Te quise de una manera extraña,
de esa manera en la cual sabía
que vos jamás me querrías
y aún así me lancé en la incertidumbre de hacerte poesía.
Sería una falta de respeto
decir que alguna vez logré
plasmarte en arte,
porque vos no eras arte y yo no era una artista,
eras tan ordinario que siempre solía aterrarme el hecho de enamorarme de alguien como vos.
Con esa alegría en cada fibra de tu ser,
a tu lado siempre me sentía pequeña y opaca.
Porque una estrella no es nada en comparación a un planeta entero,
si mi luz se extinguía, y a ti todos los astronautas querían llegar.
Te quise de esa manera extraña,
en la cual nunca te lo dije,
porque no necesitaba pasar meses preguntándome si había sido lo correcto.
Te quise de esa manera en la cual pocas personas lo hacen, pero que vos jamás necesitaste,
porque nunca necesitaste que yo estuviera a tu lado.
Y ahora que estas lejos, sigo añorando el día en el que al fin diga que ya no eres nadie para mí y que 'te quise' esté empleado de la manera correcta (porque debo admitir que a veces fallo en los tiempos verbales).
