06. cuando el hambre da una mordida

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Rita despertó de golpe, pudo haber gritado, de no ser porque le faltaba aire para hacerlo. Era una sensación muy familiar, pero que no había experimentado en años, 5 para ser exactos. Sentía claramente como sus vías respiratorias se inflamaban poco a poco, ella estaba teniendo un ataque de Asma.

Llevo sus manos a su cuello, la desesperación por tratar de respirar era agonizante, rápidamente se dirigió a su habitación y busco en los cajones de su escritorio de dibujo, después de sacar cientos de papeles en blanco, plumas, lápices y marcadores, finalmente encontró su inhalador, lo agito y lo disparo dentro de su boca. Poco a poco la sensación de inflamación comenzó a desaparecer.

Habían pasado 5 años desde la última vez que lo uso, ella quería deshacerse de él, pero su madre insistió en que lo conservara ya que podía volverlo a necesitar... y tenía toda la razón.

Le agradeció a su madre mentalmente y después coloco el inhalador dentro del cajón, estuvo a punto de cerrarlo pero vio algo que le llamo la atención de inmediato, un pequeño anillo metálico dorado, el anillo que había conseguido la noche anterior. Lo observo por un par de segundos y tuvo la extraña necesidad de ponérselo, se lo llevo a su dedo índice y estuvo a punto de deslizarlo dentro del anillo, pero la interrumpió la voz de Gatomon.

"¿te encuentras bien?" le pregunto.

Rita guardo el anillo en el bolso de su chaqueta, volteo y dijo "sí, estoy bien"

"tu... tu nariz está sangrando". Rita rápidamente llevo su mano a su nariz y efectivamente, estaba sangrando. No era algo de qué preocuparse, un par de gotas máximo.

"no te preocupes, me pasa a con frecuencia" mintió. Busco un poco de papel higiénico y se limpió la sangre de la nariz.

Escucho el rugir de su estómago, y después el de Gatomon.

"¿tienes hambre?" le pregunto Rita. Gatomon asintió. "también yo, ven conmigo". Después se dirigieron a la cocina. Rita busco algo en el refrigerador, encontró un trozo de carne lo suficientemente grande para las dos. Encendió la estufa, coloco la carne en una sartén con algo de aceite y espero a que se cociera.

"¿ustedes tienen sueños?" le pregunto Rita a su compañera.

"claro que si"

"¿y... como son?"

"bueno... es como si viéramos imágenes de otros lugares, no de fantasía, sino reales. Literalmente vemos lo que sucede en otras partes del mundo, ya sea pasado, presente y futuro.

"nosotros llamamos a eso clarividencia" Rita le dio vuelta a la carne en el sartén e hizo otra pregunta

"sé que no recuerdas muchas cosas, pero... ¿te parece familiar la palabra Millenium?

"si, no recuerdo exactamente, pero lo escuche antes"

<<Así que es real>> pensó

Rita apago la estufa, tomo dos platos, partió la carne en dos y coloco un pedazo en cada uno. "toma" le dijo a Gatomon mientras le acercaba el plato. Gatomon olio la carne, hizo un extraño gesto y le dio una gran mordida. Después de unos minutos la comida de ambos platos había desaparecido, Rita se lavó las manos, miro a Gatomon y le dijo "sabes... quiero mostrarte algo"

"¿Qué?"

"mi lugar favorito en esta casa"

Centro de la ciudad, 8:40 p.m.

Rei caminaba por la avenida principal, la noche anterior había recibido grandes daños, el puente peatonal estaba hecho trisas y la calle tenia pequeños cráteres. La noche anterior había ocurrido un acontecimiento que ella estuvo esperando por cuatro años: la aparición de un Digimon salvaje. Pero para cuando ella llego a la escena, todo se encontraba vacío, el Digimon desapareció y supuso que la chica que había conocido en la tarde lo había hecho. Cruzo la calle para llegar a una florería, entro y en cuanto lo hizo el dueño la reconoció de inmediato.

Digimon Tamers: Millennium. Parte: IDonde viven las historias. Descúbrelo ahora