Obsesión. [En Edición]

Capítulo 23: Secretos Revelados.

Te busque hasta por debajo de las piedras pero no te encontré. Otra vez la desesperación me invadía.

¿Qué hago?

***

No estaba seguro de lo que hacia, ni siquiera podía pensar con claridad, pero, a pesar de todo él es su hermano. Él tomara la decisión de ayudarme a buscar o no a Misaki. Yo cumpliré con darle la noticia. Lo demás esta en sus manos.

Tome un largo suspiro y con la mano temblorosa acerque mi dedo índice al timbre.

...Dos, tres, cuatro segundos y el hombre que deseaba ver apareció. Takahiro.

-Usagi... Entra. -su mano me jalo y en un movimiento rápido ingrese al apartamento.

¿Pero qué...?

No había tiempo que perder y antes de que se arrepintiera por haberme dejado entrar comencé a hablar.

-Por favor Takahiro, solo escuchame. -él asintió con la cabeza lo cual se me hizo extraño.

¿Por qué tanta amabilidad de su parte?, ¿Qué no estaba enojado?

-Takahiro... -A punto de que las lágrimas aparecieran le solté la noticia. -Alguien, secuestro a Misaki... Alguien, entró al departamento mientras yo no estaba y creo saber quien fue.

Aún no terminaba de contar todo y Takahiro tenia los ojos rojos, quizá por ¿Lágrimas que intentaba reprimir? Con voz temblorosa empezó a hablar.

—Dime algo Usagi... Su nombre es ¿Ijuuin...?

Mis ojos se abrieron de par en par y vi como las lágrimas rodaban por las mejillas de Takahiro.

—Si lo es ¿Verdad? -volvió a preguntar.

—Pero... ¿Cómo? –fue lo único que atine a decir.

—Es tan simple porque... Yo lo sé todo. Ese desgraciado me lo dijo como si nada y, por si no fuera poco me amenazó con hacerle daño, más del que le habia causado. –hizo una pequeña pausa para limpiar sus lágrimas. —Dejame explicarte todo desde el principio mientras buscamos a mi hermanito ¿Si?

Salimos de su casa y nos dirigimos a mi auto. Aún no acababa de digerir lo que había dicho.

Él... ¿Sabia todo? Pero entonces ¿Por qué dijo todas esas cosas a Misaki? No entiendo nada.

Arranque el coche y maneje lo mas despacio que pude, estando al pendiente de los alrededores por si veía a Misaki.

Takahiro comenzó a hablar.

—Te explicare todo, al cabo ya no tengo nada que perder porque lo que yo mas cuidaba ya se ha perdido. -sonrio, o más bien se forzó a sonreír porque su mirada era triste.

Gire a verlo un momento.

—Te escucho. –y devolví la vista a la carretera.

—Veras Usagi, una tarde cuando volvía del trabajo, un automóvil; negro se acerco a mi. Yo seguí caminando, en ese momento no me di cuenta de que me estaba siguiendo hasta que oí que me llamaban.

***

-Disculpe, ¿usted es Takahashi Takahiro?