Que haces aqui?

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Me aparto bruscamente de su lado. El esta aquí -pienso- tan cerca, no puedo verlo, no aún.

sabes Alexa estoy algo cansada porque no vas y te relajas un poco. Creo que lo necesitas. Puedo ver el dolor en los ojos de la abuela. Maldito carácter impulsivo el que tengo.

-Nanamell perdona, no fue mi intención ofenderte, he pasado por tantas cosas estas últimas horas. Demasiadas sorpresas me tienen en alerta. Veo como su semblante aun no cambia. Suspiro con resignación; tendré que venir mas tarde.

-Esta bien, vendré más tarde y perdona mi arrebato. Lo siento mucho. Me disculparías si logro conseguirte y pasar de contrabando las galletas de banana con almendras que tanto te gustan? Le sonrío tentativamente esperando que la situación mejore. No puedo irme y dejarla molesta conmigo. No la he visto por años y vengo a cagarla con mi impulsivo temperamento de mierda.

Alivio recorre mi cuerpo al notar como su mirada se suaviza. -Claro nena, tu sabes que no puedo resistirme a unas galletas de banana con almendras. Me has pillado con ello. Como no perdonarte con tan tentadora ofrenda de paz. Río a carcajadas. Extrañaba a mi familia. Bueno a una parte de ella.

Me despido de la abuela prometiendo regresar y al salir al saloncito encuentro a mis padres y Will esperándome. Esta sera una larga discusión ya lo presiento. Bueno hora de la familia feliz.

-Will nos quedaremos en el hotel... Papá me interrumpe, suspiro porque ya lo veía venir.

-Hija tus cosas y las de tu amigo ya se encuentran en la mansión y consideró descortés de tu parte no saludar a tus hermanos. Ellos ya saben que estas aqui y estan ansiosos por verte. Gruño con frustración; demonios no tenía contemplado fingir que eramos la perfecta familia feliz. No me gusta que me acorralen y es justo lo que mi padre esta haciendo.

Subimos todos al auto y pienso en la actitud que tuve con nanamell. No cabe duda que Luke aun me afecta y no esta demas que comience a seguir los consejos de Will. En verdad necesito aprender sobre el manejo y control de la ira. Tanta agresividad alejara a las pocas personas que me aprecian de mi vida.

Llegamos a la vieja mansión Ctwright ha cambiado un poco diría que es mas grande. Tres niveles de majestuosidad blanca. Ventanales de madera caoba oscura diseño colonial un camino de azaleas rodea toda la casa, las puertas se abren y varias personas salen a recibirnos. Apenas si estamos bajando del auto y ya están todos en fila para la inspección. Bola de chismosos. Me acerco poco a poco con la barbilla en alto. Bueno señores es hora del show.

Grandes sonrisas falsas adornan la cara de dos bellas mujeres que no conozco. Ahora comprendo porque la casa es mas grande. Al parecer mis dos queridos hermanos mayores viven aquí con sus compañeras pensé que tendrían sus propias casas de lujo. Que raro. Mis hermanos están a su lado con el rostro sombrío y muecas de disgusto y desaprobación. Creo que se alegran de verme.

Me fijo primero en Joshua es el menos intimidante solia ser el mas tratable y cuando hablo de llevadero me refiero a que no se metia en mis asuntos y yo no me metia en los de el. El es treintas y dos años mayor que yo por lo que ahora tendra cincuenta y siete. Sigue siendo hermoso. Alto, rubio, ojos azules como los de mi padre y yo, parece un chico surfista despreocupado de la vida, bueno por fuera porque por dentro es el mas obsesivo compulsivo que conozco. Me acerco y veo su agarre fuerte en los hombros de una chica que insegura me sonríe... Mmmm esta bien... A simple vista parece hermosa, dientes blancos, pelirroja, ojos verdes, pequeña y algo plana. Ambos me miran y ninguno tiene intención de saludar.

-Joshua- asiento superficialmente miro a la pelirroja quien levanta la mano y me dice hola en un susurro.

-Alexa te presento a Vivían. Mi esposa- dice con orgullo Joshua sonriéndole a la pequeña mujer que se ruboriza con su mirada.

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