describir como ha sido esta última hora.
Hemos grabado un video los cuatro. Eso ha sido divertido, la verdad. Un poco extraño, pero divertido.
Era con el detector de mentiras ese. Y algunas preguntas... Algunas preguntas me he sonrojado. Ay, que pillín este Rubén. A parte de los calambrazos de la cosa esta. Joder, que duele.
Y luego las chicas seguían flipando. Han agarrado los móviles y se han puesto a hablar con "el fandom".
Debería aprender a hablar como una de ellas si quiero sobrevivir en esta relación.
Así que él y yo nos hemos escabullido diez minutos a estar un rato solos en su habitación. Sólo eso, no seais malpensadas, que os conozco.
Y bueno, ahora nos han venido a buscar, afirmando que o vamos al comedor con ellas o se nos unen.
Las amo con locura y tal, pero eso ya es pasarse.
Así que ahora estamos los cuatro en el comedor. Ellos tres estan bromeando juntos. A mi no me apetece.
Es extraño, estoy entre las personas que más quiero en el mundo. Mi novio y mis dos mejores amigas. Estamos en Madrid. Con dos gatos adorables. Rubés hasta ha sacado (otra vez) la nutella.
Y aun así, siento que algo va mal. Como que algo falta. Aunque no tenga ni idea de que.
Me levanto bruscamente. De golpe todo me da vueltas, me dirijo al baño.
Enciendo la luz y me miro al espejo. Me lavo la cara para despejarme un poco.
Me siento encima del vater. Con todas las tapas bajadas, claro. Y descanso, pienso.
Que es lo que me falta?
Reviso todo lo que he anhelado estas últimas semanas.
Lo que más; él. Pero está ahí, eso no puede ser. Y si lo quiero de otra forma, que digamos, antes eso ya ha pasado, no creo que sea eso tampoco.
Poder hablar, y gritar y cantar, por lo del cuello, eso también. Pero ya estoy bien del todo.
No sé que coño echo tanto de menos.
Pero bueno, da igual. Ya estoy mejor del mareo o lo que fuera, así que me levanto y me miro al espejo. Me retoco un poco el pelo, que no se diga. Esbozo mi mejor sonrisa y vuelvo al salón.
Pao sonríe al verme. Y de golpe, se me enciende la bombilla.
-Ostia, es verdad! Feliz cumpleaños Pao! Es hoy, verdad?
Paula casi salta del sofá cuando habla. Bueno, más bien grita.
-Como se me ha podido pasar! En serio, sabes lo despistada que soy, no me lo tengas en cuenta! Felicidades Pao miamol!
Las tres nos abrazamos y ella nos da las gracias y dice que no pasa nada.
Rubén mira la escena, con una mirada super tierna. Se levanta poco a poco y se nos acerca.
-Bueno, pues, felicidades, supongo.
A la cumpleañera le brillan los ojos. Parece feliz, y eso me hace feliz a mi. En ese aspecto, la amistad es lo mejor.
Pues ella se lanza a sus brazos y le abraza muy, muy fuerte.
Si ahora me preguntaran que como ha ido la tarde, respondería que fenomenal.
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El hotel y él (Fanfic Rubius)
FanfictionNo me gustó nunca en especial. No hasta que le conocí, y no creo que fuese casualidad. A través de dos habitaciones de hotel, una conferencia y un poco de suerte se puede llegar a descubrir muchas cosas..