Capitulo 1

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CAPITULO 1: Galletas con chispa de un nuevo enemigo

8 años.

Mamá se arreglaba para ir al teatro con mi padre, llevaba un vestido liso de seda rosa y un sombrero con plumas que yo utilizaba para disfrazarme de indio nativo cuando Jane, Daniella y Jesy venian a jugar a casa. Si mamá se enterara de eso, era niña muerta.

Nos dijo que se irian en cuanto la nueva niñera llegara. La anterior fue una anciana de cabello gris que no hacia mas que apretarme las mejillas cuando rompia cosas o desobedecia ordenes.

Acostumbraba a comportarme mal y a ser muy entrometida, la niñera no soportaba mi manera de ser.

Cuando ella vivia aqui, en una habitacion al lado de las nuestras por si se nos antojaba algo por las noches, era insoportable. Controlaba cada minuto de nuestras vidas, hasta que un dia murió.

Papá nos dijo que ella se fue a hacer un viaje para visitar a unas hadas que vivían en Escocia. Lucie se lo creyó y le escribio una carta que mamá prometio enviarsela. Emily y yo sabiamos la verdad, la mujer ya habia pasado a la otra vida y por lo que escuche hablar a las cocineras, fue de un ataque cardiaco. Como era demaciado pequeña para medir la gravedad de una muerte, solo me alegre de no tener que soportarla mas. Era mas parecida a una bruja que a una amiga de las hadas.

Comenzó a caer una suave lluvia que hacia que un dulzón olor a tierra y flores se mezclara y entrara por las ventadas. Las sirvientas la cerraron para que no se mojaran los marcos y porque mamá se volvio loca al pensar en la humedad y en lo esponjoso que se pondria su cabello.

Cuando ella subio carriendo las escaleras para darse un retoque de último minuto, sono el timbre retumbando por toda la casa. Carl, el "mayordomo", se apresuro con su paso de pingüino a abrir la puerta. Un viento se coló hacia adentro e hizo que estornudara, nos habian vestido para la ocasion con unos espantosos vestidos de tul lila a todas iguales, nos formamos en fila por orden de estatura y nos quedamos quietas cuando la nueva niñera entró.

Era joven, me relaje en cuanto le vi el rostro. A su lado iba un niño de cabello negro y parecia ser mas grande que Emily, era alto y vestia un pantalon jeans y una chaqueta mojada por la lluvia. Supuse que seria su hijo, no me gusto la idea de vinieran otros niños a vivir a mi casa.

- ¿Aqui es? - pregunto el chico, masticando chicle. La niñera asintío y nos sonrío con amabilidad.

Lucie no se resistio y le dio la mano, era una niña bastante encantadora que se encariñaba rápido con las personas. La niñera la levanto y la abrazo como si fuera su hija, tal vez no era tan mala como la ansiana.

- Tú debes ser Lucie, me han cantado mucho sobre ti - le dijo ella. Lucie abri mucho los ojos sin caber en la felicidad, se llevarian muy bien.

- ¿Quien es ese niño? - pregunto de repente mi hermana. Apuntaba detras de la niñera y la impaciencia hizo que se revolviera entre los brazos de ella. La niñera la dejo en el suelo y se movio unos centimetros para dejar al descucrimiento a un niño de mediana estatura con el cabella liso,con las mejillas rojas y los ojos hinchados.

Habia estado llorando y se notaba a kilómetros.

- Es mi hijo, Piero. El espera ser tu amigo - le respondió ella. Lucie se acerco al niño y lo abrazo, pero el la empujo e hizo que cayera al suelo.

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