1980
Liam dejó de reír, Ricker palideció y Sarah sonrió, mientras una señora, de elegante figura, con el cabello rubio platino recogido en un impecable moño, labios rojos como el infierno, rubor rosa suave resaltando sus pómulos, mirada oculta tras unos lentes de sol y luciendo un vestido negro como la noche. Ricker pensó que si las reinas de los cuentos existieran, se verían igual de impresionantes que esa mujer.
-¿Qué pasa querida? - dijo la mujer con tono meloso, pero de alguna forma, no era dulce, era forzado y hacía que Ricker se sintiera incómodo.
- Mami, estos niños feos me están molestando
Pese a que a veces Ricker tenía momentos de rebeldía adolescente o de inteligencia adulta, era un niño y sentía como tal -sin mencionar que todavía buscaba la aprobación de los adultos que lo rodeaban- por lo que en cuanto esas palabras salieron de la boca de Sarah, Ricker se sintió aterrado.
Pero como a veces, muy rara vez, el destino decide portarse gentilmente con la existencia humana.
Cindy vio a la elegante mujer aproximarse a su hijo y a su ahijada, presintió problemas, por lo que decidió acercarse.
-¿Hay algún problema?
-Si, al parecer estos niños están molestando a mi pequeña- dijo en un tono obviamente indignado
-Yo no veo que estén haciendo tal cosa.
La madre de Sarah funció el ceño, haciendo que toda su perfecta cara se arrugara,Cindy podía sentir la mirada de odio desde detrás de los lentes de sol de la mujer. Sabía que trataba de intimidarla. No le importó.
-Exijo que se les expulse del local por atosigar a la dulce y adorable niña que es mi hija.
Por un momento Ricker casi estalló en risas, luego recordó que su situación era seria, que lo estaban regañando, y se calmó.
-Perdone, pero estos niños son mis hijos-dijo Cindy con voz firme, sin ningún miedo por la elegancia o el dinero de esa mujer-Si usted o su pequeña tienen algún problema con ellos, tendrá que hablar conmigo primero.
Liam se sintió orgulloso de su madre y deseó que Grace algún día pudiese sentirse así; sin embargo, Sarah se sintió impresionada, luego una sonrisa diabólica se formó en su cara de muñeca.
-¿Usted es la madre de Grace?- dijo con su voz de inocente criatura de Dios que no mataría a una mosca. Ricker deseó poder golpearla.
Cindy la miro detenidamente, esa niña encajaba con la descripción que su hijo le había dado, esa niña era la bravucona de sus hijos y su ahijada.
Ahora era personal. Primero se encargaría de la madre, así sus niños sabrían como hacer frente a esa engreída niña.
Pero antes de que pudiera darles tan preciosa lección, la otra madre habló
-No me sorprende que con semejante madre los niños hayan salido así de perturbados, problemáticos y desarreglados
La madre de Cindy era una italiana por lo tanto le había enseñado que el honor familiar se protege con uñas y dientes. Además, Cindy amaba la película "El Padrino"
Aunque lo que hizo no fue honorable.
Sin ningún duda levantó su mano derecha y la impactó con fuerza contra la cara maquillada de esa mujer.
Las consecuencias de sus actos fueron igual que la bofetada que acaba de propinarle a esa mujer.
-CINDY, ESTAS DESPEDIDA
-¡¿COMO SE ATREVE?! LA VERÉ EN LA CORTE
E igual de rápido que una bofetada, la vida de Cindy se derrumbó
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(S)HE
Ficção Adolescente- Compórtate Rhiannon - Me llamo Ricker - le recuerdo, se que me llama así para molestarme y vaya que lo logra. - Aceptalo maldita sea, tienes tetas y vagina, eres una chica - se por su tono de voz que se está conteniendo, que no quiere gritarme en...
