Scape from you

La llamada

-Si! Ah! Mas duro si, me encanta mmmm si si si hazlo, móntame mas duro muñeca, más rápido, voy a correrme, Lex espera- acelero y lo empiezo a montar más rápido como una mujer poseída, veo como se contrae su gesto, sus ojos están nublados de placer, su abdomen se ha contraído. -estas cerca nena? Lex no aguanto, me vengo ahhhhh....- sonrío al ver cómo se viene gritando su climax en un ensordecedor extasis que lo lleva a parecer un total sumiso del placer.

-Debo irme, se me hace tarde- tomo mi ropa del suelo y busco mis llaves para salir pitando cuanto antes de aquí. Me toma por la muñeca y me ve con ojos entornados y sorprendidos.

- te vas? Como que te vas? A donde? No puedes irte Lex, pensé que esta noche la pasaríamos juntos, ni siquiera te has corrido, no me has dejado darte placer- el no lo sabe pero el placer que pretende darme no existe. El no puede darme lo que quiero, solo una persona lo puede hacer y el no debe encontrarme nunca. Maldigo para mis adentros por haberlo recordado. Ni las continuas visitas a este adorable chico han logrado distraerme. La necesidad es más frecuente en estos días. Es la fecha lo se. Estoy caliente. Estoy en celo y necesito el calor de un hombre. Pero no cualquier hombre y eso me pone a rabiar. No quiero necesitarlo. No quiero odiarlo por tener esta maldita necesidad pero lo hago. El es el culpable de nuestra separación.

Suspiro y trato de ser lo mas sensible que la situación amerita, no quiero perder otro amigo en el proceso, tengo ya una larga lista de hombres resentidos que intentan odiarme y olvidarme pero que lo único que han conseguido es obsesionarse conmigo. Debo tener mucho cuidado no quiero que lo mismo le suceda a este. -Daniel te dije que no me quedaría contigo esta noche, tengo cosas que hacer y creo que tu capacidad de entretenerme ha sido cuestionable- maldicion veo como su semblante ha cambiado, lo he ofendido. No fue mi intención ser tan drástica e idiota. Argghh no es necesario que sea tan insensible con Dan, el es un buen chico -mmmmm- gimo de frustración, cuando aprendere.

-cariño...- me veo interrumpida por su semblante ofuzcado y herido.

-No... Vete, no digas más, estoy cansado, lo he intentado todo Lex, te amo... Lo interrumpo porque no quiere escuchar mas de lo mismo.

- Daniel basta, tu sabes que esas palabras no...- pero su enfado me atraviesa

- No Alexa tu para, eres una hipócrita, no puedo decirte que hacer pero tu quieres gobernar mis sentimientos, dime si alguna vez me dejaras ganar tu corazón, dime si alguna vez tendré una oportunidad- se lo que espera escuchar, se lo que quiere que diga pero no puedo, no voy a mentirle, he sido honesta con el desde el principio, no puedo amarlo, estoy atada, le pertenezco a otro y no puedo hacer nada para romper este hilo que nos une si la otra parte no esta de acuerdo. Veo como sus hombros caen en derrota, me duele herirlo, no puedo darle lo que quiere. Y eso me deja cansada y adolorida. Debo irme y alejarme de el.

-Daniel no volveré, es mejor que desaparezca de tu vida. No quiero hacerte daño- rozo mis labios con los suyos en una caricia mas fraternal que la de dos amantes, -te mereces a alguien que te adore y te ame- me duele ver las lagrimas que se acumulan en la orilla de sus ojos -Adios cariño, se bueno-

Escucho como me llama y me pide hablarlo tranquilamente, no puedo reconsiderarlo, no pienso hacerle mas daño. Terminaré destruyéndolo y cargando con esa culpa. Lo quiero mucho como para romperlo; porque eso es lo que haré si sigo a su lado. Llego a mi preciosa dag, mi amiga, mi moto, arranco y tomo el camino tan rapido como la maquina es capaz de hacerlo, quiero llorar por la perdida.  Pero no estaría llorando por el hombre que acabo de dejar. Estaría llorando por el. Por Mi lobo el que deje atrás en mi pasado.

Rayos!!! He llegado tarde a casa. Will esta en la puerta y se que un sermón esta en el menú de la cena. El sabe lo que hice esta noche. Sabe que me entregue a mis impulsos. El sabe lo que soy, una mujer lobo, atada, marcada pero sin poseer, sin embargo el no lo es. Es un profesor que estudia a nuestra especie, nuestra raza a despertado el interés de muchos, incluyendo los Haingens, seres que se alimentan de nuestra sangre para foltalecerse y vivir miles de años. Mi conexión no esta completa. El ritual se vio interrumpido con mi huida. Will es como un tio. El único familiar al que reconoceré como tal.

Me acerco con mi mas inocente expresión tratando de apaciguar su latente enojo. -hey! Will listo para un delicioso trozo de pie de Judy?- he pasado en el camino por el restaurante de Judy para lograr chantajearlo y distraerlo de la inevitable charla, el adora el pie de Judy, mejor dicho el adora a Judy. Ha estado enamorado de ella desde que llegamos aquí y aun no ha hecho su movimiento, si es que tiene algún movimiento hummmm pensandolo bien nunca he visto a Will coqueteando creo que tendre que darle algunas clases y enseñarle el encanto que debe tener para traer alguna chica a casa. Dudo que me deje ayudarlo pero no creo que deba enterarse de que lo voy a hacer.

-Niña no trates de distraerme, tu sabes que no debes salir estos días, la conexión es tan fuerte que puedes correr peligro de ser encontrada _oh oh esta cabreado- y porque no contestas tu maldito celular! Ha elevado el tono esa es una mala señal. Will no se enoja Will no se enfada, el es la epitome de la tranquilidad y la paz. Esto es una gran jodida señal de que algo anda mal y no me gusta.

Suspira resignado y se mueve de la puerta para dejarme entrar. - ven pequeña, pasa... Que tu y yo tenemos algo de que hablar - lo sabia! Sabia que algo tenía tan alterado a mi protector.

- Que pasa? Ocurre algo? Dije con un tono mas urgente que delataba mi nerviosismo y ansiedad. Temía lo peor, en este caso reencontrarme con mi horroroso pasado.

O es algo malo o debo verme realmente fatal por la cara de preocupación y la mirada pensativa que me esta dando. Joder y ahora que hice. Ha pasado de estar cabreado s esta inseguro, pero que carajos esta pasando?!
- Alexa, he recibido una llamada esta mañana. Preguntaron por ti, por Alexandrya Elleanor Ctwright - me quede confundida con sus palabras. Quién querrá contactarse conmigo? No tengo amigos, estoy en un estado sentimental actual inconcluso y no recuerdo haber obtenido amenazas en los últimos meses. Esa llamada me intriga y aumenta mi curiosidad. Y por el semblante de Will mi empeño por saber lo que esta pasando aumenta.

Me quedo de piedra cuando me doy cuenta. Maldita sea! Han usado mi nombre completo y eso solo quiere decir una cosa.

La forma en la que Will me ve, lo dice todo. Lo que tenga que decir no me gustará. - Han llamado de Alemania- ahí lo dice, así de romplón seca y fríamente y es en ese momento sentada en la pequeña cocina de nuestro modesto apartamento en la cual pretendía ingerir mis alimentos nocturnos que mi mundo entero se derrumbó. No estoy lista, no quiero verlo. Es demasiado pronto, es posible que mi expresión refleje lo que estoy sintiendo porque la cara de preocupación de Will me lo confirma. Estoy asustada. No quiero ver a Luke, se que es él aunque no me diga quien ha llamado estoy segura que es el quien ha intentado contactarse conmigo. Bajo la cabeza y me la sostengo en un apretado agarre con ambas manos tratando de apaciguar el dolor que empieza a martillar en mi.

Justo cuando comienzo a salir de la bruma que bloquea mi cerebro y logro despejar mi cabeza tratando de articular palabras... El timbre suena insistentemente interrumpiéndonos a ambos de lo que sabemos es un tema delicado para mi.
- No te preocupes iré a ver quien es - dije levantándome con un leve temblor en mis rodillas; camino distraída pensando en mis opciones y tratando de concentrarme en buscar una solución que no perjudique a Will, no puedo seguir arrastrandolo a mi mierda, debo hacer algo; pero que?! Tampoco quiero dejarlo. Soy todo lo que tiene y yo lo necesito.
Justo en ese momento abro la puerta y me congelo.

Estoy en shock. No puedo moverme. Estoy paralizada por la rabia y el miedo. La sangre abandona mi rostro y siento que no podré estar de pie ahora. Es la persona a la que más temo y odio y a la cual no esperaba ver nunca mas.
- Tú?!