Narra Louis.
No podía creer lo que estaba escuchando, mi hermana una niña de 15 años hablando de tener relaciones sexuales a tan corta ropa con un chico mayor que ella.
- Pero yo, lo deseo, quiero estar con él.
- Pues lo seguirás deseando señorita, espero que ya te hayas despedido del chico porque estas castigada y no volverás a salir de la casa por un largo período de tiempo por desobedecer las órdenes de nuestro padre y querer hacer cosas que no son propias de tu edad – fue lo que conseguí decir antes de tomar a mi hermana de su brazo izquierdo y jalarla hasta mi coche.
- Espera por favor Louis déjame explicarlo, no es lo que tú crees – decía mi hermana entre sollozos.
- Ahhh ¿No? Entonces explícame que fue lo que según tu escuche – estaba muy alterado.
- Este... Emm, bueno, no sé por dónde empezar - se notaba en nerviosismo en su tono de voz.
- Pues desde el principio creo yo – traba de calmarme para que así ella también pudiera calmarse y pudiera explicarme lo sucedido.
- Bueno, este a Austin, así se llama, a él lo conocí hace dos años atrás por Facebook, era muy bueno conmigo, muy divertido y me escuchaba cuando tenía problemas, el me aconsejaba y estaba ahí cuando tu no estabas.
- Y ¿Que tiene que ver eso conmigo? – estaba un poco sorprendido por la confesión que me estaba haciendo mi hermana en ese momento.
- Tiene mucho que ver Louis – dijo mirándome de forma lastimera – él estuvo allí conmigo cuando tu no estabas, cuando fuiste tú el que me prometió nunca dejarme, que siempre estarías a mi lado, que nunca nos harías lo que nuestros padres nos han hecho y lo primero que hiciste al irte a Londres fue olvidarnos – unas cuantas lagrimas se escurrían por la mejilla de mi hermana al hacerme aquella confesión que me habían dejado tan sorprendido, me apresure a secar aquellas lágrimas con una caricia, me causaba tanto dolor verla llorar y más si fue por mi culpa.
- Lo siento mucho – fue lo único que alcance a decir antes de abrazarme a ella y llorar sobre sus hombros – lo siento muchísimo nuca fue esa mi intención – decía mientras la abrazaba más fuerte a mí.
- No te preocupes, ya paso – el tono de voz tan frío que utilizó desconcertó.
- Claro que no, Linda y tú son las personas que más amo, nunca más me volveré a alejarme de su lado, fue por ustedes que decidí volver aquí – me apresure a decir.
- ¿Lo prometes? Prometes que no te volverás a alejar de nuestro lado, que nunca nos abandonaras – esa pequeña mueca de tristeza en sus labios y ojitos me estaban mantando por dentro, con esa mirada con una pequeña luz de esperanza que me observaban hacían que se me ablandara el corazón y me hacía sentir esa paz interior que hace mucho ya no sentía.
- Claro que sí, lo prometo – esas fueron palabras suficientes para que ella se abalanzara sobre mí y me diera otro abrazo y llenara la cara de pequeños besitos – pero esto de Austin no va quedarse así – decía mientras me separaba de ella, pude notar como inmediatamente se volvió a tensar en mis brazos.
- Por favor Louis, no me separes de él, lo quiero mucho, y sé que él me quiere a mí – decía mientras agachaba la mirada.
- No lo sé Liliana, tengo que conocerlo primero, saber quiénes son sus padres, si es un buen chico – me incomodaba bastante el saber que mi hermana ya tenía novio.
- Eso ¿Es un quizás?-
- Quizá –
- Ahhhhh!!! – el grito de Liliana se escuchó por toda la casa de la familia Stefano, y por el barrio quizá también se haya oído – eres el mejor hermano de todos, te amo – salto de nuevo a mis abrazos.
- Ok, alguien me puede explicar que fue esa escena que armaron al salir de la casa de los Stefano – decía linda mientras se adentraba en la parte trasera del auto – ¿Se olvidaron de mí? A caso, ¿Tenían planeado dejarme aquí? – decía mientras nos miraba de manera acusadora.
- ¿Qué? Claro que no teníamos planeado dejarte Linda, deja de ser una dramática, solo vinimos a hablar aquí con Louis de algo muy importante y que no podía esperar – se excusó Liliana.
- Claro que no teníamos planeado abandonarte aquí, y la próxima vez que volvamos pediremos disculpas por nuestro comportamiento a la familia Stefano, ahora ¿Nos vamos? – Tenía que cambiar de tema antes que Linda siguiera con sus preguntas.
- ¿A dónde vamos? – pregunto Linda
- A casa, no es obvio – respondió de mala manera Liliana.
- No – la interrumpí iremos al parque por un helado, luego al centro comercial y al cine – dictamine.
- Las dos solo asintieron en silencio – los tres necesitábamos una tarde juntos recordando viejos tiempos.
Toda la tarde nos la pasamos entre risas y bromas con las gemelas, fuimos al parque por unos helados y pegamos una vuelta para platicar de nosotros y que había sido de nuestras vidas luego de que me fui a Londres, más tarde fuimos al centro comercial y las acompañe a que se compraran algunos vestidos y demás cosas, también me obligaron a comprar ropa para mí, cosa a la que yo me negué por que no creía necesario ya que tenía bastante, pero ellas terminaron convenciéndome y haciéndome comprar algunas prendas y un par de zapatos. Fuimos al cine a ver una película de comedia y luego fuimos a casa.
Al llegar a casa y ayudar a las gemelas a subir todas sus compras me dispuse a ir a mi habitación y cargar el móvil ya que me había quedado sin batería, al encender el móvil cual grande fue mi sorpresa al encontrar 18 llamadas perdidas de Nick, en la mañana lo llamaría ya que era bastante tarde y seguro ya estaría durmiendo
- O mejor voy a verlo en la mañana y así platicamos bien – dije en voz alta, además tenía ganas de verlo y saber cómo estaba.
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¿Será Amor? (Gay)
Teen FictionNick Stefano pide como de deseo de cumpleaños número 16 enamorarse, lo que el nunca imaginó es que terminaría enamorado de otro hombre y que este sería muchos años mayor que él.