El novio de mi hermana {YOONSEOK}

9.

Las cosas con Minah estaban solucionadas en un noventa por ciento, el problema aún estaba en su relación con esa chica, Amber. Primero debo conocerla para saber si lo que hacen es bueno para ambas o si sólo beneficia a mi pequeña hermana...

-Hyung, deberíamos ir al cine a ver el nuevo estreno -comentó Jimin pinchando mi brazo, lo miré de soslayó y suspiré.

-¿Cuándo? -pregunté mordiendo mi labio inferior cuando noté aquel brillo en sus ojos.

-¡Mañana! -definitivamente perdí mis tímpanos.

-¿A qué hora? -relamió sus labios pensando, mientras yo ponía mi atención en la pantalla de mi celular que brillaba con un nuevo mensaje. Era de Hoseok.

-Mh... no lo sé, ¿qué hora te parece bien a ti? -desvié mi vista del celular unos segundos y alcé mis hombros- ¡Hyung!

-Bien... ¿Qué tal a las...?

-¿Las...?

-¿Las ocho? -titubeé, él sonrió abiertamente y asintió con fuerza.

-Entonces a las ocho pasaré por ti, y comeremos palomitas y veremos esa película... y... y... -quise reírme, parecía un niño pequeño. Pero me dolía al mismo tiempo, ¿esto formaría parte de crearle esperanzas? ¿Debería mejor no ir?

-Sí, Jiminnie, haremos todo lo que quieras -sonreí de medio lado-, de todas formas te lo debo -revolví su cabello, notando un pequeño sonrojo en sus mejillas. Suspiré y volví mi atención al celular, disponiéndome a leer aquel mensaje.

"Hyung, mañana habrá un nuevo estreno en el cine, ¿quieres ir? ¡Sería nuestra segunda cita!"

¿Me están jodiendo? Puta madre, no puede estar pasándome a mí.

Tecleé rápidamente y presioné enviar antes de arrepentirme.

"Lo siento, Cara de caballo. Mañana saldré con Jimin, ¿Te parece si hacemos una cita el fin de semana?"

-¿Con quién hablas, hyung? -escuché preguntar a Jimin con voz curiosa, bloqueé la pantalla de mi celular y lo miré haciendo una mueca.

-No es nadie -me encogí de hombros, ¿pero por qué no le dije que hablaba con Hoseok? ¿Es para no herirlo? Sí, es por eso.

-Bien -sonrió tiernamente y se echó sobre la mesa- ¿me prestas tu cuaderno de matemáticas? -me giré hasta mi mochila y saqué el cuaderno de tapa azul, para entregárselo a Jimin- Gracias, hyung -asentí y revisé mi celular.

"Bien, no hay problema. Espero con esmero el fin de semana. Te quiero"

Una sonrisa se escapó en las comisuras de mis labios, di un vistazo a mi costado para ver a Jimin concentrado en anotar algo, suspiré y comencé a teclear.

"También te quiero"

Llegué a casa y Minah ya se encontraba ahí. Me recibió con una sonrisa, la cual se fue desvaneciendo de a poco.

-¿Sucede algo malo? -pregunté con cierto temor recorriendo mis venas.

-Odio esto, oppa

-¿Qué cosa?

-Que tengas razón... -su voz se rompió un poco, y acaricié su cabello con cuidado.

-¿En qué he tenido razón esta vez? -oí un sollozo, el cual decidí ignorar, envolviendo el pequeño cuerpo de Minah en mis brazos.

-Oppa...

-¿Qué es?

-Ella... oppa, ella... -comenzó a llorar contra mi pecho y algo dentro de mí se rompió, la presioné más contra mí y seguí acariciando su cabello.

-¿Qué hizo ella? -pregunté suavemente, ella negó con la cabeza y supe que debía callar.

Nos pasamos toda la tarde abrazados, comimos en silencio y dormimos juntos. A la mañana siguiente le avisé sobre mi salida con Jimin y que no hiciese estupideces más tarde. Salimos de casa, ella comía una manzana de manera desganada y se despidió de mí con un simple choque de puños. Suspiré frustrado por todo y entré a la universidad.

-Creí que no llegarías -bromeó Seokjin, lo miré con mi hermosa mirada de odio infinito- ups, alguien se levantó pisando con el pie izquierdo... otra vez -sonrió cuando arrugué mi entrecejo y solté un improperio entre dientes.

-Esa no es la forma apropiada de hablar, hyung -me regañó Jimin, sentándose cómodamente sobre la mesa y meciendo sus pies.

-¿Qué tienen en mi contra? -consulté echándome sobre la silla y dejando mi mochila en el suelo.

-Tenemos todo a tu favor, sólo nos da gusto que seas así de amargado, nos das más material para molestar -comentó Seokjin cruzándose de brazos, rodé los ojos y me desparramé sobre la mesa soltando un largo suspiro.

-¿A pasado algo? -Jimin apoyó su mano sobre mi hombro, el muy desgraciado siempre notaba cuando algo sucedía.

-Sólo predije algo, ese algo sucedió, y no me gusta que haya sucedido -fue la explicación del año, lo sé. Con mucho swag.

Las clases pasaron, me fui a casa, elegí una tenida cómoda y Jimin tocó a mi puerta. Salimos camino al cine y compramos los boletos, la verdad hace mucho que no venía a un cine y lo veía con tantos cambios que me mareaba.

-¿Dónde nos sentamos, hyung? -susurró cerca de mi oído.

-Al fondo estará bien -Jimin asintió y subimos las escaleras hasta los últimos asientos, llegando justo cuando los cortometrajes llegaron a su fin.

La película dio inicio y nosotros ya habíamos consumido la mitad del bote de palomitas, nos reímos de aquello, para luego darle nuestra atención total a la gran pantalla, o por lo menos yo. Pronto sentí unos dedos jugando sobre mi mano, y una mano envolviendo la mía. Mi corazón latía con fuerza, esto definitivamente no podía sucederme a mí.

Me giré hacia Jimin y este me observaba desde cerca. Muy cerca.