Never Mind ↝Suga bts

여덟 {008}

Lin Ri

Como cada día me arrastré a la puerta del colegio.

Bueno, tal vez "arrastré " no es la mejor palabra... Digamos que era un zombie con mayores ojeras que Zi Tao.

- ¡Matemáticas! - gritó alguien antes de estamparse contra mi y tirarme al suelo.

- ¡¿PERO QUÉ... - Estaba a punto de gritar hasta que vi a Dahee encima mía.

- ¡Mi primera clase es matemáticas! - me gritó ella en la cara.

Necesité un par de segundos antes de reaccionar.

Matemáticas... Espera. Yo también tenía esa clase

Solté un chillido - ¡Yo también! - Dahee de unió a mis gritos. Sí, eramos exageradas pero llevábamos días sin estar en la misma clase.

Fue horrible aguantar todo eso sola. Además Dahee era la única a la que podía considerar mi amiga, ya que el resto de chicas me miraban mal porque a mi sus siete amores sí que me hacían caso.

- ¡Vámonos, vámonos! - Dahee tiró de mi y me hizo correr con ella a la clase.
Pude ver como la gente cerca de nosotras nos miraba raro por los chillidos que acabábamos de pegar. Divisé unas cabelleras verde y rosadas entre la multitud y ahí sí que eché a correr.

Llegamos de entre las primeras a clase. Habían dos chicas sentadas en sus mesas y conversando y en la otra punta estaba Jae sacando los libros de su mochila.

- ¡Jae! - Dahee le llamó mientras se acercaba a él.

- Genial, pensé que iba a estar sólo - dijo aliviado.

- Al fin estamos todos juntos - sonrió Dahee mientras nos rodeaba a ambos con sus brazos

- Falta Young K - noté.

- A él le toca matemáticas en otra clase - me aclaró Jae.

- Bueno. Lo importante es que estamos los tres y nos podemos sentar juntos.

Miré rápido a Jae, quien creo que había notado lo mismo que yo.

- Dahee... - empezó a hablar él

- ¿Sí? - preguntó con una sonrisa en la cara.

- Es un pupitre de dos - le dije y al instante se paralizó.

Los alumnos iban entrando y nosotros sólo intentábamos que Dahee reaccionara de nuevo.

- Hagamos una piedra papel tijera por quienes se sientan juntos - dijo volviendo en si.

Me acerqué a ella y levanté mi puño lista para jugar. Dahee lo colocó junto al mío y alzó la vista esperando a Jae.

- No, no. Yo ya me he sentado aquí, este sitio es mío.

- Vale, entonces jugaremos por quién se sienta con Jae - dijo Dahee convencida.

- ¡Uno, dos, tres, piedra, papel o tijera! - gritamos ambas.

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Me senté junto a mi compañero de pupitre y empecé a sacar todo mi material.

- Maldita... Yo podría haberlo conseguido. Tendría que haber sacado piedra - escuché como Dahee se queja detrás de mi.

- No se lo ha tomado muy bien, eh - dijo Jae riendo al lado mío.

- Eso parece - sonreí.

Había conseguido olvidarme de los siete chicos que me llevaban preocupando estos últimos días hasta que de repente entraron por la puerta.
Sí, todos.