Pasión en peligro.

Capítulo N°1

Olivia iba en su coche camino al trabajo, eran las 19:00am.

Antes de llegar a la unidad decidió parar en una cafetería y comprar algo para tomar, a pesar que durmió más de ocho horas aun se sentía cansada, ser detective no era nada fácil. Cuando subió a su coche de nuevo; recibió un mensaje de texto de Amanda, iba manejando cuando de repente sintió un golpe en el coche.

-¡Maldición!- dijo sin saber lo que había ocurrido.

Estaba un poco paralizada, pero bajó rapidamente del coche y al mirar al suelo se encontró con una chica, no podía calcular su edad pero se veía joven.- Dios, ¿estas bien?- preguntó llegando a su altura.

-Me duele. - fué todo lo que dijo y se desmayo unos segundos después.

Tenía sangre en la ropa que había caído de su rostro. Olivia estaba atemorizada, decidió subirla al coche y llevarla al hospital más cercano. Cuando llegaron un médico la examinó mientras Liv esperaba en unos de los pasillos, su celular sonó.

-Buen día Rollins.- dijo al contestar.

-Buen día Capitán, la estamos esperando.

-Lo se Rollins, lo sé. Llegaré un poco tarde hoy.

-¿Ocurre algo?- preguntó Amanda al escuchar el tono angustiado de Olivia.

-No te preocupes, estoy bien. Es solo un inconveniente que espero pueda resolver pronto.- murmuró Olivia mientras se le revolvía el estómago al recordar el momento.

-Muy bien, pero recuerda que puedes contar con nosotros para lo que necesites.

-Lo se, gracias. Mantenme al tanto de todo por favor, confío en ustedes.

-Así será, adiós Liv.

La conversación se terminó y aún el médico no le daba noticias.

Estaba desesperada así que decidió preguntar en recepción, pero luego recordó que no sabia su nombre o absolutamente nada de ella. Para tranquilizarse un poco; decidió ir por un té a la cafetería, cuando regresó encontró al médico que estaba atendiendo a la mujer.

-Doctor, por favor. Dígame ¿cómo está?

-No muy bien, tiene una fuerte contusión en la cabeza producto del impacto que recibió al momento de la caída, le hemos suministrado algunos calmantes para que el dolor disminuyera, además tiene el brazo izquierdo lesionado, tendrá que tener mucho reposo.-  explicó el médico a Olivia.

-No puede ser.- dijo Liv sentándose en una de las sillas que estaban a su lado. -¿Que he hecho?

-¿Cree usted que se recuperara rápido?- preguntó de nuevo angustiada.

-En efecto, se recuperará. Pero no será tan rápido.

-¿Puedo pasar a verla?

-¿Es usted algún familiar de la paciente?

-No, de hecho no la conozco. Ha sido un accidente, no tengo idea como se llama.- murmuró Olivia con un poco de vergüenza.

-Comprendo, en otro caso no la hubiera podido dejar ver a la paciente, pero dadas las circunstancias supongo que es esencial que esa chica esté al tanto de lo ocurrido. Su habitación es la N°14, subiendo las escaleras.

-Muchas gracias.- dijo Olivia al borde de la desesperación.

Liv tomó cinco minutos para respirar profundo y tranquilizarse, subió las escaleras y entró a la habitación donde se encontraba aquella mujer, estaba allí parada a un lado de ella, viéndola inconsciente y pensando ¿como pudo pasar algo así?

-Lo siento mucho, no sabes cuánto lo siento. -Olivia se lamentó mientras una lágrima rodaba por su mejilla.

Cuando salio de la habitación buscó al médico.

-Me tengo que retirar, pero vendré en la tarde para saber como sigue.- expresó cuando lo encontró.

-Claro que si, antes de irse ¿podría dejar sus datos en recepción? es solo en caso que ocurra alguna emergencia.

-Claro que si, no hay ningún problema.

Olivia dejó sus datos en recepción y salió de ese lugar con un nudo en la garganta.