Saboreando el infierno ©

Capitulo 35

Dylan me cogia de la mano mientras bajábamos. Nos despedimos de la familia White con abrazos y besos. Miraba todo el rato a Dylan que el lucia feliz y despreocupado.
Me llevo hasta su casa y empezamos a dormir.

Me levanto al dia siguiente por el ruido que hay en otra habitación.
Voy al baño y me doy una ducha fria.
Me miro en el espejo y parezco otra persona.
Tengo las mejillas rojas pero lo que más me llama la atención es que ya no hay signos de ojeras!

Voy hasta la cocina y veo a Dylan preparando el desayuno.

-Buenos dias!- le digo animada.

-Buenos dias, dormilona.- me da un casto beso en los labios.

-Que vamos a hacer hoy?- le pregunto entusiasmada.

-Alguien se ha levantado contenta!- me dice con asombro.
-Que te parece escalada?- me pregunta sonriendo.

-Me encantaria.- le digo con sarcasmo.

Desayunamos el delicioso desayuno que Dylan ha preparado y mientras el se ducha yo me visto.
Vamos hacia el coche e ir para casa a cambiarme.

No hay nadie en casa, cosa que doy gracias porque he venido con Dylan.
Subo corriendo a mi habitación y me pongo unos pantalones cortos con un jersei de manga corta azul.

Bajo y abrazo a Dylan por sorpresa. Él simplemente me mira arqueando las cejas y sonriendo.
Volvemos a entrar en su coche.

-Donde vamos?- le pregunto feliz.

No sé por que pero hoy me siento con ganas de comerme el mundo.

-Es una sorpresa.- me dice Dylan sonriendo.

El viaje es precioso y a la vez largo. Siempre me ha gustado ir con coche a sitios lejanos. Me relaja mirar por la ventana el paisaje.

Por fin llegamos a lo que seria un conjunto de montañas no muy altas.
Dylan sale del coche y me abre la puerta.

Caminamos unos cuantos quilometros en dirección a la cima de la montaña más cercana.

-Vamos a escalar de verdad?- le pregunto confusa.

-Algo mucho mejor.- me dice entusiasmado.

Seguimos escalando y caminando en vertical y es agotador.
Por fin llegamos a lo que seria nuestro destino y no me lo creo. No puede ser eso! Por favor que no sea eso...

-Taran!- dice Dylan feliz pero yo me quiero morir.

-Dylan... Que es esto?- consigo decir.

-Vamos a hacer puenting!- me dice animado.

No puedo hablar. Tengo un nudo en la garganta. Acaban de saltar una pareja y los están desatando. Por lo que parece nosotros somos los siguientes.

-Estás bien?- me pregunta Dylan.

-Creo que no.- le digo sentandome en una roca sobresaliente.

Nunca he tenido miedo a las alturas pero und cosa muy diferente es dejar que tu cuerpo caiga por un precipicio.

-Yo voy a saltar y espero que sea detrás tuyo.- Dylan me coje de las manos.
-Hay una sorpresa abajo para ti.- me dice besandome en la mejilla.

-La muerte?- me moriré si lo hago.

-No... Algo que te gustará.- rie Dylan.

Me levanto y voy hacia los hombres que se encargan de esto. Diós mio voy a hacerlo.
No estoy preparada para morir, pero si hoy tiene que ser el dia, que lo sea.