El silencio es agradable, pero no para todo el mundo.
El silencio encierra muchos secretos;
Una situación incómoda, un llanto, un momento de reflexión, una muerte...
La gente teme el silencio, pero a la vez lo busca. Se sienten tranquilos, serenos. A gusto.
Lo que no saben es que el silencio no siempre es sinónimo de tranquilidad.
Una vez conocí a una chica, no recuerdo su nombre, solo que comenzaba por «S»
Pero recuerdo perfectamente su aspecto físico.
Bajita, delgada, pelo casi tan negro como la oscuridad de la noche, labios finos pero rosados, ojos azules como el mar, y piel blanca como las alas de una paloma.
Esa chica tenía algo especial. Por eso me interesé tanto en ella.
FlashbackEstaba con la furgoneta estacionada en frente de la cafetería Orlando's. Iba a tomarme un té con miel, odio el café. Cuando de repente las puertas del instituto que están enfrente de la cafetería se abren bruscamente, y sale una chica de apenas unos 19 años.
Es raro ver a estas horas alguien en el instituto dadas las doce de la noche, por eso decido seguirla.
La chica se mete en un supermercado cercano y la cajera la saluda sonriente, y después a mi al entrar. Ay que recuerdos de mi cajera favorita...
La chica se dirige a la zona de golosinas y coge un paquete de chicles, después va a la zona de alimentos y coge un bote de pimienta, en spray. Y por último va a la zona de perfumes y coge uno que no consigue ver. Interesante.
Como si me hubiese oído la chica se gira y me mira por un segundo, después coge sus cosas y va a la caja.Tengo que darme prisa para poder alcanzarla, la maldita es rápida.
Cuando salgo veo que se monta en una moto y se va a toda velocidad. Cuando está apunto de desaparecer de mi vista me subo rápidamente a la furgoneta que está un poco más lejos y acelero.
He conducido un cuarto de hora hasta que por fin veo la moto de la chica aparcada en la acera. Aparco cerca como puedo y miro el sitio donde la chica se ha podido meter.
Leo el cartel y me quedo asombrado:
«New Coyote Girls»
¿Un bar de stripers? Vaya, no me lo esperaba. Me ajusto la chaqueta y entro.
Nada más entrar puedo ver a chicas ligeras de ropa sirviendo copas a unos hombres ya borrachos
Llego a una sala que debe de ser la principal. Ahí tres chicas bailan en la barra en el escenario mientras los hombres les gritan cosas obscenas.
Otros les hacen peticiones que ellas muy a gusto aceptan siempre y cuando paguen.
-¿Quieres tomar algo cariño?
Me giro y veo a una chica rubia con dos coletas y unos ojos grandes marrones mirándome sonriente.
-Emm...una Coca Cola.
La chica me mira extrañada, pero sonríe y asiente despareciendo entre la multitud.
De repente las luces se bajan, y anuncian a una chica. Salomé.
Y ahí está ella. Mi chica mala.
No creo que ese sea su nombre verdadero, será un apodo para que no la reconozcan. Está increíble.
Comienza a pasear alrededor de la barra y yo opto por sentarme. No se está nada mal aquí.
En algunos momentos veo que ella mira a mi dirección y me sonríe o guiña un ojo. Me vuelve loco.Cuando el espectáculo terminó todos pedían un bis pero ella nos lanzó un beso a todos seguido de un guiño pícaro y se fue.
En ese momento vi pasar a Ruth. Ruth es el nombre de la camarera de las dos coletas rubias, cuando me trajo antes la Coca Cola me dijo su nombre, y su teléfono...Teléfono que guardé rápidamente.-Eh Ruth
-Dime cielo,¿Quieres algo más de beber?
-No,no. Pero quiero saber si podría hablar con Salomé.
-Lo siento cariño pero esto no ed un prostíbulo, si quieres hacer algo aquí n...
-No me mal interpretes preciosa. Sólo quiero hablar con ella.
-Bueno, si quieres puedo decirle de que a la salida te espere. Y así habláis.
-¿Lo harías? Me harías un gran favor
-Claro que sí. Eres el primer hombre que viene a este bar sin gritarnos gilipolleces. Que estemos vestidas así no nos quita ningún derecho.El tiempo se paso demasiado lento. No veía la hora de que cerrarán, necesitaba verla. Deseaba verla.
Por fin comienzan a cerrar y la gente se va yendo, yo me voy a la puerta de atrás como me dijo Ruth.
Y allí está ella. Lleva unos pantalones vaqueros oscuros y una camisa rosa de encaje.Me ve llegar y apaga el cigarrillo que estaba fumando.
-Tú eres el que quería hablar conmigo,¿No?
-Sí
-Bueno, pues aquí me tienes. Habla
-Aquí estás. Tú, Salomé.
-No me llamo Salomé.
-¿Y cómo entonces?
-No te interesa. Es privado, cosas del negocio.
-Ya,¿Porqué te metiste a esto?
-Fácil, dinero. Necesitaba dinero y una amiga me recomendó trabajar aquí. Empecé como camarera, pero luego me subieron a la barra. Y soy de las mejores.
-Y tanto que eres de las mejores preciosa. No solo eso, eres la mejor.
-¿Ah sí?
-Sí. Eres una chica demasiado sexy, demasiado provocativa, demasiado ardiente. Tenías a todos fascinados. Me tienes fascinado, esas caderas, esas curvas, esa piel, esos pechos, ese culo, esos labios, ese pelo...eres perfectamente deseable.
-.....em, no sé que decir, gracias supon...
-Sh...no digas nada.
Me acerco a la chica y tiro su bolso al suelo, recuerdo que compró el Spray de pimienta.
Salomé intenta darme un golpe en la cara pero en esas le cojo la mano y la pongo contra la pared, hago lo mismo con su otra mano.
Empiezo a besarle el cuello y morderle el lóbulo de la oreja. Eso les vuelve locas, y en efecto, entre medio de gritos de auxilio he podido escuchar un pequeño y casi inexistente gemido de placer. Pero lo ha sentido.
Sigue gritando y como siga así alarmara a alguien.
-Sh...silencio. Silencio Salomé, o te contaré la cabeza(*)
En ese momento con mi otra mano le bajo la camisa y empiezo a tocarle los pechos e introduzco mi lengua en su boca para que deje de chillar.
[...]
El mejor polvo de mi puta vida. Sí, la he violado, pero joder ha sido su culpa. Iba provocando.
Me giro y la veo tirada en el suelo llorando, tiene la ropa desgarrada, el maquillaje corrido y el pelo despeinado.
Da asco verla, ya no es la Salomé de la que quedé fascinado. Es una prostituta barata y quejica.
Me acerco a ella y le cojo de la barbilla subiéndosela para que me mire a los ojos.
Ella al principio no lo hace, pero cuando empiezo a apretar me mira con lágrimas en los ojos.
-Escúchame putita,esto no se lo vas a decir a nadie,¿Vale? Será un secreto entre tú y yo cielo.
Me mira y me escupe en la cara, yo la suelto y le pego un puñetazo. Ella se levanta llorando y empieza a correr pidiendo ayuda. Yo la alcanzo rápidamente y le pego una patada en la columna vertebral haciéndola caer de boca. Ella se queda en el suelo llorando, yo la giro y empiezo a pegarle patadas en la boca del estómago. Salomé ya no llora, pero tose sangre, no se que es mejor.
La agarro de los pelos y la llevo hacia atrás donde estamos menos a la vista.
La cojo por el cuello y le digo
-¿Dirás algo?
-S...sí. Irás...a la, la cárcel. Maldito enfermo.
¿¿Enfermo?? NO ESTOY ENFERMO. Todos con la misma gilipollez, ¿¡Que sabrán ellos!? Los enfermos son ellos. YO SOLO QUIERO SER FELÍZ.
La miro con odio y empiezo a apretar los dedos alrededor de su cuello y a levantarla en el aire haciendo que las puntas de sus pies rocen el suelo. Ella cada vez tiene la cara más colorada, y apenas gesticula. Me da golpes en las manos e intenta apartármelas, pero a medida que pasa el tiempo estos golpes van siendo más débiles hasta que deja de dármelos, hasta que deja de tener expresividad en la cara, hasta que deja de respirar. Hasta que deja de vivir.
La suelto y cae bruscamente al suelo. Puedo ver como sus ojos azules como el mar se van apagando, están abiertos de par en par, asustados pero sin sentimiento. Sin vida.
En su cuello se puede ver que ha sido ahorcada.
Me hace gracia el hecho de que se llame Salomé.
Así que con la navaja de bolsillo que tengo le hago un gran corte en el cuello.
Me giro sonriente y salgo de ahí. Ha sido una de las mejores noches la verdad.
Me monto en la furgoneta y salgo de el lugar del crimen.
En el camino no hay ruidos, es demasiado temprano aún. El silencio reina en la oscuridad. Pueden pasar muchas cosas a lo largo del día, en este mismo instante en el que lees estas lineas una chica puede estar siendo violada por mi, o asesinada/o. ¿Quién sabe? Puede incluso que cuando lo leas yo esté muerto.
Habrá llantos, gritos, amenazas, sufrimiento...pero siempre pasará lo mismo al final.
Y luego silencio.------------------
(*)Salomé: es un personaje Bíblico. Es una bailarina muy famosa que baila delante de un rey y este para agradecerle sus servicios le dice que pida lo que ella quiera que se le concederá. Y ella pide la cabeza de Juan Bautista en una bandeja de plata.