El último aliento del Colosal

10 0 0
                                    

El barco se inclinaba más rápido cada vez. Debía tener una inclinación de 50 grados. Entonces Julian notó un golpe fuerte en la cara que le hizo sangrar la nariz.

-Ayyyyyyy. ¿Quién ha sido el miserable?-Julian miró a su alrededor y vio a Jim y a Danny-.¡¿Que no os ha quedado claro lo de antes?!

-Lo siento Julian pero me parece que quedamos que este sitio era el mío.¡Yo quiero ser el último de tocar el agua! ¡no quiero morir congelado!-dijo Danny con furia.

-¡Yo he llegado primero y el sitio es mío!-dijo Julian. Entonces comenzaron a pelearse y a la vez se sujetaban a la valla como podían. Steve se miraba la escena horrorizado.Julian y Danny se pegaban puñetazos y se insultaban. Cuando Jim iba a ayudar a su amigo Julian agarró a Danny por la camiseta y con una fuerza tremenda lo tiró por la valla. Danny cayó al vacío y cuando tocó el agua salpicó mucho y no volvió a salir a la superfície.

-Dios mío, pero que he hecho-dijo Julian blanco como el papel-.De veras que no quería. Steve, ¿crees que habrá sobrevivido?

-Ehhh-murmuró Steve con los ojos como platos-.Teniendo en cuenta que el barco se ha inclinado y ahora hay mucha altura...Creo que es impossible que haya sobrevivido.¡Ha tenido una caída de por lo menos 60 metros!

De pronto el barco se inclinó mucho más rápido hasta alcanzar los 90 grados. El Colosal estaba vertical completamente sobre el mar. Steve y Julian se agarraron a la valla y aguantaron.

-¿Esteve esperamos a que el barco se hunda completamente o cuando falten unos 10 metros saltamos?-preguntó Julian a su amigo.

-Yo creo-Steve hizo una pausa-.Creo que deberíamos saltar cuanto falten más o menos sí, unos 10 metros para que nos de tiempo a alejarnos del barco lo máximo posible porque si no la fuerza de succión nos arrastrará a bastante profundidad.

Entonces el Colosal empezó a hundirse verticalmente pero con la proa arriba del todo y las luces aún encendidas. Cuando faltaban unos diez metros para que el barco desapareciese bajo el mar, Julian y Steve saltaron al agua. La caída a Julian se le hizo muy larga y cuando llegó al agua casi se quedó en shock debido a las frías temperaturas del mar. Intentó salir a la superficie pero la fuerza del barco era muy grande y cada vez lo arrastraba más mar adentro.

El Colosal se hundió definitivamente y Julian poco a poco podía nadar más hacia la superfície. Cuando llegó miró abajo y vio las luces del Colosal que se iban alejando hacia las profundidades entonces parpadearon y se apagaron.

MS ColosalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora