Su música era más fuerte que de costumbre, opacando así las conversaciones de las personas en el autobús.
Estudió la música, escuchando el bajo y el ritmo de los tambores más que las letras.
Ella prefería las bandas de rock independiente más que la música artificial hecha hoy en día.
Estaba inmersa en la música hasta que un golpecito en su hombro la sacó de sus pensamientos.
Se volvió lentamente para ser recibida con unos ojos marrones con pestañas oscuras.
Era él.
Le hizo un gesto a su auricular y sonrió ligeramente.
Ella sutilmente lo colocó en sus manos y le miró atentamente mientras él colocaba en su oído aquella pieza que producía sonidos celestiales.
Ambos se sentaron en aquel asiento, escuchando su elección extraña en la música.
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Viajes en el autobús
Short StoryÉl sólo se sienta allí, en el asiento 30. Ella sólo se sienta allí, en el asiento 31. "Una casualidad llena de intención."