Me levanté de la cama sin mucho ánimo, creo que con ese tal Jake me pasé un poco, me dirigí hacia el cuarto de baño y tras unos 10 minutos de ducha/ concierto en el que el champu y el gel aplaudían por el maravilloso conciert con coreografía de la canción work de Rihanna, me vestí con unos leggins negros y una camiseta corta que ponía do it, desayune y directamente me fui al gimnasio. Mientras andaba miraba las baldosas del suelo y sonreía no se porque pero sonreía creo que echaba de menos a Marla.
-Buenos dias.- entré sonriente al gimnasio, la sonrisa se borró de momento al ver a Mike, junto a su novia-zorra-guarra como un camión, creo que a la chica le hice un escaner de arriba a bajo, no se pero por la cara que tenía tan maquillada me entraron ganas de ir con un pañuelito y hacer como las mamás cuando tienes un poco de salsa de tomate en la mejilla, tienes un poquito de maquillaje aqui aqui y aqui, por favor traedme más papel ¿estoy en contra del maquillaje? no ¿de la chica? que va
-Buenos dias preciosa.- le sonreí de lado y me dirigí directamente a la sala. Me sentía mal por haber pensado así de una persona que no conozco sólo porque se está enrollando con Mike..no me gustaba este sentimiento
Me coloqué las vendas y los guantes y empecé a golpear el saco mientras me concentraba en la canción que estaba sonando en ese momento en mis auriculares.
Resoplé por falta de aire e intentaba coger oxígeno en mis pulmones, dirigí mi mirada por todo el establecimiento hasta que paré en la puerta ahí se encontraba el padre de Marla que me sonreía orgulloso, no tardó ni dos pasos en llegar a mí.
-Creo que es uno de tus mejores días pequeña, al parecer hoy estas mas concentrada.- reí entre dientes y me encogí de hombros.
-Creo que eso tiene que ver con las hormonas.- el hombre sonrió de lado y negó con la cabeza.
-Quien volviera a esa edad...-suspiró y se giró para atender a un mastodonte que estaba haciendo pesas, esa frase es memorable a todas las personas adultas las escucharas decirla una y otra vez...aun no lo entiendo.
Me coloqué de nuevo los cascos y comencé a golpear pero cuando creía que iba a dar aun más de mí el móvil comenzo a sonar, bufé y lo busqué para poder coger la llamada.
-Dime.
Le di un trago a la botella de agua mientras escuchaba a mi madre rechistar a una de sus compañeras de trabajo.
-Cariño, he hablado con la madre de Jake y dice que esta tarde viene su....-la estaba escuchando pero mi atención se fue a como el entrenador miraba a Mike o como Marla se iba apurada de la sala junto a dos mastodontes.
-Me estas escuchando?
-Ehh..si que a las 7 viene a buscarme alguien a casa no?
-Si, Jake vendra a por ti.
-Ajam, chao.
Mi buen amigo Jake..... y ahora si comencé a golpear con más energía el saco.
-Las hormonas?.- el entrenador reía mientras se dirigía hacia a mí.
-Entrenador mis hormonas tienen nombre y apellido .
La risa del entrenador resonó por todo el establecimiento mientras que yo me seguí poniendo roja, no me hacía mucha gracia el hecho de encontrarme con Jake encerrada en un coche o el hecho de estar en la misma casa que él pero mamá habló con Rachel para que me guiara un poco por el mundo del arte, siendo más concretos que me orientara que estaba un poco ( mucho) perdida.
-No pierdas la concentración Ann, volvemos venga 1,2,3...eso es...agacha...bien bien.- las gotas de sudor caían por todas partes y los pulmones me quemaban, era un dolor satisfactorio
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Queen Boxing (REESCRIBIENDO)
Humor-Yo, Anneth Stuart Stmih Mckencie y todos los apellidos típicos que os sepáis y más, como prota de esta historia os prohíbo seguir leyendo si no cumplís estos requisitos: -Sois gafes. -Os da la risa floja en los peores momentos. -Abrís la bocota cu...