Hola mi valiente lector has sobrevivido a mis compañeros que vagan por los vientos helados de una tormenta, a la oscuridad, anda y ten miedo de lo que no sabes, de lo puede haber entre sus tinieblas, si has sentido que la sensación de hormigueo sube desde los pies y al final lo sientes el el cuello, que tu cuerpo esta quieto, inerte y por mas que deseas levantarte y salir corriendo de ahí, que por más que deseas mover los labios y dejar salir un grito de auxilio no puedes y el pánico se apodera de tu mente, felicidades mis camaradas se apoderaron de tu cuerpo y la tierra lo reclama para que te coman los gusanos.
Ahora sientes lo que mi existencia es, y no me vengas con lastima por que no las necesito, en fin continuemos con mis relatos de sangre, mis tormentosos recuerdos ¡oh maldita vida espectral! vagos recuerdos infrahumanos, y me vuelvo a hundir en la melancolía de mi mente. Me encontraba en mi baile ceremonial mientras salpicaba las paredes de sangre, creo recordar esa sensación de humedad en mi piel, hacia que las cabezas decapitadas tuvieran una expresión de pánico ante la muerte, gloriosa muerte que abraza, muerte violenta.
Mis hermosas manos estaban bañadas en sangre, sentía las gotas de aquel liquido caer por mis dedos dejando manchas en mi andar, en cuando termine con mis invitados, cuando la muerte los beso y se los llevo al infierno, me encontraba con el corazón acelerado, la euforia me recorría las venas, me detuve mientras me acerque en a mi padre, el ultimo con vida en esta habitación, yo ya había muerto, mi pureza se esfumo junto con la vida de todos los presentes, miraba a ese hombre con desprecio, de el había heredado mis deseos oscuros, cuantas veces lo escuche jadear de placer con mis compañeras brujas, patético ser llevado al placer de la lujuria.
Irais se acerco de nuevo, me tomo por la espalda, sus manos eran tibias, tal vez era por el calor que desprendía mi cuerpo, sus manos, su voz al oído era y es lo que más me provoca, sus dedos jugaban con los cordones negros y húmedos de mi vestido, y sentí su mirada fiera que se colocaba en esa figura viva, agonizante, el hombre muerto en vida, mi padre, aun recuerdo como el brillo de sus ojos se perdía en esa noche carmesí, cuando solo se escuchan los sonidos nocturnos.
Mi dulce amante, se deshacía de mis ropas sucias, acariciaba mi piel dejando marcar rojas por la sangre que me cubría, mientras Andru, serio miraba la escena, se colocaba detrás de mi padre, sus dedos largos eran cubiertos por el cabello canoso de ese hombre, soltó un grito ahogado de dolor mientras yo ma me encontraba con el pecho desnudo y mi amada me besaba el cuello, disfrutaba de la sangre seca de mi piel, -anda y corta el cuello a ese humano, anda y vuélvete nuestra amante-, las palabras suaves de ella a mi oído.
Tome de nuevo la daga de ese charco de sangre, la empuñe con delicadeza, camine lento hacia ese cuerpo vivo, sonreía con el rostro de un ángel, a pesar de estar medio desnuda ante el, me hinque ante mi padre, le bese como se me enseño a hacerlo, en esas mejillas humedad, sentí el sabor saldo del ese liquido mezclado con su sudor, y le corte el cuello de manera lenta, tratando de que cada tejido de su piel se abriera lento, hasta que el liquido comenzó a fluir, que magnifico aroma, el sabor me hizo agua la boca, y no lo dude, abrace el cuerpo de mi padre, me cubrí de el y mis labios se pegaron a esa viscosa sustancia.
Sentía como ese cuerpo se enfriaba, como se esfumaba la vida de ese ser, lamí hasta quedar saciada, hasta que todo en mi fuera sangre y muerte, arroje ese cuerpo inerte y me recosté en el suelo, mirando el techo, dejando que mi cuerpo adsorbiera cada sensación, me volví un demonio como mis amantes, mis señores.
![](https://img.wattpad.com/cover/65001003-288-k169520.jpg)
ESTÁS LEYENDO
RELATÓ DE UNA ALMA
TerrorHe aquí mi inicio en el mundo de las letras, después de tanto tiempo entre sombras y tinieblas, esperó no chocar con las tintas amargas y ser guiada por las palabras, que bien destruyen peor que un arma o alivian el alma. Hola mi nombre es Beatriz...