[APH] [AU] Diario De Un Fundashi Periodista. (AsaKiku)

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Sugerí la idea de ir a la piscina, aprovechando que Arthur-san era libre -igual invité a Allistor-san, aunque me dijo algo que ignoré, y es el hecho de que... siga en casa de Gilbert-san-.

Arthur-san no se quería meter al agua, así que le dije que era perfecto para los romances de verano, y que lo hiciera.

Además, sé que es fundashi es negación. No lo nieguen.

Debo admitir que costó un poco, pero Allistor-san dejó que Manuel-kun fuera, y al final, todo estábamos allí, quemándonos.

Olvidamos el bloqueador solar.

Estaba cambiándome, cuando escuché hablar a Lovino-kun.

-Parece un tomate, maldición. ㅡAlfred-san trataba de aguantar la risa, pero puedo apostar que estaba celoso de ese comentario. Él si encontró el doble sentidoㅡ, Es la única manera en la que 'te comería'. ㅡHizo comillas con los dedos, al mismo tiempo que chocaba los cinco con Alfred-san.

Lo matará, lo presiento.

Entonces salí del baño, y sentí que Arthur-san se me quedó mirando... así que le comenté a Manuel-kun, que le dio un 'ligero' golpe en la cabeza. Quizás que le habrá dicho, ya que se sonrojó.

Después de unos minutos, entré a la piscina, y incité para que Arthur-san me acompañara; tenía fe en que lo haría.

¿Por qué nadie me comentó que no sabía nadar?.

Estaba asustado. ¡Podía morir!, ¡Necesitaba salvarlo!.

Allistor-san se lanzó a la piscina, lo sacó, y lo tumbó en el suelo.

Lo intenté, juro que intenté no llorar, pero estaba asustado.

Llegamos al hospital rápido, y ahí le practicaron primeros auxilios y a las horas nos dejaron entrar a verle.

Seguía asustado, y Alfred-san me abrazaba para poder calmarme.

Vimos como se movía ligeramente, y me separé de Alfred-san para acercarme a Arthur-san, pero claro, tenía que llegar Gilbert-san y hacer que Arthur-san, apenas despierto, se enfadara.

-¡Vayanse todos al carajo!. ㅡNos dijo a todos.

Entonces, fue cuando me di media vuelta, y con todo mi orgullo, salí de la sala.

¿Sabes? Es triste que la persona que te gusta, te rechace.

Sentí que algo se oprimía dentro de mí, y creo que traté de no llorar.

-Sécate esas lágrimas, Kiku. ㅡAntonio-san me abrazó por la espaldaㅡ, ¿Sabes? Se siente horrible que la persona que quieres te haga el feo. Lo sé. ㅡMe tomó de la mano, y me incitó a ir nuevamente a casa, diciendo que lo mejor era dormir.

Fueron muchas emociones para un solo día.