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-Podemos ir por un helado. O podemos ir a hecharle gasolina a la escuela y prenderle fuego.- dijo mi amiga.

-Jaja ojalá se pudiera hacer eso.- reí.

-Pues bueno, tengo tres horas antes de que me busquen. Así que anda, ¿qué hacemos?-

-¿Traes dinero?- pregunto.

Coral frunce el seño.

-Sólo traigo como diez dólares. ¿porqué?- pregunta.

-Podemos ir a comprar dulces, papas y un pote de nutella. Agh, ¡ese rico placer de la vida!-

-Oye tranquila. Que te puede dar un orgasmo por un simple chocolate.- rió.

-¿Qué? ¿Un simple chocolate dices? ¿Estás bromeando verdad? ¡No puede ser que sea amiga de un ser tan despreciable!- grité.

Coral se tapa la boca para no reír duro.

-¡Estas loca!- dijo entre risas.

Amo a mi mejor amiga.

Pero no lo hago si se mete con mi preciada nutella.

**

-Bueno, está la película de Bajo La misma estrella, Alicia en el país de las Maravillas, Shrek y... ¿los pitufos?-

-Oye, son muy hermosos.-.me defendí.

-Que niña eres.- niega en forma de tragedia. -Veamos al papasito de Augustus. Así podremos llenarnos de porquerías y llorar.- Coral sonríe de una manera exagerada.

-Me parece genial.- reí.

**

-¿PORQUÉ HACES ESTO AUGUSTUS? NADIE NORMAL QUIERE ESCUCHAR LO QUE SU NOVIA LE DIRÁ EN SU FUNERAL.- grité a moco tendido.

-A mi me gustaría.- Dice Coral con la boca llena.

- Eres una enferma.- seco mis lágrimas.

-Si lo vez desde mi punto de vista, es romántico.- contesta mi amiga.

-No es romántico... Es cruel, muy cruel.- sollozo. Mientras Coral ríe.

-Elisa, ven un momento por favor.- me llama Brent.

Que querrá éste ahora. Miro a Coral y ella asiente. Limpio mi cara y me levanto para ir hacia el cuarto de Brent.

-Dime que es lo que...- me quedo callada.

Al lado de mi hermano se encuentra Patrick sentado.

-Ya hablé con Patrick y según el fue un mal entendido. Le pedí disculpas y el las aceptó. Piesno que pueden hablar como personas grandes y arreglar sus cosas.- no sé porqué, pero lo escuché mal. Como sino le agradara la idea.

Sin importar que... Corrí hacia mi novio y lo abracé. Él contestó mi abrazo.

-Tranquila pequeña.- inhaló mi aroma.

Sonreí para mis adentros. Pienso que ahora puedo estar completa.

***

Ya era de noche. Coral y Patrick se habían marchado. Me siento feliz. Mi novio es como un amigo para mi y eso es bueno. Sé que lo quiero y lo aprenderé amar. Llamen me loca, pero no sé que me ocurre que siento que al estar con Patrick... Conozco a la perfección a Brent. Aveces me asusta, pero debe ser porque es mi hermano.

Entré a mi habitación y busqué mi pijama. Cuando Coral se fue me di una ducha para despedir a Patrick con bien olor. Río. Así que comencé a desvestirme y a buscar mis cremas para la piel.

-Oh Dios, n-no, no sabía que... Que estabas vistiendote.- tartamudeó mi hermano.

Di un gran salto y me tapé con las sábanas.

-No es nada, pasa.- sentí mis mejillas arder. ¿porque me ocurre esto últimamente?

-Es que... Sólo quería saber si estabas bien.- se sentó a mi lado.

-Sí, lo estoy.-me limité a contestar.

Hubo un silencio por largos segundos. Hasta que Brent se acercó a mi. Sentí mi corazón latir muy fuerte.

Besó mi frente por largos segundos y yo cerré mis ojos por impulso. Solté las sábanas y lo abracé. Sentí su cuerpo temblar.

-Vistete. Ya es tarde.- me dio una tierna sonrisa y se marchó.

¿Qué rayos fue eso?

¿Porqué me dio un beso en la frente si jamás había pasado?

Y la mayor pregunta...

¿Porqué sentí esto?

Eres mi hermanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora