¿Cómo Fue? #2 (Katniss Se Enamora de Peeta)

¿Cómo Fue?

Estamos terminando de preparar la mesa y el desayuno, cuando se me hace muy extraño no escuchar ningún ruido en toda la casa, o mejor dicho no escucho a Willow.

-¿Sigue dormida?- le pregunto a Peeta, mientras coloco los cubiertos en la mesa.

-Sí, antes de su bajar pase por su habitación y estaba tan dormida como un tronco-

-Qué raro, ella siempre despierta antes que nosotros- digo extrañada.

-¿Será porque anoche estuvo hasta medianoche saltando por toda la casa y hablando hasta por los codos?- pregunta sarcástico.

-¿Pero quién le dio chocolate antes de dormir cuando le dije que no lo hiciera?- respondo viéndolo fijamente y cruzándome de brazos.

-¿Cómo iba a saber que reaccionaría de esa manera?, además solo de di un poco- dice a la defensiva.

-Ya sabes cómo es, si de por si es hiperactiva y tú le das azúcar antes de dormir, era obvio que iba a comenzar a jugar como si fuera mediodía- digo mientras voy a la nevera a sacar un poco de jugo.

-¿Cuántas veces voy a tener que decir que lo siento?- dice en mi oído mientras me abraza por detrás.

-No sé, las que sean necesarias- digo mientras cierro la nevera y me volteo para quedar frente a él.

-¿Y si mejor hago esto?- dice antes de comenzar a besarme.

Siento como me recarga contra la nevera mientras profundiza el beso y yo entrelazo mis manos detrás de su nuca.

Seguimos así un rato más, hasta que rompemos el beso y digo.

-Sí, con eso te perdono-

-Te amo- dice antes de darme un ligero beso.

-Yo también te amo- respondo para después besarlo como lo habíamos hecho antes, pero somos interrumpidos por un grito.

-No, No, No, Es mía-

Es Willow quien entra corriendo hasta llegar a donde estamos y empuja a Peeta para que me suelte para luego aferrarse a mis piernas, dando a entender que quiere que la cargue.

Lo hago y se sostiene con sus brazos alrededor de mi cuello mientras mira a Peeta con sus pequeños ojos entrecerrados y le dice.

-Mía- ambos reímos ante la escena de Willow, ya que siempre que nos encuentra besándonos reacciona de esta manera.

-¿Quién?, ¿tu mamá?- Pregunta Peeta divertido, mientras pasa un brazo por mi cintura para acercarme a él y hacerla enojar.

-Sí, quítate- dice empujándolo para que me suelte.

-Está bien, tu ganas- responde este levantando las manos en signo de rendición.

-Sí Willow, soy tuya, pero solo si vas y te comes todo tu desayuno- le digo mientras la bajo y ella asiente entusiasmada y corre para irse a sentar al comedor, pero no sin antes voltear a vernos para asegurarse de que Peeta no se me acerque.

-Ahora resulta que soy suya- digo riendo.

-También eres mía, pero te puedo compartir con ella- dice abrazándome.

Está a punto de basarme, cuando lo detengo y le digo.

-Creo que lo mejor será ir con Willow, porque si te ve besándome otra vez no va a querer soltarme en ningún momento- digo tomándolo del brazo para luego dirigirnos al comedor.

Todo el desayuno nos lo pasamos riendo de las bromas que dice y hace Willow, siempre es así, y cada día sale con una nueva locura, cosa que nos alegra el día a Peeta y a mí.