10 Years

the apology & the flight

Calum miro la hora en su reloj, su vuelo a Los Angeles salía en aproximadamente veinte minutos, pero en cambio de estar realizando sus últimos trámites para salir, estaba esperando a que Gabe comprará una bebida en Starbucks; le estaba dando buen uso a esa tarjeta de regalo.

-Gabe, tengo que hacer el chequeo y tú me estás haciendo perder mi tiempo.- le reclamo al muchacho que se acercó a él con una bebida en mano y su tarjeta en la otra.

-Oh, deja de pretender que quieres ir.- rodó sus ojos y se apresuró a seguir a Calum hasta la sala de su aerolínea.

De coincidencia pasaron frente a una Librería dentro del Aeropuerto y el libro de Calum era lo que estaba siendo anunciado con un gran rotulo que decía: Escritor #1 del New York Time Bestsellers. Estaba en todas partes de Nueva York y Calum se sentía un poco asustado al ver su propia cara y su libro.

-Ja, ¡yo hice que eso sucediera!- hablo Gabe, señalando la publicidad del libro.

-No nos vamos a tomar una foto con eso.- murmuro Calum, arrastrando a su amigo para que siguiera caminando -Creo que lo hemos hecho diez veces ya.- agrego y Gabe rió sabiendo que tenía razón.

-Debes de admitir que esta genial.-

Y aunque Calum tratara de aparentar serio sabía que era lo mejor que le había pasado.

Milagrosamente Calum logro hacer todo su proceso con cinco minutos de sobra, cinco minutos que Gabe uso para darle un pequeño sermón a Calum. Las palabras del publicitario siempre eran las mejores, persuasivo y directo al grano. Si Calum ocupaba una dosis de la realidad solo debía de llamarlo.

-Sé qué probablemente no estás del todo animado por este viaje pero una semana de total relajación no te hará daño, luego embarcamos la gira del libro por tres meses y lo que más desearas tener es un momento como este.-

-Ok, Gabe.- respondió Calum asintiendo como un niño regañado.

-Y sobre todo, si la ves, no enloquezcas.- dijo Gabe con un tono completamente serio, colocando sus manos en los hombros del muchacho, envidiaba que él era más alto.

Esto Calum se lo tomo más en serio que cualquier otra cosa. Si había algo qué se había memorizado era que si llegaba a verla tan si quiera, tenía que actuar como el adulto que era, o que pretendía ser.

En serio, Calum casi lloraba al pensar que tenía veintisiete y no dieciocho; la mejor edad que pudo tener.

-Cuídate, hermano.- dijo Gabe al darle un abrazo de despedida a su amigo porque escucharon como estaban llamándolo para abordar -Y si miras a Mitch dile que es un idiota.- Calum rió a esto pero igual asintió.

Se despidió de su amigo una vez antes de abordar el avión que lo haría llegar a Los Angeles, donde se encontraría con la mayoría de sus ex-compañeros de Secundaria para poder abordar el avión que los llevaría a Hawaii por una semana entera.

Y Calum todavía no sabía si estaba preparado para eso.

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El vuelo fue silencioso. Dado a que Calum viajo en Clase Ejecutiva y no Económica, normalmente viajaba ahí, pero ocupaba relajarse antes de enfrentar a sus viejos conocidos. Y lo que menos ocupaba era escuchar a niños llorar y sus padres no poder controlarlos.

Algo genial de ser un escritor best seller era que la gente te reconocía, al menos la gente que leía, y a Calum le gustaba que se le acercaran con una copia de su libro y pidieran un autógrafo. Le recordaba un poco a como era el de adolescente e iba a firmas de sus libros favoritos.