-Santana! ¿Qué mierda llevas aquí? ¿Llevas un muerto? No sabía que eras necrofilica.
Reí ante el comentario de Quinn y me subí al coche mientras ella seguía quejándose por el peso de mis maletas. Entró al coche y arrancó. Estuvimos unos cinco minutos escuchando música, ella conducía mientras yo miraba por la ventana.
-Crees que habrá muchas novatas? Quiero hacer bromas.
-¿Como la que me hiciste a mi?
-Santana no te conocía y teníamos doce años....no seas rencorosa.
Suspire y la miré sonriendo.
-Tienes razón, cinco años después ya no es una broma.
-Exacto.- Sonrió mirando la carretera.- Te apetece....
-Cantar?.- Antes de que reaccionara, encendí la radio y comenzó a sonar Pillow talk de Zayn Malik y ambas cantamos al unísono.
Llevabamos como unas treinta canciones y ya empecé a quejarme.
-¿Queda mucho?.
-Duerme, cuándo lleguemos te despertaré.
Suspire y cerré los ojos....
-Santana hemos llegado, levanta.
Abrí los ojos y me levanté medio dormida, cogimos la maleta y le cogi la mano a Quinn, si hubiese ido sola me hubiese perdido. Así que yo iba detrás de ella mientras tiraba de mí hasta que llegamos a un mostrador.
-Hola, disculpe. ¿Podría darnos la llave de la habitación de Santana López y Quinn Fabray?.
La señora era pelirroja, de unos treinta y pocos, era muy simpática y se llamaba Emma o al menos eso decía su placa. ¿Quién coño usa placa en un campamento?
-Claro, aquí tenéis. Pasadlo bien chicas.
Nos dio las llaves y dijimos gracias.
Llegamos a nuestra cabaña, era muy grande con tres puertas. Dos habitaciones y un baño. También había unos sofas y un mueble con bebidas y una tele muy grande. Entramos a nuestra habitación, dos camas, dos escritorios, una televisión y dos armarios. Ella empezó a deshacer las maletas y yo me tumbe en la cama....
-Santana vamos, son solo las dos. Vamos a dar una vuelta y luego comeremos. Y tal vez podemos ir al lago.
Levanté la cabeza y la miré sonriendo.
-Dijiste lago?.
-Ajam.
Me levante de inmediato y la besé, ella agarró mi cintura y yo llevé mis manos a su cuello acercandola más. Cuándo nos quedamos sin aire ella juntó nuestras frentes.
-Entonces te gusta la idea?.
-Sí, veremos las novatas. Vámonos.
Ella rió y salimos de ese lugar. Paseamos por el campus y vimos las demás cabañas. Ese año había muchas chicas nuevas.
Después de almorzar, fuimos a la habitancion. Entre besos nos pusimos los bikinis y en menos de quince minutos estábamos bañandonos tranquilamente.
Cerré los ojos y al abrirlos no vi a mí rubia por ningún lado lo cuál me preocupó.
-Quinn? ¡Quinn! Joder! Que susto!.- Ella me había levantado desde el agua mientras reía. Al verme la cara se acercó a besarme y me escupio agua.- ¡Eres una guarra!
Tuvimos una pelea de agua, la cuál ninguna ganó ya que fue interrumpida por una chica muy bajita, nariz grande y morena. Iba acompañada de otra chica más alta, rubia y de ojos azules, la misma que día antes me saludó por la calle. Ellas nos sonrieron y la gnomo habló.
-¿Podemos bañarnos con vosotras?.
Miré a Quinn suplicante pero ella no me miró y sonrió.
-Claro que sí. ¿Cómo se llaman?.
-Rachel Berry y esta es mi amiga Brittany S.Pierce.
Y con eso el gnomo y la rubia entraron al lago. Yo les miraba con cara de pocos amigos. Rahiel se puso al lado de Quinn....muy cerca y no paraba de reír, le echaba todo su aliento a MI Quinn. Aparte de las muchas insinuaciones que se le escapaban a la enana. Ya no aguantaba más. Salí del agua y me puse la toalla por encima, y me dirigí a la cabaña.
-¡Santana! ¿A dónde vas?.
-No quiero hablar aquí Quinn.- Hablé tajante así que ella solo me seguía en silencio. Al llegar tiré la toalla al suelo y la miré de mala forma.
-¿Que a donde coño voy? !En serio Quinn!? Acaso no viste cómo te miraba, cómo se acercaba?.
-Santana qué dices? Solo quería ser amable.
La tiré a la cama y me puse encima de ella, sin pensarlo besé su cuello.
-De quién eres Quinn? Dilo.
-Tuya Santana, solo tuya.
Despues de un rato me tumbe a su lado y la abracé... Supongo que solo quería que toda esa inseguridad se fuese.
