Smile 17

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El amor. Menuda palabra ¿verdad? Es totalmente interesante como una palabra como esa pueda no tener significado especifico. Porque ¿Qué es el amor? Estamos de acuerdo con que es un sentimiento, si, pero un sentimiento puede ser una canción, de esas las cuales no puedes dejar de escuchar sin importar que tipo de sensación te transmita. El amor puede ser un poema sin importar de que tipo, puede ser una estación de tren o el invierno mismo. Aún así, el amor no tiene significado especifico.

Estábamos en clase de historia cuando se me ocurrió aquello y sin yo proponerme lo ya no estaba en clase de historia,ni en el aula ni junto a Matt. Ahora me encontraba en una de las tantas tardes de horas incontables en la biblioteca, con un libro en mi regazo y sintiendo la caricia de Darren en mi cabello. Recordé la larga carretera que nos llevaría a un campo para a acampar, la música de Darren resonaba, melodías pegajosas, pensé. Árboles frondosos y a lo lejos, a pesar del precipitado ruido del auto y la música pude percibir el ruido de un río escandaloso.

!No. No! !Despierta¡ 

Me obligué a escuchar al profesor, me obligué a no recordar como se sentía aquel sentimiento sin significado, me obligué a recordarme que mi corazón a pesar de haber superado muchas cosas aún era frágil. Y lo frágil poca vez se arregla.

No..no otra vez..

Sonó el timbre y me obligue a dejar de pensar en esas cosas, salí y fui a la cafetería a encontrarme con Emma pero como no la vi me senté en una mesa junto a las ventanas y mi mente se fue a lo del anónimo, faltaba poco para las pruebas finales y por ende para la fiesta de pre-graduación.¿Qué clase de chico seria? Y porque sabe tanto sobre mi? 

-!Sam!-Oí que alguien gritaba mi nombre, llamando la atención de algunos sin vida propia, me giré y vi a Adam con la cara totalmente pálida y corriendo hacia mi.-Emma.....ella..

Mi corazón nunca latió tan fuerte.

-...Está en el hospital.

Lo mire incrédula ante aquello, mi corazón latía y mi mente tenia demasiado para pensar. Me levanté rápidamente y vi que Adam me miraba con el ceño fruncido pero luego comprendió, fui corriendo a mi salón ya que el profesor aún estaba ahí y comencé a guardar todo.

-¿Que haces?-Pregunto el profesor. Le expliqué abrupta mente todo y sabía que me metería en problemas por salir sin permiso pero me importaba muy poco, Adam fue a su salón y hizo lo mismo, corrimos hacia la salida y me subí al auto de Adam. 

-¿Que ocurrió?-Le pregunte bastante asustada,recordé cuando Emma intentó quitarse la vida porque su hermano se suicidó. 

-Venía al instituto y al cruzar un imbécil la atropello.-Sus nudillos estaban blancos y las venas de su antebrazo se notaban fácilmente. Ese....estaba drogado, maldición, si ella...

Si dijo algo mas no lo oí, me recosté en la ventanilla, ¿estaría bien? quería golpear algo, ella..no podía irse así, ella no podía irse de ninguna manera. Porque si ella se iba, no sabría que hacer.Llegamos al hospital y reprimí aquel sentimiento de deja vu, un doctor nos llevo a la habitación de Emma entramos rápido y vimos una enfermera joven saliendo con la cabeza baja. Vimos a Emma con un yeso en su brazo, cuando nos vio sonrío como nunca.

-Ah....no puede ser  Sam saliendo de clases, que bueno de que esté viva!-Dijo alegremente, el doctor se acercó a nosotros.

-El sedante aún le está haciendo efecto..-Dijo ante nuestros rostros desconcertados.-Ella está bien, se fracturó su brazo y tuvo un fuerte golpe en cabeza pero no es nada grave, le daremos el alta mañana.

El doctor se marchó y cuando giramos hacia Emma notamos que estaba dormida. Adam se sentó en un sofá junto a ella y yo me senté aún lado en la cama.

Oí un suspiro de alivio de Adam. Y no pude detener unas pequeñas lagrimas.

-Si ella....-Comenzó, todo en el temblaba.-Ella esta bien....

Asentí, mi corazón seguía latiendo demasiado rápido necesitaba alejarme de ahí.

-Traeré café.-Adam asintió y susurró un gracias.

Salí de la habitación y fui al baño, pronto estuve dentro y moje mi cara varias veces, al mirar el espejo noté mis ojos un poco rojos, unas pequeñas lagrimas salieron sin yo poder evitarlo, desde que ellos habían muerto no podía ir a un hospital sin sentir miedo y el mero echo de perder a Emma se me antojaba destrozador, negué con la cabeza y intenté sonreírme a mi misma.

-Ella esta bien...no de hay de que preocuparse.-Susurré para mi misma, volví a lavar mi rostro y luego fui a la cafetería. Al ir a la habitación de Emma me encontré a Adam sentado en las sillas de espera fuere de la habitación.

-Toma..-Le di el café y estuvimos un largo rato en silencio, luego mi móvil sonó y noté que era mi madre, deje salir un suspiro.

-¿Si?-Intente sonar lo menos nerviosa que se podía pero sabía que iba tener problemas.

-Me llamaron del instituto, dijeron que te escapaste.-Dijo abrupta mente.-¿Que ocurrió?

-Emma está en el hospital, lo siento, yo....

-Esta bien?-Por un momento olvidé que ella sabía lo importante que era Emma para mi.

-Si..no es grave..quizá me quede aquí ¿bien?-La llamada acabó y vi a Adam más tranquilo.

-Puedes ir a casa.-Comenzó.-Yo me quedare.

-También me quedaré-Vi como sus ojos transmitían algo, noté como Adam amaba a Emma y no pude evitar sonreír.

-La quieres ¿verdad?-Me miró unos segundos, y luego apartó la vista como un niño que acaba de ser descubierto al robar unos dulces.

-Ella aún no lo sabe..pero se lo diré ¿sabes? Si a ella le pasa algo yo..-Paso sus manos por su cabello y bebió mas café.

*3 horas mas tarde*

-Ah...¿siguen aquí?-Dijo Emma cuando se nos permitió entrar.-Deberían ir a descansar, yo estoy bien.

-¿Bien? ¿Bien? Tu...me has echo salir  del instituto sin permiso..-Comencé intentando no reírme pero inevitable y ella se rió conmigo, me acerque y le di un abrazo , vi como Adam se mostraba incomodo así que me separé.

-En serio..vayan a casa, mañana me vienen a buscar, me llevan a casa y hacen mi tarea pendiente.- Adam y yo nos miramos y comenzamos a reírnos mas relajados.

-Está bien.-Accedió Adam y me miro, yo asentí. Me iría primero para dejar que ellos hablasen solos.

-Entonces, me iré bonita, ten más cuidado porque la próxima me mataras a mi.-Dije dándole un abrazo asfixiante y me marche al cerrar la puerta sin proponerme lo oí.

-Emma..yo..-Hubo una pausa que me pareció eterna y debí haberme ido pero bueno, me quedé-Te amo.

Sonreí y me marche a casa. Un sol abrazador se mostró amigable y me olvidé por completo de aquellos malos ratos.

El arte de un suspiroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora