Maldita Chamarra.

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Jade.

Después de ese encuentro tan raro con el chico. No volví a saber que pasó con el ya que Danna jamás salió de la habitación supuse que lo había calmado.

Cam me encaminó a mi casa. Llegué, gracias al infierno que mi tia Lisa no estaba. Cogí unas "Mmmm" del refrigerador.

Me arroje a mi cama. Mi tia jamás habia tenido hijos así que yo era como su hija por lo tanto era bastante consentida. En el piso había una especie de cojín en el que saltaba y me impulsaba hasta mi cómoda cama.

Tomé el control de mi bocina. Empezó a sonar "Love Your Crazy". Me encantaba la música de Mikky Ekko era bastante buena. Seguí comiendo mis "Mmmm" pero mi vista recayó en algo. La chamarra del temperamental.

Rápidamente me paré la tomé entre mis manos, apagué la musica y salí de mi casa.

Caminé hasta casa del señor Goldman
Ya eran alrededor de las 8:30 de la noche pero los chicos dormían hasta tarde asi que con suerte me abrirían.

Abrí la reja y pasé. Toque un par de veces, un Luke en calzoncillos muy adormilado me abrió hasta que se dio cuenta que era yo y que el estaba solo en calzoncillos.

Subió rápidamente las escaleras y yo pasé. En la sala estaban Ethan, Colton, Nathan y Jake. Sin hacer ruido subí las escaleras. Casi todo se encontraba apagado, conocía las habitaciones de cada uno pero no la de el.

Cogí el pomo de la puerta de un cuarto pero vi a Sara y Pam dormidas. Cerré inmediatamente, abrí la puerta del principio de las escaleras pero vi a Cam dormido.

Solo quedaban 2 puertas que no conocía quien dormía ahí. Abrí una pero no encontré a nadie así que pasé.
Me sente en la cama para ver mi alrededor y tratar de reconocer quien dormía ahí.

Me levante y abrí abrir la puerta cuándo.

-¿Husmeando pequeña?-dijo a mi espalda.

Mierda.

Giré y vi a Travis con un pans gris, una camisa blanca justa a su anatomía.

-No-dije lo más firme que pude.

-¿No?- preguntó Travis burlón y tomó pasó hacia mi.

-No-dije con la mirada en el.

-¿Segura?-enarco una ceja y sonrió divertido.

-S..ssi-mierda ahora tartmamudeo.

El soltó una risa. Caminó más cerca de mi por lo que yo caminé hacia atrás quedando mi espalda pegada a la puerta.

-Te creeré tartamudita-Se alejó de mi, me tomó de la muñeca, abrió la puerta y me sacó.

Me quedé sorprendida por un momento.

"Que amabilidad "

Sólo me quedaba una puerta lo que significaba que ésa era. Gire el pomo.

-Ohh-cerré inmediatamente la puerta de un portazo. Pero alcancé a ver cómo Danna se cayó de la cama ya que el chico se levantó de la impresión en la situación que los encontré.

Si se preguntan en que situación los encontré porque su mente es muy sana para entenderlo o imaginarlo. Sólo les diré que vi que las tetas de Danna eran un poco más pequeñas que las mías.

Esperé unos 13 minutos. Esta vez toqué la puerta dos veces fuertemente para no encontrarlos de nuevo así.

-Hola lamentó haber abierto sin tocar-dije a Danna cuándo abrió.

RIESGO ©.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora