Shanks en Foosha

Capitulo 2: Visitemos el Hogar de Yassop

Había transcurrido un par de semanas desde la decisión de Shanks de tomar su ¨año sabático¨ por los Blues, peleando con prácticamente toda la tripulación, aun mas con Benn, se llevo a la decisión que pasaría solo serian tres meses por cada Blue antes de que volviesen al Nuevo Mundo. El primer Blue que visitarían seria el East Blue, uno de los mares mas débiles a la opinión popular, por insistencia de Yassop que prácticamente brillaba desde que se entero de la noticia del viaje por los Blues.

Habían llegado hace un par de horas a la isla de Yassop, pero no podía ir toda la tripulación, la mayoría ayudaría a subir las nuevas provisiones que Benn compraria en el puerto luego de que hiciesen una lista lo que faltase en el barco, por lo que se llego al acuerdo de que Yassop iria a saludar a su hermosa esposa e hijo con su capitán.

Yassop habia subido a la casa que construyo para Banchina y para él luego de que se casasen buscando a su esposa e hijo pero no habia signo de ninguno de ellos, las camas estaban hechas, los platos escurriendo en el lavado recién lavados, habia habido actividad pero no se encontraba ninguno de los dos en casa, Yassop miro a su capitán por un momento.

-Habrá ido con su padre?

El pelirrojo sonrió antes de palmear la espalda de su francotirador.

-Dahahaha eso me suena que iras a ver a tu suegro

Yassop palideció ante la mención de su suegro, recuerdos oscuros lo asaltaron, desde que conoció a Banchina el hombre se había empeñado en hacerle la vida cuadritos, no le dejo salir con Banchina hasta que probo que no quería jugar con su hija pero ni aun así le dejo en paz, no es que odiase al viejo simplemente preferia mantener su cabeza sobre su cuello. El francotirador del Red Force miro nuevamente a su capitán que había dejado de riese pero aun mantenía esa sonrisa boba en su cara.

-Capitán estoy enamorado de mi esposa y me muero por ver a mi hijo pero no soy suicida, ese viejo loco casi me mata la ultima vez que lo vi.

Al pelirrojo le divertía el miedo que había en los ojos de Yassop, no todos los días veías a uno de los piratas mas fuertes temblando y empalideciendo por la mención de su suegro.

-Bah, no puede haber sido tan malo.

Yassop miro a su capitán como si hubiese dicho que vio a Doflamingo con tutu tomando el te con Garp, una imagen de por si bizarra.

-Me lanzo un hacha, capitán. Una puñetera hacha.

Shanks no pudo reprimir sus carcajadas al imaginarse a un Yassop mas joven corriendo por su vida.

-Dahahah ay no dahahaha

Yassop ya se estaba arrepintiendo de haberle contado de su miedo a su suegro, lo mas seguro es que ahora le molestase con ello hasta que encuentre otro medio de diversión, al verlo caer y golpear el piso sin dejar de contener las carcajadas le dio la razón a sus pensamientos.

-Mejor iré a preguntar por el pueblo

Yassop no había dado ni dos pasos cuando sintió una mano en su hombro.

-Dahahah venga te acompaño, quiero conocer a tu mocoso y a esa esposa tuya de los que tanto hablas.

El francotirador sonrió, su capitán era como un niño en ocasiones pero era la persona que mas podía llegar a respetar y le seria un honor que conociese a su esposa e hijo.

-Capitán...Te conté de la vez que le propuse matrimonio? Fue un miércoles...

Shanks se arrepentía de haberse ofrecido, esta seria la trigésimo novena vez que le contaba sobre su propuesta de matrimonio.