She's bad

Pesadillas y confesiones

-El rey de colina topo necesita ollas nuevas. Mira ésta, se ve horrible, está toda oxidada-exclamó el topo, tapando el televisor en el que sus amigos veían una película y mostrando a su gran amigo azul una olla completamente anaranjada.

-No estaría así si no se te quemara la comida todo el tiempo-espetó, correteando al topoide y fijando su vista en la película de acción.

-Deja de ofenderme y has algo productivo-ladró, colocándose tras en sillón y golpeando con un cucharón la olla oxidada. Kord se tapó los oídos por el fuerte sonido y le mandó una mirada asesina.

-¿Por qué Eli no baja?-cuestionó para si mismo Junjie. Kord lo miró algo confundido, se frotaba las manos nervioso y movía constantemente sus pies. El asiático no podía sacar de su cabeza que su Líder estuviera en la misma habitación de la chica que le gustaba. Muchas ideas exageradas se formaban en su cabeza, ¿Y si la estaba besando? No, eso no podía estar ocurriendo, pero tampoco podía subir e inventar una excusa para sacarlo de la pieza de la pelirroja.

-Hey, Junjie, ¿Por qué estás tan nervioso?-preguntó el trol, mirando cada movimiento del chico. Una idea cruzó por su cabeza, pero tenía que comprobarla, para ver si acertaba.

-¿Yo?-levantó su cabeza de golpe-No, yo solo estoy atento a lo que pasa en la película-balbuceó. De su frente caían pequeñas gotas de sudor y el que se sentara vulgarmente en el sillón, aumentaban las sospechas del trol.

-Ah-se limitó a decir. Pensó unos instantes y lo miró fijamente-Y...¿Qué crees que pasará con el protagonista?-cuestionó, observando atentamente como pasaba una de sus manos por su cabello y se rascaba la nuca.

-Yo...-Junjie miró en todas direcciones buscando una forma de evadir su pregunta, ya que no estaba prestando atención a la película, solo miraba la puerta de la pieza de la chica y miles de sentimientos de incomodidad lo inundaban al pensar en los dos haciendo algo que no era de su agrado-Creo que él se quedará con la chica-respondió, asintiendo para darle más veracidad a su respuesta.

Kord asintió al mismo tiempo que él y sobó su barbilla con uno de sus dedos.

-Yo también-suspiró y se acomodó en su asiento para continuar viendo la película. Su teoría había sido acertada, la película no trataba de romance, ni menos estaba relacionada con un ella o un él, sino que eran hombres brutos rodeados de músculos que manejaban mecabestias.

No le molestaba que él sintiera algo por Trixie. No. La cuestión, es que él sabía que ella no sentía lo mismo y que estaba detrás de el heroico líder de la banda, por lo que presentía que a futuro podría pasar algún problema y que tal vez la banda se separe por tontos sentimientos.

-Ya está dormida-susurró Eli para si mismo. La miró unos instantes, dándose cuenta de que ella era realmente muy bonita y atractiva. Nunca se había quedado a contemplar a su amiga, ya que cada día, cada hora, cada segundo, estaba destinado a proteger y salvar a Bajoterra. Pasó una mano por su rojizo cabello y la dirigió a su mano, la que reposaba en su pecho. Con cuidado la alzó y se levantó sigilosamente de la cama, para no despertarla.

-Eli-musitó la chica, mientras tomaba su polera y lo hacía regresarse a la cama. Una gran sonrisa apareció en su rostro al notar que Trixie estaba soñando con él. Vaya, para él se sentía tan bien al saber que alguien pensaba en él y que hasta lo recordaba en sus sueños. Si giró y acarició la mano de la joven para soltarla, por más que quisiera quedarse con ella, tenía que resolver asuntos más importantes.

Apenas ella dejó caer su mano en las sábanas, Eli se apresuró a alejarse de la cama y a abrir la puerta, para luego cerrarla lentamente.

-Muy bien, tenemos que hablar-ordenó caminando por el segundo nivel y mirando a sus compañeros por el balcón. Burpy lo esperaba en la puerta de la habitación de la ojiverde, por lo que al salir, se subió a su hombro y esperó a que hablara. Los tres integrantes lo miraron alerta, ya que el tono que uso fue muy autoritario- No sé si ustedes lo percibieron, pero Trix está actuando raro...